Infinite x Universal

Capítulo 22: Mirai Kuriyama #1

Capítulo 22: Mirai Kuriyama #1

Hachiman Hikigaya miró a la pequeña mujer mientras caminaba por el pasillo vacío hacia él con un balde en la cabeza y una espada hecha de un material pegajoso y goteante que definitivamente olía y parecía sangre.

"Senpai, ¿por qué está tan oscuro aquí?"

Se preguntó si ella estaba hablando con él. No es probable. Por lo que parece, no podía ver a través del cubo que cubría toda su cara. Por un segundo se preguntó cómo se había metido ella en este lío en particular. Pero, por supuesto, había cosas más peligrosas de las que preocuparse. Como la espada, por ejemplo, que estaba hecha de sangre.

No parecía un adorno que colgarías en la pared de tu sala de estar. La cosa parecía que podía cortar cosas. Carne por ejemplo. Suyo si no tenía cuidado al respecto.

"Kohai-san, ¿te importaría bajar tu arma? Estoy tratando de no ser empalado por tu espada".

Debió haber dicho algo mal porque la mujer loca del balde, como había comenzado a llamarla en su mente, ¿por qué no la llamaría loca?, caminaba con una espada y un balde en la cabeza. La mujer claramente tenía problemas, de repente se quedó muy quieta.

Era el tipo de quietud que asociaba con el peligro, los pocos segundos elegidos antes de un golpe, un golpe letal.

"¿Quién dijo eso? ¡Tú no eres senpai!" La niña chilló y se tambaleó torpemente sobre sus dos pies.

Incluso con la espada ondeando frente a su rostro, estaba un poco preocupado por ella. Luego pensó en el hecho de que caer sobre tu trasero nunca le hizo daño a nadie. Bueno, lo hizo, no iba a mentir. Pero no tuvo repercusiones a largo plazo.

"¿Eres de primer año?" preguntó Hachiman.

"Bueno, sí."

"Entonces soy tu senpai".

"¿Usted está?"

La espada hecha de sangre soltó una indirecta y agradeció a un dios en el que no creía del todo; tú tampoco lo harías si conocieras a dioses como Aqua. Aunque, no voy a mentir, Kazuma estaba bien en su libro, y se acercó a bucket-chan mientras la llamaba en su mente.

"Lo soy. Mi nombre es Hachiman Hikigaya. Estoy en segundo año en la Universidad de Neo Tokio. Y actualmente me estoy acercando a ti -"

"¡Eep!"

"¡No muevas esa cosa como un juguete! Casi pierdo un brazo ahí".

"Oh, lo siento. Esa fue una reacción instintiva".

"Tus reacciones instintivas son bastante mortales para mi gusto".

Entonces se me resbalaron las manos. Ella dijo, inocentemente. Bueno, tan inocentemente como uno podría hacerlo con una espada en una mano, mientras que la otra se retorcía nerviosamente. "¿Qué estás tratando de hacer, Hikigaya-senpai?"

"Estoy tratando de quitarte este balde de la cabeza".

"¿Qué cubo?" preguntó de una manera tan tonta.

"El que está en tu cabeza", respondió sin rodeos. "En serio, eres lo suficientemente mayor como para caminar con una espada en el campus, pero como un niño pequeño, te vuelves impotente cuando alguien te tira un balde en la cabeza como una especie de broma". Se inclinó hacia adelante y usando ambas manos levantó el balde de su rostro.

"¡Que desagradable!"

Esas fueron las primeras palabras que salieron de sus labios y mientras miraba su apariencia, una palabra le vino a la mente: linda. La mujer tenía un cuerpo pequeño con cabello color melocotón ondulado hasta la barbilla que estaba peinado en una melena con flecos que le llegaban a las cejas y ojos dorados con un tono de ámbar y marrón.