One Shots Camren G!P

Ella es la chica (5ta Parte Camila G!P)

El levante del duro piso para así girarla y pegarla a la encimera de mármol, mis manos viajaron desde sus hombros hasta sus glúteos los cuales amase con todo el placer del mundo, mientras que mi boca se encargaba de besar su terso cuello pálido.

Era como una droga que ahora luego de probarla no podía apartarme de ella y aunque lo quisiese mi cuerpo y mis sentimientos no me alejarían. Sin sus manos recorrer mis mejillas suavemente círculos con sus pulgares para que justo cuando me encontré con su mirada oscura una sonrisa floreciera en sus preciosos labios, que no tarde ni un segundo más en atacar hambrientamente, mi beso no iba más allá de lo que ansiaba, pero al parecer la forma en la que ella lo hacía me pedía más ¿Y quién soy yo para negárselo?

Sentí sus manos recorrer mis cuerpo hasta que dio con mi abdomen, paso su dedo índice hasta llegar al inicio de mi miembro, logrando estremecerme, aún tenía una mano en mi mejilla para que no me apartase del beso, pero mis labios entre abiertos dejaban notar bastante mi excitación, cuando en ella una sonrisa en medio del beso.

Mis dedos se encajaron en su cintura mientras tomo todo mi miembro de arriba a abajo, ya no coherente en este momento puedo pensar, pero a pesar de todo una sola cosa pasaba por mi mente, quiero follarla y así lo hare.

-Te necesito- dijo ella antes de que yo misma le diera la vuelta, una sonrisa entre mi jadeo se formó.

-Te daré todo lo que me pidas- atine a decir mientras la tome de la cintura y la gire.

Ladee mi cabeza y me encontré con la imagen del medio cuerpo de Lauren pegado a la encimera, joder hasta así se veía esplendida, separe sus piernas, mientras tocaba lentamente sus glúteos, eran suaves y me provocaba morderlos, e incluso azotarlos.

-¿Cómo lo quieres?- le pregunte mientras mis manos fueron a parar a sus hombros y luego bajar dejando besos por todo el centro de su espalda, sintiendo de esa formo el leve estremecimiento de su cuerpo, sonreí feliz dejando un beso en su espalda baja, ya que sabía que no era solo yo la que sentía esto en mi pecho.

Separe ligeramente sus nalgas y pase mi lengua por todo el anillo fruncido, lo hice una, dos y tres veces más, mientras escuchaba los jadeos y las sacudidas de Lauren debajo de mí.

Mi miembro no podía explotar porque no podía, alce mi rostro y cuando la vi tomar aliento la palma de mi mano aterrizo en su trasero, un jadeo alto salió de sus labios, justo para que aterrizara el segundo azote, se estremeció aún más separando sus piernas, sus manos se apretaron al borde de la encimera al mismo tiempo que acariciaba suavemente la parte rojiza que iba quedando, para dar otro azote, no la escuchaba quejarse para que me detuviera.

-¿Quieres que siga?- pregunte temiendo pasar algún límite con ella.

-¡Joder no, no pares!- gimió a medidas que meneaba su trasteo para mí.

Volví a tomarlo con ambas manos para masajearlo y se igual forma darle otros dos azotes.

-¡Camila!- gimió ella, causando que todo mi cuerpo se sacudiera al escuchar mi nombre de sus labios con tanta lujuria desbordándose.

-Te hare mía- le susurre cuando acerque mi boca a su oreja mordiéndole levemente el lóbulo.

Sus ojos se cerraron al placer, mientras mis manos estaban en su cintura al mismo tiempo que encaje mi miembro entre sus nalgas para así comenzar un movimiento placentero de la cual ambas gozábamos.

-Hazme tuya- jadeo mientras entrecerraba sus preciosos ojos –Como te plazca- esa fueron sus palabras justo antes de posicionarme en su trasero.