Capítulo 5

277 61 13
                                    

A pesar de su decisión, Vesta no encuentra las palabras para hablar con el chico. Entonces Borja da el primer paso por ella.

—Encontramos a este niño humano en medio de la nada.

—¿Niño? —El joven se acerca a Vesta para examinar al pequeño y luego esbozar una sonrisa —¿Quién lo diría? Al parecer me hicieron el trabajo más fácil.

—¿Disculpa? —Pregunta Vesta.

—Llevo buscando a este niño por tres días —Saca un papel para enseñarles una ilustración —Fue separado del lado de sus padres por un par de desgraciados. Ellos me contrataron para encontrarlo.

—¿Contrato? —El chico mira a Vesta con curiosidad por unos segundos para luego reír por lo bajo.

—Es mi trabajo. Alguien se pierde, me contratan, lo busco, lo encuentro, y me pagan. —Hace que Vesta le entregue al niño —Por lo visto no son de por aquí ¿Eh? ¿De dónde vienen?

—Eso no te importa —Responde Borja.

—Tranquilo, amigo. —Responde entre risas —Solo era una pregunta. Me llamo Fey ¿Quiénes son ustedes? Supongo que eso sí me lo pueden decir.

—Mi nombre es Vesta —Responde un tanto nerviosa —Y él es Borja.

—Es un placer, señorita Vesta —Saluda Fey con una suave sonrisa antes de volver por donde vino —Si quieren puedo llevarlos parte del camino en mi carreta. Vengan, tengo agua y comida por si se les apetece.

Llevada por su curiosidad, Vesta sigue al joven mientras Borja camina detrás de ella. El tal Fey no parece una mala persona; pero aun así tiene sus dudas sobre quién es realmente.

—¿Hacia dónde se dirigen? —Pregunta Fey sin dejar de atender al pequeño.

—Vamos a Satrian —Responde Vesta.

—Está bastante lejos —Dice Fey mientras acomoda al niño en una cama improvisada con mantas y pieles —Tengo que llevar a este niño devuelta con sus padres en Zairen. Vengan conmigo, puedo acercarlos a su destino.

—Bueno... Nosotros...

—Estamos bien. No necesitamos ayuda de un humano... —Interrumpe Borja con evidente desagrado antes de comenzar a caminar —Vámonos.

Al alejarse un poco, Fey aprovecha el momento para charlar con la bella chica de cabello rojizo que permanece de pie frente a él sin dejar de mirar al pequeño.

—Estará bien. Por cierto, tu padre es bastante serio.

—Sí, bueno... Tiene sus razones.

—Nunca los había visto por aquí; y eso que viajo mucho.

—No salimos mucho. Estamos viajando para encontrar a alguien...

—Bueno, espero que lo logren. Fue un placer —Estira su mano —Y gracias por su ayuda.

Vesta mira la mano del joven un momento antes de extender la suya para tomarla. Al tocarlo, la calidez que éste desprende hace que Vesta se sonroje de repente y que su corazón lata un poco más rápido. Aquello es una sensación nueva y extraña ¿Por qué ese humano la hace sentir de esa forma?

A lo lejos, Borja observa la escena hasta que Vesta se separa del muchacho para caminar hacia él. Entiende vagamente la situación; pero también le desagrada. Si bien había jurado proteger a Vesta de todo mal, el ver que la chica descubre algo nuevo a cada momento que pasa le provoca un poco de preocupación. Le preocupa que el viaje para encontrar a Stolas termine haciendo que Vesta no quiera volver.

—¿Estás bien? —La voz de Vesta saca a Borja de sus pensamientos.

—Lo estoy —Dice con voz seria — vámonos, odio esta forma. —Aquello hace reír a Vesta.

—También para mí es extraño todo esto —Dice Vesta, sujetándose del brazo de Borja —Me asusto cada vez que veo a un humano. Pero, luego solo me parecen agradables —Borja mira a la chica por el rabillo del ojo —Quisiera poder conocer un poco más este lugar. Quisiera poder... Tomar algún camino y que eso me dijera por qué vine al mundo.

Borja guarda silencio el resto del camino. No puede dejar de pensar en lo que Vesta acaba de decir. Bien sabe que los humanos, así como él, poseen libre albedrío que les permite tomar sus propias decisiones y hacer lo que se les plazca; pero Vesta parece no comprenderlo bien.

¿Es egoísta de su parte no mostrarle lo que puede hacer? ¿Por qué siente que todo irá mejor con Vesta desconociendo aquello? ¿Por qué aquella antigua inseguridad ha vuelto a tomar control de su mente? ¿Por qué ha vuelto a temer que Vesta se aparte de su lado?

El Bosque De Los demonios (3): La Búsqueda De Vesta Donde viven las historias. Descúbrelo ahora