WINTER THINGS. |RenMin|

20.

el chino miró con sorpresa al coreano, levantándose pronto de la cama para acercarse a él y abrazarlo escondiéndose en su cuello mientras el mayor colgaba la llamada y arrojaba el celular al colchón así teniendo las manos libres, correspondiendo al abrazo casi temblando por lo que acababa de hacer. y ahí estuvieron abrazados por largos minutos,  desayunando después bastante cómodos riendo por las palabras que había usado el mayor para contestarle a su hermana.

estuvieron todo el día fuera, comiendo en diferentes lugares, yendo al cine y luego a una tienda de regalos donde jaemin le permitió a renjun elegir lo que quisiera para que fuera su regalo de su parte a pesar de que el chino ya sentía todo ese día como un hermoso regalo que no estaba muy seguro de merecer. llegaron al hogar de jaemin antes de las nueve de la noche, hacia demasiado frío como para seguir en la calle así que ya estaban ocupados besándose y tocándose ya muy cómodos con ello pues la noche anterior se había permitido llegar lo más lejos posible. aún así se separaron en poco tiempo y renjun prometió que volvería en un rato, quería ir a ver a su madre además de cambiar sus ropas por algo más cómodo.

—¿y? ¿qué tal te fue? —preguntó li mei tan pronto vió a su hijo entrar al departamento, escuchando con emoción todo lo que el feliz joven tenía para contarle.

renjun fue a su cuarto luego de estar un rato dando saltitos en la sala mientras le contaba todo lo qué pasó con jaemin a su progenitora, ella estaba muy emocionada por lo feliz que se veía su lindo pequeño, sin embargo, la enorme sonrisa del menor se borró cuando vió que su madre ya había preparado sus maletas para volver a china pronto. rápidamente el rubio volvió a la sala abrazándose con fuerza a la mujer escondiéndose entre sus brazos pensando en lo mucho que iba extrañarla, pero sabía que ella tenía que volver para trabajar y continuar con su vida en su país natal.

—¿cuando te irás? —preguntó el chico alejándose lentamente del abrazo pasando a tomar las delgadas manos de su madre.

—mañana en la noche, tu abuelo ya me pidió que regrese así que me conseguí un boleto para viajar pronto. podemos pasar la mañana juntos mañana antes de que vayas a trabajar y quiero que me prometas que vas a contestarme las llamadas cuando me vaya de aquí. —ella sonrió con mucha calma acariciando los dorsos de las manos de su hijo.

renjun asintió muchas veces y la abrazó con fuerza una vez más hasta que se empezó a hacer un poco más tarde y ambos tenían que descansar, el muchacho salió de su apartamento cuando su madre ya estaba dormid, dirigiéndose con calma hacia el de jaemin pero al acercarse a la puerta, que extrañamente estaba abierta, pudo escuchar como alguien le estaba gritando a su chico por lo cual corriendo regresó a su departamento para buscar a su madre, realmente le asustaba lo que podría estar pasando así que como si fuera un pequeño gatito estaba escondido en la espalda de la mujer mientras entraban lentamente al monoambiente esperando que todo eso haya sido una exageración de renjun y realidad las cosas estaban bien.

pero no era así..