El jefe de papá (EJDP1)

Bienvenidos pequeños

(Narra Marc)

Estoy en la habitación del hospital sentado al lado de Leli que está dormida. Tengo en mis brazos a mi pequeña Isel, también está dormida. La dejo en la cuna y cojo a mi campeón. Él sí que está despierto, aunque sus ojitos no se abren del todo. Aún me emociono cuando hace unos minutos los escuché llorar por primera vez.

Flashback

Entramos en el quirófano con los nervios a flor de piel. Leli grita debido a las contracciones. No me gusta nada verla así.

- Respira mi amor. Ya no queda nada -capas de sudor cubren su frente mientras sus dolores no cesan.

- ¡Marc! -dice gritando.

- Será parto natural. Empuje señora Márquez -una sonrisa de me forma en los labios. Me encanta cuando la llaman así.

Leticia empuja hasta que escuchamos un llanto.

- Señor Márquez, aquí tiene a su pequeño -cojo a Joel mientras mi mujer da a luz a mi niña.

Tuvimos que esperar un poco más para ver a Isel. En la cara de mi mujer se nota el esfuerzo que había hecho con Joel y, eso, le ha pasado factura. Finalmente, mi pequeña nace y una lágrima recorre mi rostro.

- Enhorabuena señores. Los dos están sanos.

- Gracias doctor.

Se llevan a nuestros hijos para lavarlos y, después, los suben a la habitación de Leli.

Fin del flashback

Poco a poco mi princesa se va despertando.

- Hola mi amor. ¿Cómo estás?

- Muy cansada. ¿Y nuestros bebés?

- Isel está ahí durmiendo -señalo la cuna que tiene al lado- y aquí tengo a Joel -lo puse en sus brazos.

- Es precioso -mi princesa empieza a llorar.

Cojo a mi pequeña y me siento en la camilla y acerco a Isel para que conozca a su mami.

- Hola pequeña -dice casi en un susurro.

Nuestros padres entran por la puerta en ese instante.

- Mírate cariño. Estás preciosa con tus bebés.

- Gracias papá- podéis acercaros. Están despiertos.

Los cuatro se acercan y sé que se enamoran de los pequeños. Los entiendo porque a mí me ha pasado lo mismo.

- Es una niña preciosa hijo -mi madre tiene a Isel en brazos y la acuna.

- El pequeño es adorable -es Paula la que sostiene a Joel.

No me he percatado hasta ahora de que Leli tiene las manos sobre su vientre.

- Se hace raro, ¿verdad?

- Mucho. Pero me alegro de poder tenerlos entre mis brazos.

- Sí. Gracias mi vida por haberme dado dos hijos preciosos.

- Marc, sin ti no podía haberlos tenido. No me des las gracias.

- Pero tú has hecho más -digo algo triste recordando todo lo que ha pasado para que estemos hoy aquí.

- Eso no te lo discuto. Pero mira el lado bueno, ahora estoy delgada y podremos ver quien es mejor piloto.

- ¿Aún quieres correr?

- Sí. Dejamos a los bebés con nuestros padres y nos vamos a la pista.

- No. mejor esperamos a Qatar y que cada uno use una de mis nuevas Honda.