Mis One-shots de Mystic Messenger

Chocolate de San Valentín

El olor a chocolate caliente llevó a Saeran hasta la cocina cuando regresó a casa. La curiosidad y el hambre de algo dulce fue lo que le hicieron asomarse.

—Bienvenido, Saeran— dijo MC con la vista fija en la cazuela donde removía el chocolate.

—¿Cómo has sabido que era yo?

MC ni siquiera se había girado o mirado de reojo.

—Por el sonido— sonrió ligeramente —Soy capaz de distinguir quién viene por el tipo de ruido que hacéis, las pausa y los gestos. Una habilidad que desarrollé de niña con mi familia. Soy muy observadora.

No le sorprendió demasiado ese hecho, MC era capaz de diferenciarles mirándoles aunque se vistieran igual. Saeyoung intentó gastarla una broma no hace mucho y la víctima acabó siendo él.

—¿Qué estás haciendo?— preguntó mientras se acercaba.

—Chocolate de San Valentín— se giró hacia él y le sonrió —¿Quieres beber un poco?

Se fijó en el vaso sucio que tenía cerca, parecía que ella misma ya lo había probado. Quiso decir que no, pero lo cierto era que le apetecía y antes de que abriera la boca MC le echó un poco en otro vaso.

—¿No estás haciendo demasiado chocolate para mi hermano?— preguntó con el vaso caliente entre las manos.

—No solo es para Saeyoung, también estoy haciendo chocolate de amistad para el resto de la RFA.

—¿Chocolate de amistad?

—Sí y también habrá para ti, pero tienes que mantenerlo en secreto a Saeyoung. ¿De acuerdo?

***

El campus comenzaba a llenarse de estudiantes cuando MC llegó hasta la facultad de ciencias veterinarias. No tuvo que esperar mucho para ver a un chico rubio con evidente falta de sueño por pasarse casi toda la noche jugando.

—¡Yoosung!

El chico levantó la vista al escuchar su nombre y se extrañó de encontrarla allí.

—¿MC? ¿Qué haces aquí?

—Venía a traerte esto. Quería dártelo ahora para animarte antes de que entraras a clase. ¡Feliz San Valentín!

Yoosung cogió sorprendido la pequeña bolsa verde que MC le tendía.

—¿Eh? ¿Es chocolate? Pero yo...

—Quería regalar chocolate a todos los miembros de la RFA. Es mi forma de agradeceros por haberme ayudado tanto y haberme aceptado en vuestro grupo.

—No es necesario que lo hagas, más bien somos nosotros los que estamos agradecidos de que aparecieras— miró hacia la puerta, el resto de alumnos ya estaba entrando —Gracias por el chocolate, MC. Lo probaré en el almuerzo.

***

No era la primera vez que entraba al edificio principal de CyR, pero todavía le imponía bastante. Era un edifico moderno, con mucha luz e impoluto por el que paseaban hombres y mujeres de negocios en traje. A pesar de que la gran recepción estaba llena, no había demasiado ruido, cosa que agradeció. Se acercó al mostrador y preguntó por la asistente Kang, tuvo suerte de que estuviera allí cuando el recepcionista llamó y le permitió subir.

Encontró a Jaehee escribiendo rápido en el ordenador de su mesa. Tenía casi toda la superficie llena de papeles, era un caos organizado.

—Hola, Jaehee.

Ella dejó de teclear y levantó la vista. A pesar de ser todavía por la mañana ya parecía cansada.

—Buenos días, MC. Me alegro de verte.