Toque de queda | Hero Fiennes

Capítulo 61. H | Alma rota

Después de mesessss, aquí nuevo cap de TDQ, maybe sí ocupan adentrarse en contexto leyendo algunos caps anteriores jsjs
Que lo disfruten, besosss <3

Hero

—Esto tiene que ser una broma.

El viaje desde Detroit hasta Nueva York en automóvil ha durado más de lo planeado. Tan solo quiero poner los pies en tierra y arrancar todo el sudor que se ha secado sobre mi piel en repetidas ocasiones. En el trayecto solo visualizaba en mi cabeza la viva imagen de mi hermano, seguro estaría orgulloso de por fin ponerle un alto al hijo de perra que ha causado un sinfín de problemas. Por otro lado, no dejo de escuchar su voz en mi cabeza, culpándome por no haber sido lo suficientemente bueno para cuidar de su chica.

Una parte de mí sabe que me he esforzado lo suficiente, la otra, se empeña en condenarme.

Solo deseo que Emily esté bien.

Diez hombres viajan junto a Frank, Aaron y yo, y todos ellos se dividen en autos diferentes. La comunicación entre cada auto es sencilla gracias a los radios que Frank les facilitó gracias a sus amigos en la policía, estos eran difíciles de rastrear. Con estos mismos, Aaron, junto a otro grupo de idiotas se enfocaron en que el trayecto fuera más estresante al estar contándose chistes absurdos. Alguna que otra vez mencionaron tirarse a la hermana de uno de ellos, a lo que por un momento se desató una batalla de insultos en donde el hombre prometió romperles la cara si seguían hablando de su hermana.

Durante todo el trayecto, ninguna complicación se presentó. Todo estaba bien, demasiado bien. Hasta ahora.

En el momento justo cuando entramos al nuevo Estado, una hilera de camionetas se visualizaron fuera de la ancha carretera y dentro de ellas también a varios hombres armados dispuestos a atacar si así lo necesitaran. 

—Él sabía que vendríamos.— Aaron habla, desde la parte trasera del auto.

—¿Por qué no hacen nada?

—Seguro es orden de Travis. Estamos jodidos— Frank lleva una de sus manos hacia su frente, mientras que con la otra procura seguir en el mismo carril, evitando moverse si quiera un centímetro. —. Aaron, diles que no frenen, el plan sigue tal cual.

Aaron toma el radio entre sus manos, presiona un botón y comienza a hablar:

—Bien, escuchen todos: no se detengan ni se desvíen del carril. Si es una trampa, no hay que caer en ella, ¿entendido?

—Entendido.

—De acuerdo.

—Mierda, estos cabrones tienen mejores armas. ¿De dónde carajos Travis consiguió tantos hombres?

—Owen, tienes que concentrarte.— Aaron rueda los ojos mientras maldice por lo bajo.

—Bien, entendido.

—Antes Travis solo te tenía a ti y a un par de perros más— Frank me mira. —. Mira hasta dónde ha llegado. Este cabrón dejó de ser un problema local para convertirse en uno nacional. Si nosotros no conseguimos su cabeza, seguro el FBI sí.

—Planeo ser más rápido que el FBI.— respondí.

Ninguno de los hombres hacen nada: ni comienzan a disparar ni toman la iniciativa de seguirnos. Seguro fue una estrategia de Travis para hacernos saber que él va un paso más adelante que nosotros. 

Observo por el retrovisor para asegurarme de que el resto de los hombres de Frank vengan cerca y no haya ningún contratiempo.

El viejo a mi lado continúa el camino hacia llegar a una gasolinera junto a una tienda altamente descuidada, cuando observo hacia el interior de ella tan solo veo a un pobre anciano en el mostrador leyendo una revista que seguro tiene años de antigüedad. Justo aquí, es en donde el resto de los autos detrás de nosotros rompen formación para tomar un descanso. Estamos kilómetros lejos desde la entrada al Estado, si algún hombre de Travis estuviese siguiéndonos, tendríamos algún tiempo para escapar.