—¡Ay, Dios! —colocó sus manos sobre su cara y rió como estúpida—. Juro por todo lo que amo en el mundo que si Zayn Malik no estuviese enamorado de ti, trataría incansablemente de hacerlo mío —sentí un pequeño calor en mi estómago cuando dijo la frase "enamorado de ti". 

—Él no está enamorado de mí, amiga —reí débilmente y me encogí de hombros.

—Vaya... Existen personas ingenuas y Melissa Hetfield —rodó sus ojos y me dio un pequeño empujón por mi brazo—. Es más que obvio, tonta.

—¡Si fuese tan obvio como dices tú, habría aceptado acompañarme a la puta cena con Ernie! —lo que había conseguido ocultar segundos antes yo misma lo había echado a perder. Olive frunció el ceño con fuerza y la expresión que consumió su rostro era de incredulidad en su máximo estado de pureza.

—Repite eso... 

—No es tan difícil de entender, Olive —apreté mis muelas y me levanté del sofá—. Le pregunté si podía acompañarme a casa de Ernie porque quería hacer una cena con su esposa y mi novio... —hice una pausa—. Le conté que Erns creía que yo tenía un novio porque hace tiempo... Ay, ni siquiera tiene sentido —puse las manos sobre mi rostro y suspiré otra vez—. Bueno, en pocas palabras, le dije que lo único que debía hacer era acompañarme y actuar como si fuese mi novio.

—Jó-de-me —dijo ella, levantándose también.

—No, no te jodo —rodé los ojos—. Lo único que hizo fue decirme 'vístete, iré a dejarte a casa, son casi las diez', ¡Y se enojó!

—Quizás no quería actuar como  tu novio... —la interrumpí.

—Sí, tal vez es tanto el desagrado que siente por mí que le pareció una idea horrible y por eso se enojó —intenté bromear y una falsa carcajada nació de mi pecho.

—Lo que quería decir es que... Quizás no quería actuar como tu novio, tal vez quiere serlo de verdad —se encogió de hombros y volvió a poner su culo en el sofá. Mi expresión fue de total confusión, y sentí que mi corazón comenzó a bombear sangre cada vez más rápido, logrando que me pusiera colorada.

—¡Deja de defenderlo, mala amiga! —le grité, negué un par de veces y fui caminando hacia mi habitación.


 Fue allí cuando me di cuenta que Layla seguía durmiendo plácidamente en el lado que normalmente era de Cuddles. Alcé mis cejas con frustración y me acosté junto a ella, observando el techo. Miles de pensamientos cruzaron mi mente, cientos de posibles escenas, decenas de recuerdos de la noche anterior y un par de situaciones que habían ocurrido desde que inició este programa de adaptación laboral. No iba a ignorar el hecho de que Zayn había tenido un gran avance en cuanto a mi persona desde que nos conocíamos; ahora era más tolerante, paciente y conversador. Recordaba que me había defendido un par de veces y que trató de enseñarme a conducir. Me salvó de dos posibles violaciones cuando patrullábamos por las calles de Nueva York... Bueno, me había permitido probar sus labios en tres ocasiones, y sus celos... ¡No podría olvidar sus celos jamás! 

Diablos. ¡Tal vez Olive tenía toda la puta razón!, pero entonces... ¿Por qué reaccionaría tan negativamente como  lo hizo en su casa? 

Me aterré.

El pitido de mi celular resonó dentro de mi brassier —lugar en que lo había puesto cuando salí de la casa de Malik. Lo tomé y vi que un número desconocido me había enviado un mensaje de texto. Lo abrí.

Eᴊᴇʀᴄᴇ ᴇʟ ᴄᴏɴᴛʀᴏʟ sᴏʙʀᴇ ᴍí || Z.MWhere stories live. Discover now