La niña de mi vida ©

Protección

Primer día de clases. Genial, voy sola. Pau me ha llamado esta mañana deseándome buena suerte. La he odiado un poco por abandonarme de esa manera pero sigo feliz porque ella lo está. Nadia, quien se ha convertido en mi única compañía real me ha preparado el desayuno.

−El chofer va a llevarte, les señor Silver me pidió que te diera esto

Me entrega en las manos un sobre que abro de inmediato. Dentro hay una tarjeta de crédito.

−¿Para qué?

−Para que gastes obviamente –me dice Nadia con una sonrisa

−No puedo aceptarla, no puedo es... demasiado

−Oye tranquila, solo úsala si es necesario –me sonríe para tranquilizarme y lo logra

El chofer me está esperando en la entrada. Subo nerviosa al auto y comienza mi camino a la escuela. Nuevo semestre, nuevos problemas. Viejos y horribles compañeros. Héctor,  el chofer se estaciona en la entrada de la preparatoria.

−Que tenga buen día señorita Laurence

−Muchas gracias Héctor

−Parare a recogerla a la salida

−Si no te importa me encantaría poder tomar el metro

−Está bien señorita, si cambia de opinión solo hágamelo saber

−Tengo tu numero –le digo en una sonrisa luego bajo del auto

Ni siquiera tuve tiempo de pisar el primer escalón cuando Calvin aparece. El tipo es un pesado, clásico chico líder del equipo futbol, rico y que piensa que puede tener lo que quiere solo porque es "guapo". Ha estado molestándome desde siempre, pero claro que yo para nada estoy interesada.

−Hola, hola Tori

−Largo Calvin

−Oye no seas grosera, solo quiero hablar contigo un poquito, te extrañe todas las vacaciones

−Lo siento pero no puedo decir lo mismo

−Vamos Tori, habrá una fiesta de bienvenida

−Eso es para los de primer semestre

−Pero eso no significa que no podamos ir, anda Tori

El muy idiota me toma por la cintura y me atrae hacia él.

−Deja ya Calvin

−Solo quiero saludarte

−Tori

Calvin me suelta al escuchar que me nombrar. Me giro confundida y veo a Nick. Se acerca a mí de inmediato.

−Nick –le digo sorprendida por verlo

−¿Todo bien? –pregunta viendo hacia Calvin

−Si

−Todo bien, no es tu asunto

−Será mi asunto si me enteró que estas molestándola

−¿Y tú quién eres?

−Calvin lárgate ya

Calvin mira una vez más a Nick antes de irse. Me giro de nuevo hacia Nick para saludarlo como es debido.

−¿Qué pasa con él?

−Diablos no es nada, ha estado molestándome desde el primer semestre

−¿Jamás lo has acusado?

−Siendo una becada no tengo voz ni voto aquí

−Bueno pero ya no lo eres

A veces me es difícil recordarlo.