Tigrecito || Kooktae

Capítulo Veintiuno.

Los días pasaban y los exámenes de fin de curso estaban a casi nada. Los nervios de los estudiantes eran notorios, el esfuerzo por pasar era visto por los mismos profesores que sólo ignoraban y exigían de más a los pobres universitarios. 

Jeon era uno de ellos.

El pelinegro era conocido por no hacer exámenes como comunmente evalúan los profesores, él en cambio les hacia leer a sus estudiantes cualquier libro de interés, con el fin que -al llegar el día de evaluación- el estudiante se parase frente a la clase y dé una pequeña y propia reflexión acerca del libro que leyó. Su calificación era equivalente a las manos alzadas por parte de los demás alumnos estudiantes, que significaba el interés de estos hacia el libro en cuestión. 

Sin embargo, no todo era miel sobre hojuelas, y eso sin duda Jimin y Taehyung lo sabian, pues a pesar de tener las manos alzadas equivalentes a una aprobatoria, Jeon Jodido Jungkook lanzaba dos simples preguntitas.

Y es ahi donde todo se jodía.

-¿Qué libro eligiras para la prueba de Filosofía? -Tzuyu le pregunta a Jimin mientras inclina tiernamente su cabeza. Ambos estaban saliendo de esa misma clase.

-No sé, quiza una novela o cuento -responde sin interés alguno, por lo que la chica se ríe mientras niega con su cabeza, sus cabellos castaños moviéndose ante tal delicada acción.

-Hay un libro que me es de interés, pero no sé si esté traducida.

—Si gustas te acompaño a biblioteca y preguntamos –propone amablemente, recibiendo un asentimiento alegre por parte de la chica.

Es así que, encaminandose hacia la biblioteca, Jimin recibe un mensaje a su teléfono. Interrumpiendo la agradable conversación con la castaña, saca el aparato de su mochila, viendo en la pantalla que se trataba de un mensaje de su mejor amigo.

Tigrecito🐯

Holaaaaa
Mimi, me guardan asiento para la siguiente clase, por fis.
Estaré con mi papi un ratito.
Los quiero<3

Riendo sin gracia, Jimin responde con una afirmativa mientras sigue caminando a la par con la chica castaña, quien al oírlo, le mira interrogante.

—¿Pasa algo?

— El profesor Jeon citó a TaeTae en su oficina –responde desinteresadamente mientras guarda su teléfono

—¿Otra vez? –Jimin asiente —¿De qué crees que quiera hablarle?

—Ni idea, Tzu. Quizá luego nos cuente... En fin, ¿Me decías de ese chico Soobin?