Un regalo para Peter

5. Londres, lejos de casa

Narra Grace

Desperté y el aroma me invadió al igual que el temor, ¿en dónde estaba? Examiné el lugar y no vi a nadie cerca de mi. Yo me encontraba cubierta con una suave manta, y muy fina por lo visto, sentada en un elegante asiento.

-Veo que ya has despertado- oí la voz de una mujer, me giré al frente y la vi parada con una gran sonrisa, ropa que solo gente de dinero puede usar y un buen porte-.

-¿Y usted es?- me atreví a preguntarle-.

-Stella Hoult- me extendió su mano derecha para que la apretara cosa que no hice. Ella la bajó y continuó:- ¿Cuál es tu nombre?- me preguntó con una sonrisa. Entonces me puse a repasar lo único que recordaba: un hombre me había preguntado cierta dirección y le dije que no la sabía; luego desperté en una tipo jaula con una sábana encima que me cubría la vista del exterior, allí oía llantos y gritos desesperados de auxilio, de eso ya nada porque volví a quedar inconsciente. Así que ¿por qué habría de decirle mi nombre a esta mujer? ¿Y si era parte de aquello? Algo va mal, lo puedo sentir-.

-¿En dónde estoy?- ella se puso tensa y se sentó en el asiento de enfrente-.

-En un avión.

-Imposible- dije tratando de convencerme de que aquello era una total mentira de su parte-.

-Me temo que no lo es. Vamos directo a Londres, a tu nueva vida.

-¿Nueva vida?- dije asustada. Ella se limitó a asentir. Me quité la sábana con cierto orgullo y vi por la ventanilla de mi derecha y en efecto: estamos volando- Explíquese- le exigí sin despegar la vista de aquella ventanilla que me había enseñado mi futuro-.

-Serás princesa- dijo sin más-.

-Esto debe ser una broma- sentí mis ojos cristalizarse. La volteé a ver y ella negó- ¿Cómo que una princesa? A penas un rato me raptan y ahora...- tragué saliba para pasarme el nudo de la garganta- y ahora ya voy a otro lugar a "ser una princesa"- dije con ironía y haciendo comillas en las últimas palabras. Ella me miró sin expresión en su rostro-.

-Caíste en un lugar de mala muerte,- despegó su vista de la mía y respiró hondo- yo necesitaba a una chica que cumpliera con las expectativas de Peter...-la corté-.

-¿Peter? ¿Quién es Peter?

-El príncipe de Londres.- Una lágrima resbaló por mi mejilla derecha pero de inmediato me la limpié- No encontré a nadie. Me confiaron tal cosa que al principio se me hizo fácil de tan solo pensarlo, pero luego de buscar y buscar por cada rincón las ciudades me había dado por vencida, sin mencionar que tenía tiempo límite establecido;- se desahogó con lágrimas, por lo que me hizo sentir lástima- al salir de un orfanato un hombre, el cual no me dijo su nombre, se me acercó y me habló de hacer fácil mi búsqueda- tomó aire para continuar- por desesperación acepté ir con él- bajó la mirada lagrimosa- y te encontré a ti... Me pareciste perfecta para Peter...- hizo una pausa y aproveché para hablar-.

-¿Cómo pudo?- le reproché con lágrimas cayendo por mis mejillas. Ella intentó tomarme las manos pero de inmediato las quité-.

-Por favor entiendeme- me suplicó y yo negué-.

-Tengo familia, ¿lo sabía?- ella negó-.

-Por favor intentalo- sus ojos estaban rojos de las lágrimas al igual que sus mejillas-.

-¿Me compró?

-Stella, hemos llegado- le dijo una muchacha y ella asintió-.