Capítulo 37: Arthur Fire (2)

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✦✧ En Mifnix, hace mucho tiempo atrás, en el pasado y círculo de amistad de Arthur Fire; Ahora rey del Imperio de Fénix

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✦✧ En Mifnix, hace mucho tiempo atrás, en el pasado y círculo de amistad de Arthur Fire; Ahora rey del Imperio de Fénix. ✧✦

El nivel de euforia que contenía el cuerpo de Arthur era extraordinario. Sentía su piel cálida, más de lo normal, pero el esfuerzo después de lo que había hecho valía la pena. Corrió hacia el grupo de fénix que parecían conversar y reír entre sí. Todos lo vieron llegar y abrieron mucho los ojos, asombrados de lo desaliñado que Arthur lucía, todos eran sus amigos, sin embargo, aún les extrañaba notar al príncipe de los fénix de fuego en tales condiciones, parecía un guerrero desarreglado y exageradamente enérgico.

Lyniss fue la primera en hablar:

—¡Por todas las Lunas! ¿Que es lo que te a pasado?—Los bellos ojos azul intenso de Lynnis observaron detalladamente el cuerpo de Arthur. Frunció el ceño y rió nerviosamente. Sabía que Arthur no tenía remedio.

Lynnis era una de las fénix lunar más hermosa que hubiera pisado los sagrados suelos de Mifnix, y es que su bondad, sencillez y atractivo rostro de facciones suaves habían cautivado a todos los que la veían. No tenía descendencia real, pero estaba claro que merecía ser desposada por alguien de la corona. Su linaje lunar era puro, y todos los que la admiraban esperaban que en un futuro muy cercano la pureza... Se mantuviera con su descendencia.

Se escuchaban rumores entre los fénix que sobrebolaban el cielo de Mifnix que decían que Lynnis era aún más hermosa que la mismísima princesa Leyla, también lunar, pero esos rumores eran acallados casi inmediatamente. Arthur no sabría decir quién de las lunares era más hermosa, conocía a Lynnis, y la admiraba enormemente, pero no a Leyla, a la princesa no la había visto jamás en su vida. A la pobre la mantenían cautiva en su enorme castillo de la Legión Lunar con la esperanza de que desarrollará sus dones lunares muy pronto, esperaban la bendición de la Luna Llena para poder planear su brillante futuro. Pues también se rumoreaba que ella había nacido sin poderes, ni uno, y eso alarmaba a sus padres y a toda su legión pura. Pero como se contaba, eran solo rumores, nadie sabía la verdad...

—Solo... —Arthur carraspeó, intentando toser el humo y cenizas que aún contenían sus pulmones... —Fui al volcán Flamante a lanzarme dentro de el para poder encender de un vivo color sangre este hermoso rubí —Alzó su mano y monstruo un pequeño anillo dorado que era eclipsado por la piedra que lo decoraba, un rubí tan rojo que parecía arder en flamantes llamas.

Todos los jóvenes se veían consternados, incrédulos ante la valentía o estupidez de su príncipe de fuego.

Habían siete jóvenes en total, contando a Arthur, todos con rasgos únicos y atrayentes. Sinfonía, una fénix blanca de enorme inteligencia y sabios consejos, lo regaño como sólo ella sabía hacer: — ¡Eres un ignorante, Arthur Fire! ¡Como se te ocurre lanzarte al mero volcán que siempre se mantiene en erupción! ¡Se que eres inmune al fuego... Las llamas y el excesivo calor que podría derretirnos a nosotros, pero no es para que presumas tus estúpidas hazañas dignas de un cabeza dura como tú que solo quiere fama!

La Princesa Fénix |Aeternis #1|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora