Árboles y Sol.

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Abrió los ojos lenta y pesadamente...
Cada vez que los abría, la luz de la habitación la lastimaba y volvía a cerrarlos, volviendo a caer presa del agotamiento.
No sabía cuánto tiempo estuvo así, pero en algún punto, logró acostumbrarse a la luminosa habitación de a poco hasta que finalmente, todo fue claro...

------ Huummnn... ------ suspiró y se removió pues en su lecho, suave y con cuidado, pasando a tallarse un poco los ojos y posteriormente, poniendo su atención sobre su abdomen... ------- Hola bebés... ------ saludó a sus aún no nacidos hijos, acariciando su barriga suavemente con una de sus manos, mientras con la otra se apoyaba erguida sobre la cama del hospital. -------- Están bien? --------- Sintió su corazón apretarse al no recibir respuesta alguna por parte de los no natos... Antes solían moverse mucho si les hablaba y los tocaba, pero ahora, de momento, no hubo nada.
Suspiró pesadamente, auyentando los pensamientos y sentimientos negativos y evitando llorar... Sabía que si quería que sus hijos fueran fuertes, ella tendría que serlo también.

--------- Lo lamento, mis niños... ------- siguió hablándoles --------- Lamento mucho todo... ------- Suspiró. -------- No importa lo que pase, bien?  Vamos a protegerlos.

Dicho eso, la joven se dispuso a dirigir su mirada a uno de los monitores que estaban junto a su cama, con la intención de reconocer los signos vitales de sus no nacidos hijos, sin embargo, su sorpresa fue tal al toparse con la imagen de al menos media docena de animales cuadrúpedos tumbados en el suelo cercano...

------ Ah! ------- Soltó la joven en un grito ahogado, despertando así al que parecía ser el más pequeño del grupo de animales, haciéndolo exaltarse...

---------- Aaah!!! Que?! Que pasa?! Intrusos??! ------- Exclamaba el viejo Pakkun mirando a todos lados, despertando al resto de los perros...

-------- Pa... Pakkun??!!! ----- Reconoció Tenten con inmensa sorpresa... Estaba soñando a caso??!

-------- Oh! Hola, niña! Cuánto tiempo sin vernos. ------- Saludó el viejo perro con una sonrisa nerviosa y rascándose detrás de una oreja.

-------- P... Pero... Qué hacen aquí??!------ cuestionó sin poder salir aún de su sorpresa, viendo al resto de los Ninken que ya estaban espabilados...

-------- Kakashi nos trajo de vuelta del retiro.  ------ Explicó Pakkun.------ O mejor dicho el "Sexto Hokague".

------- Pero... Por qué??!

-------- Cómo que por qué?? Porque al parecer necesitas niñeras, niña.

------- Disculpa?? Yo no necesito...!!

En ese momento la puerta de la habitación se abrió suavemente, dejando ver la inesperada figura del enmascarado peliblanco...

------- Oh! Tenten! Estás despierta! ------ Expresó el veterano aparentemente alegre mientras entraba a la habitación, cerrando tras de sí la puerta.

------- Se... Sexto...??? Qué... Que hace aquí??

------- Humn, pues... Pensé en venir a traer a Pakkun y al resto personalmente y como noté que Hinata era la única aquí por el momento, la envié a casa y me ofrecí a quedarme para que estuviera más tranquila. -------- Explicó despreocupadamente con los hombros encogidos, tal como era su modo natural...

------- No tenía que hacerlo, Sexto... Debe tener prioridades que...

------- Bueno... ------- intervenía el peliblanco pasando a sentarse tranquilamente sobre una silla que estaba recargada en la pared al lado de la cama. -------- de momento ésta es una de esas prioridades... ------- Puso sus manos sobre sus rodillas y cambiando a un tono y una expresión más seria, le dijo a la joven: --------- Hasta que Neji pueda estar aquí contigo, todos vamos a cuidarte, Tenten, de acuerdo? ------- una sonrisa de reflejó en el rostro del Hatake, aún a través de su máscara oscura.
Tenten supo entonces que aquello era como un boto de confianza, pero sobre todo de estima... Kakashi podría ser el Sexto Hokague y su superior, pero de alguna manera, él también formaba parte de su círculo selecto de confianza... De su familia... Era como un tío, siendo que era el mejor amigo del hombre que la trataba como una hija... Y él parecía sentirse así también. Parecía saberse y sentirse parte de ese lazo, cosa que a ella le reconfortaba mucho. No solo por ella misma, sino por él. A fin de cuentas, Kakashi Hatake no poseía una familia de sangre... Él, al igual que ella misma, Naruto, Sasuke, Lee y muchos otros, había perdido todo hacia ya tiempo,  pero, seguramente sin darse cuenta, había construido su propio círculo. Su propio hogar. Y tal vez, insistir en rechazar su ayuda, sería quitarle su lugar en ese círculo y el significado que para ella tenía, solo  para verlo solo como su superior...

Lo que debió ser.Where stories live. Discover now