Capitulo 29

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Lan Xichen estaba sentado en su escritorio, preocupado sin fin. Habían pasado horas desde que alguien vio a Wei Wuxian, todavía no había señales de él en ninguna parte de la mansión, incluso con todos los sirvientes buscando y en alerta máxima. Por supuesto, lógicamente sabía que no debería estar fuera de sí de esta manera, su mal presentimiento se había convertido durante esas pocas horas en un pavor serio.

No sabía de dónde venía exactamente, tampoco conocía muy bien al chico. Por alguna razón, cuando lo vio por primera vez en las puertas, una alarma había sonado dentro de su cabeza por su comportamiento, a menudo tenía que ver con sirvientes con actitudes similares después de todo. Además, había algo realmente inquietante en el niño y su pasado que aún no había descubierto por completo.

Ya estaba pensando en extender la búsqueda afuera, bastante seguro ahora de que el chico estaba en realidad en algún lugar allá afuera. Estaba preocupado por su salud, el clima de hoy dejaba mucho que desear y la tormenta empeoraba cada vez más. Sin embargo, todavía dudaba, si enviaba a los otros sirvientes en busca de Wei Wuxian, solo habría más de ellos en peligro.

Después de un largo rato de cavilar sobre ello, finalmente llegó a la conclusión de que enviaría un grupo de búsqueda a pesar de todo; el chico apenas tenía catorce años, en realidad todavía era un niño, que podía decir lo que le pudo haber pasado. Se imaginó que estaría fuera de sí si Lan Wangji se hubiera perdido en algún lugar, posiblemente en peligro o herido. No dudaría en utilizar cualquier medio para encontrarlo.

Antes de que pudiera llamar a cualquier sirviente y comunicarles su decisión, alguien llamó a su puerta. Inmediatamente se animó, pensando que era alguien que venía a decirle que el niño había sido encontrado sano y salvo, e invitó a la persona a entrar. Se dirigía hacia la puerta para darles la bienvenida cuando se quedó paralizado en el acto, el visitante no era quien esperaba.

Lan Qiren entró en su estudio como si le perteneciera, visiblemente echando humo de rabia. Se detuvo en seco frente a Lan Xichen, sus ojos dispararon luces. Estaba muy claro que su tío estaba de mal humor y se acercó a él para quejarse. Lan Xichen pudo pensar en varias razones por las que habría despertado la ira de Lan Qiren, pero una se destacó a la luz de los eventos recientes: su interés en Wei Wuxian y la búsqueda en curso del niño.

Lan Xichen respiró hondo para calmarse, no sería bueno que ambos se emocionasen, su encuentro solo se convertiría en una discusión. No había sentido para hablar con su tío mientras estaba en un estado tan enojado, primero necesitaba calmarlo. Sin embargo, fue más fácil decirlo que hacerlo.

Lan Xichen educó su expresión en una agradable neutralidad y se enfrentó a Lan Qiren, hablando muy cortés y tranquilamente: “Tío, qué agradable sorpresa. ¿Qué puedo hacer por ti?"

***

Lan Qiren estaba sentado en su oficina, revisando una queja especialmente complicada de una de las ciudades bajo la supervisión de la Mansión Cloud Recesses, bajo su supervisión. Había terminado su almuerzo tardío que solía tomar en su escritorio de trabajo y un criado acababa de llegar a recoger los platos. No esperaba a nadie durante toda la tarde, había declarado específicamente que no deseaba que lo molestaran.

Después de un rato, no pudo concentrarse debido a una conmoción afuera; podía oír pasos que sonaban incesantemente fuera de su puerta y murmullos bajos. Se dio cuenta de que ya estaba sucediendo durante al menos una hora más o menos. Su paciencia se estaba agotando cuando de repente alguien llamó a su puerta.

Gritó para que entrara el intruso inoportuno. Algo debe haber sucedido, de lo contrario, los sirvientes sabían que era mejor no inmiscuirse en su trabajo si no había una emergencia.

Un criado ruborizado y sin aliento entró y le hizo una reverencia. Lan Qiren le frunció el ceño: "¿Qué es?"

El sirviente se inclinó de nuevo y explicó: “Maestro, el joven maestro Lan regresó y estaba preguntando por el paradero del joven maestro Wei. No podemos encontrarlo en ningún lugar dentro de la mansión. ¿Quizás lo has visto recientemente?

Lan Qiren se sorprendió, ¿por qué Lan Xichen iría a buscar a Wei Wuxian y dónde podría estar el niño si no estaba dentro de Cloud Recesses Manor? Entonces recordó esta mañana, cómo encontró a Wei Wuxian afuera en el patio con los conejos; no podría estar allí de nuevo, ¿verdad? Se aseguró de decirle que no deambulara sin supervisión.

¿Qué estaba haciendo el pequeño alborotador ahora? Seguramente nada bueno. Pero, ¿adónde había ido con un clima tan diabólico? Aunque podría estar escondido a propósito en algún lugar adentro y hacer que los sirvientes pasen un momento difícil buscándolo, Lan Qiren realmente no creía en esta versión. Los sirvientes de Cloud Recesses Manor siempre fueron muy minuciosos mientras cumplían con sus deberes, si Wei Wuxian estuviera en algún lugar adentro, ya lo habrían encontrado.

Eso dejaba solo una opción, el chico debe estar afuera; había varios lugares donde podía esconderse de la tormenta y causar daños. Lan Qiren podía recordar una serie de historias que describían las escapadas del niño con los caballos o las bromas preparadas en el jardín y las casas de almacenamiento para cualquier víctima desprevenida. ¿Qué estaba planeando el chico esta vez?

Lan Qiren dejó al sirviente parado en su oficina y marchó en dirección al estudio de Lan Xichen, necesitaba tener la información más reciente de inmediato. Esperaba que Wei Wuxian ya hubiera sido encontrado, antes de que pudiera hacer una broma o causar algún daño.

Al abrirse paso a través de la mansión, vio que había caos por todas partes; todos los sirvientes estaban alborotados, buscando frenéticamente incluso los escondites más improbables. Lan Qiren no apreció en absoluto que su hogar tranquilo y silencioso fuera de repente tan ruidoso y lleno de gente. Le estaba dando dolor de cabeza; ¡Y todo fue culpa de Wei Wuxian!

Su ira estaba aumentando constantemente todo el tiempo, hasta que finalmente llegó al estudio de su sobrino y se obligó a no irrumpir de inmediato, sino a golpear. Fue invitado a entrar en un segundo, la voz de Lan Xichen sonaba inusualmente angustiada, casi en pánico. Tomó a Lan Qiren por sorpresa, rara vez escuchó a su sobrino mayor hablar así.

Cuando abrió la puerta, vio que los ojos de Lan Xichen se agrandaron por una fracción de segundo; reconociéndolo, rápidamente educó su expresión y preguntó en su tono habitual: “Tío, qué agradable sorpresa. ¿Qué puedo hacer por ti?"

¿No sonreirás para mí? (Пσ sιяνιєη∂σ мαs) ʟɪʙʀᴏ 1Where stories live. Discover now