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Hasta que no terminó la función no recordó que debía acabar de ordenar la caravana. Regresó rápidamente y estaba abriendo la puerta cuando Jill, con Frankie encaramado de nuevo a sus hombros, la llamó. Al ver a _____, el mono comenzó a chillar inmediatamente y a taparse los ojos.

ㅡCállate, bicho malo. Ven, linda, quiero enseñarte una cosa.

_____ cerró la puerta de la caravana con rapidez, antes de que Jill pudiese ver el desorden del interior y se diera cuenta de la terrible ama de casa que era. La joven la tomó del brazo y la condujo por la hilera de caravanas. A la izquierda pudo ver a Jack, el maestro de ceremonias, hablando con Tae mientras los trabajadores comenzaban a apilar las gradas.

ㅡ¡Ay! -_____ dio un chillido cuando sintió un fuerte tirón del pelo.

Frankie chilló.

ㅡNiño malo -canturreó Jill, mientras _____ se colocaba lejos del alcance del chimpancé. -Ignóralo. En cuanto comprenda que no le haces caso te dejará en paz.

_____ decidió no decirle lo mucho que dudaba que eso sucediera.

Rodearon la última caravana y _____ soltó un jadeo sorprendida al ver a muchos de los artistas, todavía con ropa de actuación, alrededor de una mesa plegable sobre la que había una tarta rectangular con unos novios de plástico en el centro. Madeline, la chica que había conocido antes, estaba cerca del pastel, junto con Brady Pepper y sus hijos, el más joven de los Lipscomb, varios payasos y otros muchos empleados que había conocido antes. Sólo Heather parecía haberse quedado al margen.

Sonriendo ampliamente, Jack empujó a Tae hacia delante mientras Madeline levantaba las manos como un director de orquesta.

ㅡAtención todos. ¡Felicidades! ¡Felicidades!

Mientras el grupo cantaba, a ____ se le empañaron los ojos. Esas personas apenas la conocían, pero le tendían una mano amistosa. Después de la fría ceremonia que había sido su boda, la joven se recreó en la intimidad de ese momento. En esa improvisada reunión de los amigos de Tae, se sintió como si estuviera asistiendo a una verdadera celebración, a una aceptación de que había ocurrido algo realmente personal, como si aquello no fuera un castigo de su padre sino una ocasión feliz.

ㅡGracias -susurró ella cuando terminaron de cantar. -Gracias de todo corazón.

Miró a Tae, y la felicidad de la joven se evaporó al ver su expresión rígida y gélida.

La gente fue guardando silencio poco a poco. Se dieron cuenta de la reacción de Tae y supieron que algo iba mal. «Por favor, no lo hagas -pensó ella. -Quiero que sean mis amigos. Por favor finge ser feliz.»

Algunas mujeres se miraron de reojo. La certeza de que Tae era un novio radiante desapareció con rapidez y _____ observó cómo varias miradas se posaban en su barriga para intentar averiguar si estaba embarazada.

_____ se obligó a hablar:

ㅡNunca había tenido una sorpresa tan agradable. ¿Y tú, Tae?

Hubo un largo silencio antes de que él asintiera con la cabeza.

La joven levantó la barbilla y forzó una sonrisa.

ㅡLa tarta parece deliciosa. Apuesto lo que sea a que todos queréis tomar un trozo. -Miró fijamente a Tae, suplicándole en silencio que colaborara. -Ven, vamos a cortarla los dos juntos.

El silencio pareció extenderse infinitamente.

ㅡTengo las manos sucias. Hazlo tú.

Con las mejillas ardiendo de vergüenza, _____ se acercó a la mesa plegable, cogió un cuchillo y comenzó a cortar la tarta en porciones cuadradas. Continuaron en silencio mientras ella intentaba fingir que no pasaba nada.

ㅡNo puedo creer que improvisarais esto con tanta rapidez. ¿Cómo demonios lo hicieron?

Madeline movió los pies con inquietud.

ㅡEsto... er... no fue tan difícil.

ㅡBueno, pues estoy impresionada. -Con las mejillas doliéndole por el esfuerzo de sonreír, _____ cortó el primer trozo de tarta, lo colocó en un plato de cartón y se lo dio a Tae.

Él lo tomó sin decir palabra.

El silencio se hizo más ensordecedor. Finalmente, Jill se acercó con rapidez, mirando a los novios con nerviosismo.

ㅡSiento que sea de chocolate. Tuvimos poco tiempo, y en la pastelería no había tartas de boda.

_____ la miró con gratitud al ver que intentaba aliviar la tensa situación.

ㅡLa tarta de chocolate es mi favorita.

Tae colocó el plato sobre la mesa tan bruscamente que el intacto trozo de pastel se tambaleó y cayó de lado.

ㅡPerdonen. Tengo mucho trabajo que hacer. Gracias por todo.

A _____ le tembló la mano cuando le pasó un plato a Madeline. Alguien soltó una risita maliciosa. _____ levantó la cabeza y vio que era Heather.

La adolescente le dirigió una sonrisa triunfal y corrió detrás de Tae.

ㅡ¿Quieres que te eche una mano?

ㅡClaro, cariño. -La voz cálida y afectuosa de Tae respondiéndole a Heather, llegó a través de la brisa nocturna. -Tenemos problemas con uno de los camiones de carga. Puedes ayudarme a comprobarlo.

_____ parpadeó con fuerza. Era de lágrima fácil, pero si lloraba ahora nunca podría volver a enfrentarse a esas personas.

ㅡ¿Un trozo de tarta? -Tendió un plato hacia un hombre rubio con barba y aspecto de surfista. Recordó que se había presentado como Neeco Martin, el domador de elefantes, cuando había ido a conocerla al vagón rojo.

Él lo tomó sin mediar palabra y le dio la espalda para decirle algo a uno de los payasos. Madeline dio un paso adelante para ayudar a _____, pensando, sin duda, quiera mejor acabar lo antes posible. Los demás artistas fueron cogiendo el trozo de tarta que les correspondía y, uno a uno, se fueron marchando.

Al cabo de un rato, sólo quedaron Jill y ella.

ㅡLo siento, linda. Pensé que era una buena idea, pero debería haber supuesto que a Tae no le parecería bien. Es muy reservado.

Él ni siquiera se había molestado en mencionarle a sus amigos que se había casado.

_____ forzó otra sonrisa.

ㅡTodas las parejas tardan algún tiempo en adaptarse al matrimonio.

Jill recogió los restos de la tarta y se los ofreció a _____.

ㅡVenga, ¿por qué no te llevas lo que queda?

_____ pudo sentir la bilis en la garganta cuando los cogió; su único deseo era perder de vista aquella tarta.

ㅡ¡Santo cielo! Sí que se ha hecho tarde. Y tengo un montón de cosas que hacer antes de acostarme -dijo, y huyó de allí.

Ángel | KTHWhere stories live. Discover now