El trazo imperfecto

Apocalyptica - Not Strong Enough

And it's killing me when you're away
And I wanna leave, and I wanna stay
And I'm so confused, so hard to choose
Between the pleasure and the pain
And I know it's wrong, and I know it's right
Even if I try to win the fight
My heart would overrule my mind
And I'm not strong enough to stay away

Los Ángeles California, Oficinas Generales de Century Media

—Jefa, las ventas de la banda "Apocaliptic Berserk" están rompiendo los récords—decía Alastor a la silla que estaba de espaldas en la oficina de la gerente general de ventas de Century Medía.

Una chica de alta. con cabello pintado de color negro, ojos café claros, traía puesto una playera de la banda "Abominal Putridity" con unos jeans y unos tenis DC del mismo color; su oficina estaba decorada con discos de platino y de oro, fotos con bandas como "Sings of the Swarm", "Lorna Shore", y muchas otras, resaltando la foto de una chica peli azul en su escritorio.

Estaba con más tatuajes en su cuerpo de diferentes cosas, desde estrellas, golondrinas, incluso tenía en el cuello la letra "A" con las siglas abajo de sXe resaltando mucho la "X" en cursiva, lo cual significaba que ya no fumaba, tomaba ni se drogaba siendo Straigth Edge, todo esto siendo recuerdos de su pasado perdido.

Cuatro largos y tortuosos años que se había separado del amor de su vida, Astrid Lowllet. Ella había huido de sus amigos que la habían traicionado de la peor manera posible y a pesar de todo eso, los amaba y extrañaba como jamás lo había hecho, añoraba todo el tiempo que habían estado juntos, practicando con su difunta banda "Beyond The Light".

Tenía también cuatro años que no tocaba un bajo de manera profesional; su casa estaba llena de ellos, seguí practicando; ahora se dedicaba a ayudar a las bandas nuevas de la escena del metal, sobre todo el deathcore de firmar con la disquera, amaba producir música y ver la cara de las agrupaciones cuando les daban en físico su primer disco o EP.

Pero todo era vació, extrañaba su antigua vida, incluyendo a su padre, pero sobre todo, su corazón añoraba por Astrid, hacía cuatro años que no sabía de ella en concreto, sólo lo que le llegaba a decir Sayumi, si bien ya había perdonado todo, ella sabía que lo más probable el amor de su vida ya estuviera casada con alguien más. Este pensamiento la lastimaba mucho, pero a la vez la ponía feliz, significa que su gótica pudo encontrar la felicidad después de ella, ya no le molestaba, aprendió a lidiar con ello, todo estaba bien hoy en día, tenía el trabajo de sus sueños.

—Eso es perfecto Alastor, eso nos dará mayor patrocinio para seguir enfocándonos en el área de Band Camp. — Comentaba Fernanda observando los números en su computadora, siendo que habían alcanzado las quinientas mil reproducciones en Spotify y la venta de alrededor de cincuenta mil copias físicas a nivel nacional para una banda que solo tenía un EP.

En ese momento la cabeza de una jovencita rubia de escasos veinte años se asomaba a su oficina.

—El señor Lawrence quiere verla en su oficina señorita Lancaster.

—Voy en seguida, Alastor dile a Arthur que necesitamos concretar una cita con el House of Blues para que Apocaliptic tenga una tocada, no escatimes los recursos que tenemos. — Le ordenaba a su más confiable subordinado.

—Si jefa, ¡cuente con ello! — Asentía el joven de unos veintiocho años, con barba cerrada negra de un tanto alto, cabello largo del mismo color con unos ojos café muy cálidos.

Con ello salían de la oficina el chico en dirección a su cubículo mientras que Astrid se dirigía a la oficina más grande de su jefe.

Tocaba la puerta de caoba roja tres veces.