"Eras rojo, yo azul y te gustaba que fuera así."
La chica popular con el chico popular; sin embargo, un secreto perturbador se encuentra dentro de aquella cámara que tanto se niega ella en soltar. La familia perfecta solo era una máscara de lo que e...
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MIN T/N
— ¡Eso fue asombroso! —exclamó con emoción mi novio. Después del almuerzo todos nos reunimos para gozar del agua y el sol, Yeonjun es muy bueno en las olas por lo que vi. Creí que solo sabía jugar futbol y hacer buenas estocadas en el sexo pero, ¡Ey, uno nunca termina de conocer a las personas!
— Lo sé, lo sé. Aprendes rápido —le di un pequeño beso y fue con Hoshi por una bebida.
— Si con rápido te refieres a casi tres horas viendo como se ahogaba, no sé qué puede ser "lento" —dijo el señor Park, volviendo del mar junto con su esposa. Yo reí por su comentario y por la cara de pánico de mi suegra.
— Es parte del proceso —aseguré—. ¿Cómo les fue?
— Mal —gruñó la señora—, detesto el agua. Me iré, tengo sueño e irritación —dio fuertes pisadas hasta sus hijos para recoger algunas pertenencias del bolso e irse.
— ¿Todo bien contigo?
— ¿Disculpe?
— Te ves algo incomoda, te remueves mucho. ¿Pasa algo?
Por Dios, T/N. ¿Cómo es te vas a excitar de solo pensar que el señor Park te nota?
— Oh, no es nada —sonreí—. Su esposa me recomendó un traje de baño y resultó no ser mi talla —hice una mueca nerviosa, no quería dar a su imaginación por mucho que deseara.
— ¿Por qué lo trajiste, entonces? —interrogó.
— Me dijo que me lo pusiera para los días que estemos aquí. Cuando lo vio en el centro comercial me lo recomendó hasta convencerme —rasqué mi nuca—, así que lo traje.
— Pues dudo que lo note si estás vestida de esa forma —carcajeó al verme completamente cubierta por leggins negros y una camisa grande de color morado. Tenía razón, parecía una loca—. ¿No te gusta broncearte?
— No, no es eso... Es que...—¡Jesús, pero...! ¿Por qué me pongo tan nerviosa, carajo— Como le dije, es incomodo. Mañana si regresamos se lo mostraré a ella apropiadamente y luego me cambiaré, realmente es molesto —dije. Había vuelto a la vida en un parpadeo.
— Genial, Jisoo se pondrá muy contenta. Ustedes casi no conviven, podrían pasear juntas en un rato. Yo me quedaré con los chicos aquí por más tiempo, porque quién aguanta a Yeonjun ahora con eso de surfear ya que le enseñaste.
Reímos y giramos en dirección a él. Se veía feliz conversando con su hermano mayor mientras bebían refrescos en la arena debajo de la sombrilla gigante que les daba sombra.
Una imagen hermosa, lástima lo que pasa en mi cabezota.
— Bien, me iré con ella —afirmé y comencé a caminar.
