Sentimientos ocultos (Harry Potter y tu) (Dramione)

Segunda Prueba

Al día siguiente T/N y Hermione entraron juntas al gran comedor. T/N estaba feliz por lo sucedido la noche anterior con Harry, pero aún no sabía si quería perdonarlo y Hermione le había contado lo sucedido con Draco y aunque ella juraba que solo lo hizo para molestarla y que no sintió nada, ella sabía que era mentira ya que cuando lo vio se puso igual de tensa que T/N. Ambas se quedaron plantadas en medio del comedor T/N mirándose con Harry con dolor y unas ganas enormes de ir a abrazarlo, mientras que Hermione y Draco con nerviosismo y un poco de vergüenza, entonces T/N tomó el brazo de su amiga, se dieron media vuelta y salieron del lugar.

Los días siguientes las chicas trataron de evitarlos, aunque T/N intento hablar con Draco para hacerle entender sus sentimientos, pero este seguía negándolo.

Harry Se preparaba para la segunda prueba estaba junto a Ron y Hermione en la biblioteca tratando de descifrar el enigma del huevo ya que faltaba menos de 24 horas para la prueba, T/N llegó para ayudar, aún no se hablaban pero estaba preocupada por él, no quería que nada malo le pasara y estuvieron revisando en los libros la mejor idea para enfrentar el hecho de que Harry debía estar por una hora bajo el agua, después llegó ojo loco Moody y les pidió tanto a Hermione como a T/N que vallan al despacho de la profesora McGonagall, a regañadientes ellas fueron dejando solo a Harry con Ron y Neville que estaba acomodando los libros.

A la mañana siguiente Harry y Ron bajaron a la segunda prueba. 
—Donde está Hermione?  — pregunto Harry

—No lo sé… con el idiota de Krum talvez —contesto Ron molesto

—Y T/N? —a Harry le uniera gustado verla, pero se imaginó que está evitandolo como toda la semana.

Neville apareció y le entrego unas plantas que lo ayudarían a respirar bajo el agua.

—Debes comértelas antes de entrar al lago — dijo el muchacho mientras ponía en sus manos las branquialgas.

—Genial! Con esto podré respira por una hora.

—Bueno no se — dijo Neville nervioso —las plantas varían dependiendo de si el agua es salada o dulce y la verdad, no sé qué tipo de agua sea la del lago.

—Y me lo dices ahora…  — grito Harry nervioso, pero luego se unió a lado de los campeones

Harry se quitó zapatos y calcetines, sacó del bolsillo el puñado de branquialgas, se lo metió en la boca y entró en el lago.

Entonces, de repente, sintió como si le hubieran tapado la boca y la nariz con una almohada invisible. Intentó respirar, pero eso hizo que la cabeza le diera vueltas. Tenía los pulmones vacíos, y notaba un dolor agudo a ambos lados del cuello.

Se llevó las manos a la garganta, y notó dos grandes rajas justo debajo de las orejas, agitándose en el aire frío: ¡eran agallas! Sin pararse a pensarlo, hizo lo único que tenía sentido en aquel momento: se echó al agua.

El agua ya no parecía helada. Al contrario, resultaba agradablemente fresca y muy fácil de atravesar... Harry nadó, asombrándose de lo lejos y rápido que lo propulsaban por el agua sus pies con aspecto de aletas, y también de lo claramente que veía, y de que no necesitara parpadear. Se había alejado tanto de la orilla que ya no veía el fondo. Se hundió en las profundidades.

Una multitud de sirenas y tritones flotaba delante de cuatro personas ligadas con cuerdas a la cola de la sirena.
T/N estaba atada entre Hermione y Cho Chang. Había también una niña que no parecía contar más de ocho años y cuyo pelo plateado le indicó a Harry que debía de ser hermana de Fleur Delacour.

Había piedras en el fondo del lago. Se hundió para coger una particularmente dentada, y regresó junto a la estatua. Comenzó a cortar las cuerdas que ataban a T/N, y, tras varios minutos de duro trabajo, lo consiguió. T/N flotó, inconsciente, unos centímetros por encima del fondo del lago, balanceándose ligeramente con el flujo del agua.