Capítulo. 48

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Ashton.

La veo caminar sobre la arena con un traje de dos piezas que solo me daña la mente, tiene el cabello recogido pero mechones rebeldes se le salen por los lados, trae gafas que la hacen ver como una autentica modelo que se roba la mirada de todos.

Mujeres y hombres la miran mientras no deja de avanzar con el menton en alto y una sonrisa en la cara.

—Volví.

Se sienta a mi lado en la silla playera y mis manos actúan por voluntad propia acariciando sus piernas. Me sonríe y se pone los lentes por encima de la cabeza.

Estos días se pueden resumir en dos palabras; felicidad y paz.

Felicidad y paz es lo que somos cuando estamos solos.

Mi vida con ella ha sido complicada pero no por eso es triste, todo lo contrario, lo que hemos pasado podria decirse que nos acerca mas, hemos tenido problemas que crei jamas superariamos, pero lo hicimos.

De hecho, en cierto punto llegue a pensar que ella estaba conmigo por costumbre, me rechazo cantidad de veces y al final pensé que si seguiamos juntos era por el sexo esporádico, luego se abrio mas a mi, hizo cosas que me dejaron claro que ella no es de palabras, es de acciones.

El hecho de que este aqui conmigo, es sencillamente la prueba mas pura de su amor, de lo contrario, si no me quisiera jamas hubiera aceptado cuando aun sigo casado con Adele.

—Ten—Saca el bloqueador del bolso y me lo da mientras se pone de espaldas.

Me acomodo y me pongo en las manos para frotarlas y acariciarla con la loción.

—Que recorra tu cuerpo a plena luz del día no es buena idea.

Mi mano recorre la parte inferior de su espalda.

—Si sigues vas a causarme contusiones a causa de tanto sexo.

Me hace reir y me acerco a besarle la boca

Tiene razón estos días hemos descansado poco, si no estoy encima de ella es porqué ella esta encima de mi.

—No es mi culpa, tu eres quien lo provoca—Tomo las tiras que le sostienen el bikini negro—Solo mira lo que traes puesto.

Se voltea hacia mi con una mirada incrédula y la tomo de la cara besándole los labios antes de que pueda hablar.

—Vamos al agua—Se levanta y tira de mis manos haciéndo que la imite.

La abrazo por detras mientras caminamos a la orilla y beso su cuello sintiendo las miradas sobre ambos.

Lucia llama la atención de manera increible, no se si es el cabello o las curvas que tiene pero jamás pasaria desapercivida y es lo que me prende, saber que la tengo solo para mi.

La suelto y me tiro a las aguas celestes esperando que ella haga lo mismo pero la veo  negar cuando salgo sacudiendome el pelo.

—No se nadar y estas hasta el fondo. Se supone que veniamos a la orilla.

Rueda los ojos haciéndome reir y camina menos de 5 pasos hacia adentro

Me acerco a ella y niega cuando sabe las intenciones que llevo.

—Yo voy a sostenerte.

—¡No!—La tomo de la mano cuando intenta irse—¡Suéltame no quiero!

Se empieza a hiperventilar cuando la tomo de los antebrazos caminando hacía atras.

—Lucia no voy a soltarte.

—¡No quiero!—Alza la voz y la suelto cuando la cara le cambia a panico.

Inefables [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora