Chris Evans | One Shots

O.S 12: "The bookstore boy"

|Chris Evans|

Verano en Boston. Si había una época que disfrutaba mucho de mi ciudad natal, era el comienzo del verano. Ir a la librería en la mañana por un nuevo libro que leería en las vacaciones, salir en las noches con mis mejores amigos o hacer campamentos con mis sobrinos son de las cosas que más disfruto de esta temporada.
Hoy decidí ir por un nuevo libro, por lo que me acerqué a la inmensa librería que habían reinaugurado hace unos meses en el centro. Aquel lugar lo había visitado tantas veces durante mi vida que me daba placer ver que lo hayan restaurado.
Subo las viejas escaleras de madera que ahora lucen pulcras y brillosas, y comienzo a buscar el libro que me recomendaron.
Luego de leer atentamente varios títulos, localizo el que necesito pero noto que está algo alto como para que lo alcance. Miro hacia los lados para ver si hay algún empleado pero solo noto a un muchacho que está leyendo la contratapa de un libro a unos metros de mi.

-Hola-saludé al acercarme-disculpa que te moleste-comencé a decir pero me detuve al ver a quien le estaba hablando.

-Hola-saludó Chris con una tierna risa al ver mi vergüenza- no me molestas, dime

-¿Podrías alcanzarme un libro?-reí avergonzada-claramente no llego a el

-Claro, no hay problema-dijo Chris amablemente.

Intentando mantener la compostura, volví al lugar donde estaba y le señalé el libro que necesitaba. Con solo estirar su brazo y sin necesidad de hacer ningún esfuerzo más, Chris tomó el libro y me lo entregó.

-Gracias-dije sonriente pero algo ruborizada ya que su presencia me intimidaba.

-No hay de que-respondió Chris- me alegra saber que ayudé a que consiguieras un gran libro

-¿Ya lo leíste?-pregunté curiosa.

-Si y es muy bueno-aseguró con una sonrisa.

-Bueno, si me lo recomienda el Cap, debe ser muy bueno-me animé a decir algo ruborizada, logrando que Chris me regalara una hermosa risa-gracias por la ayuda-dije nuevamente- y el libro que estabas viendo, es excelente-comenté mientras daba unos pasos hacia atrás para dirigirme a la escalera.

-Lo voy a tener en cuenta-dijo Chris sonriente- fue un gusto

-Lo mismo digo-aseguré al comenzar a bajar la escalera.

Al llegar a la planta baja, di un vistazo a donde estaba Chris y reí algo atontada al ver que me mostraba que había elegido el libro que le recomendé.
Luego de pagar lo que compré, salí de aquel lugar con una sonrisa estúpida en el rostro. La verdad es que, ¿quién no se quedaría así luego de conocer a uno de los hombres más hermosos del planeta? Sería una locura no reaccionar ante tal hombre, y este en especial, se quedó en mi cabeza todo el día.

Pasadas las 20hs me reuní con mi mejor amiga en un bar del centro ya que hace meses no la veía.
Al entrar pude divisar como su mano se movía agitadamente a unos metros. Me acerqué a ella y ni bien se levantó de su asiento, la envolví en mis brazos.