Capítulo 9

403 31 15
                                    


Cuando el último día en Italia llegó compré souvenirs para mis amigas.
Viajamos nuevamente en el avión privado, al llegar al aeropuerto todo se descontroló, miles de paparazzis y periodistas nos persiguieron.
-¿Es cierto que se casaron?-nos preguntó una periodista.
Me sentí intimidada, Peter en todo momento me sostuvo la mano, caminamos hasta subirnos al auto que nos había pasado a buscar.
-Te dejo en tu departamento, ¿no?-quiso saber, elevó sus cejas.
-¿Acaso queres que me mude con vos? Y seguir alimentando rumores...-me reí, cuando Peter me miró se puso algo serio- ya hicimos demasiadas locuras..
-Esa es una propuesta que quería hacerte...-empezó a hablarme completamente nervioso-tengo que dar una imagen de seriedad, ya me mandé una, me fui a Italia dejando todo, soy dueño de algo importante, las personas no me van a tomar enserio si creen que me paseo por ahí con una chica que conocí hace días..
-Realmente no hiciste nada serio desde que te conocí-coincidí cruzándome de brazos- Peter no te conozco del todo..
-Pero podes seguir conociéndome, pienso darte tu espacio, tu propia habitación, necesito que me ayudes por un tiempo-llevó sus manos a su cara, suspiró.
-Todo es una completa locura-me quedé con la mirada perdida... ¿Ayudar a mi enemigo número uno? ¿Sería bueno?
Al cabo de un rato asentí con la cabeza, mejor tener a los enemigos de amigos.
-Esta bien.. Pienso ayudarte, pero en la semana no te metas en mis asuntos, en mis negocios, no me espíes porque soy tu competencia-eso último lo inventé.
Peter le dio la orden a su chofer de que nos llevara a su departamento, al llegar me sorprendí del ventanal, la vista.
-Lo mejor de este lugar eh-me sonrió.
Asentí con la cabeza y me puse a recorrer el living, vi varios portarretratos con fotos, una en particular me llamó la atención, mi mamá alegre, Peter abrazándola, ambos riéndose.
Se me formó un nudo horrible en el estómago, eso me recordó el porque estoy donde estoy, que tengo que seguir hasta lograr mi objetivo.
-Ella era Adela..-la voz de Peter se aflojó, me atrapó mirando la foto- gran amor..
Noté que su energía cambió, se puso sensible.
-¿Que pasó?-le pregunté aún sabiendo la respuesta, tenía que hacerlo sufrir, lentamente, para después dar mi gran golpe.
-Un accidente de transito-se le cayeron unas lágrimas, se tapó la cara para que no lo vea mal-perdón, todavía me afecta.. Nosotros habíamos discutido y ella se fue, ambos estábamos nerviosos, ella sentía que su vida conmigo no era su vida real.. Me dijo que sentía un vacío... y tan solo se fue.. Y se fue bien bien lejos
Peter me abrazó completamente rendido ante el golpe emocional, eso me sorprendió. Sus palabras, lo que me contó me sonó bastante real, él sí la amaba... ¿Y lo otro que me dijo? Lo que se supone que sentía mi mamá...
Me quedé pensando en eso mientras Peter estaba como un nene entre mis brazos, se apartó al cabo de un rato.
-Hagamos algo, lo que quieras-cambió de tema- podemos hacer lo que quieras.. Lo que sea
Noté que me había propuesto eso más que nada para distraerse a si mismo.
-¿Tenes harina? Podemos cocinar.. Intentarlo... Vos sos malo.. Yo soy mala.. Veamos que puede salir de eso-elevé mis cejas y esbocé una pequeña sonrisa, no podía negarme un rato de diversión, lo necesitaba para que los días a su lado me sean más leves.
Peter trajo bastantes cosas a la larga mesa de su cocina.
-¿Pasta? Ñoquis podemos hacer.. Es mi plato preferido-asentí con la cabeza.
-Yo también soy fan de la pasta.. Pero mi favorito son los sorrentinos rellenos-me sonrió/ pero hoy hacemos ñoquis
Busqué una receta en internet y nos pusimos a seguir los pasos, en un momento paramos de intentarlo porque Peter me persiguió por todo el departamento tirándome harina, cuando volvimos a la cocina me fue inevitable no reírme.
-Volvamos a lo que nos importa, ¡y mucho! La comida.. A este paso vamos a terminar comiendo nada..-elevé mis cejas.
Peter leyó los pasos siguientes de la receta, tiramos la pasta al agua, cuando los ñoquis empezaron a flotar los sacamos con un colador, les tiramos salsa de tomate y él nos sirvió en los platos.
-La hora de la verdad-Peter se rió, probamos bocado y me sorprendí.
-¡Nos salió bien!-celebré alegre, seguí comiendo y Peter chocó su mano con la mía.
-No nos tenía fe, pero parece que hacemos un buen equipo..-me sonrió y se quedó mirándome, después cambió nuevamente de tema-¿pedimos helado?
-Claro-acepté poniéndome de pie para levantar las cosas, Peter se apresuró a sacarme los platos de las manos y meterlos en el lavavajillas.
El helado llego a la media hora, nos quedamos mirando un musical, uno que yo amaba, El gran showman, me puse a cantar las canciones, cuando terminó y volteé Peter estaba mirándome, se me vino a la mente lo que me dijeron mis amigas, lo tengo casi a mis pies, casi, no del todo, él sigue enamorado del fantasma de mi mamá, tengo que desplazarla, tengo que hacer que se enamore de mi.
Dejé el helado de lado y me acerqué a Peter, le lamí la boca sensualmente, mirando a sus ojos verdes y demasiado expresivos, su respiración se acelero.
Dejé un besito donde tenía un lunar.
Él fue subiendo su mano por mi espalda debajo de mi remera, desabrochó mi corpiño, se quedo con este en su mano, lo tiro al suelo.
En menos de lo esperado estábamos besándonos con desesperación, lo empujé contra la cama y con mi objetivo en mente lo hice, recorrí cada parte de su cuerpo con mis manos.
Todo lo que estaba planeando estaba saliendo mejor, eso hizo que sonriera, esta sí fue una sonrisa sincera, Peter la vio creyendo que era por las locuras que estábamos haciendo, también me sonrió, me acarició el pelo.
-Sos... Sos tan linda cuando sonreír-sus palabras hicieron que una serie de sensaciones me invadan y termine poniéndome colorada, la respiración se me acelero, maldito y traidor cuerpo.
Peter me acarició una mejilla, besó mi frente.
-Mariana siento que puedo confiar en vos-eso lo dijo rozando su nariz con la mía.
Pensé que tenía que ser sincera en algo más para que mi plan funcione.
-Decime Lali
A Peter se le formó una sonrisa sobre sus labios.
-¿Lali?-me preguntó sorprendido.
-Lali..-asentí con la cabeza- quienes me conocen me dicen así
-Así que vas a dejar que realmente te conozca..-me miró firmemente a los ojos- siento.. Siento que a pesar de la química y lo que me contaste, siento que falta mucho por conocer... Que hay una barrera entre los dos.. Que estás escondiéndome algo..
El poder de la mirada.. Una mirada puede revelar mucha información, Peter me desnudó tan solo con una mirada.
Me puse nerviosa y la respiración se me acelero.
-Ya vas a ir conociéndome...-le respondí tratando de rajarme.
Corrió el pelo de mi cara para mirarme otra vez.
-¿Que escondes Lali?-mordió sus labios sin bajar sus ojos, ese simple gesto me distrajo.
-Tan solo conoceme-volví a repetir.
Esta vez lo distraje yo besándolo, era un beso intenso hasta que se fue haciendo suave, su dulzura me dejó sorprendida, me tomó desprevenida, hizo un toquecito sobre mi nariz y me sonrió.
-Pienso hacerlo, dalo por hecho-me lo susurró sobre mi boca.

En mi esenciaWhere stories live. Discover now