Capítulo 11: Selfie y algo más...

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Nicole POV:

Después de tanto tiempo, después de años y miles de sucesos, después de muchos moretones y manoseos, alguien me había defendido. Alguien se había preocupado por mi y mi bienestar.
Ver como Fede golpeaba a Marcos por todo lo que me hacía a mi, defendiendome con furia y rencor para luego calmarse y mirarme con profunda ternura y amor, me había hecho sentir especial, por primera vez luego de tanto tiempo.
Algo en mi corazón cambio, como si una de mis miles heridas fuera sanada, quedando una cicatriz como recordatorio de que esa parte de mi ya habia sido restaurada.
Una parte de mi fue restaurada. Eso sonaba tan extraño y nuevo pero a la vez tan grato y reconfortante.
Una de mis heridas fue curada por un chico. Antes eso me hubiese sonado patético pero ahora era diferente. Por el simple hecho de que él no era solo un chico. Era especial, era único, él valia la pena.

- ¿Estas bien?- cuestionó a solo un par de pasos antes de llegar al portón de mi casa. Hoy era viernes, así que Sebastián llegaría a la noche recién, y eran las 2 de la tarde. Tengo tiempo para disfrutar sin preocuparme.

- Ahora sí- admití abriendo el portón para luego invitarlo a que pase.

- Estuviste callada todo el camino-susurró mientras caminabamos por el sendero de pequeñas piedritas en dirección a la puerta principal. -¿Te asusté verdad? - pude notar la decepción y la tristeza en su voz mientras abría la puerta y nos adentrabamos a la casa.

¿Estaba hablando en serio? Hizo el gesto más tierno y significante que me han dado y se sentía culpable por su comportamiento obviamente inevitable. ¿Este chico era real?

Deje mi mochila en el suelo y lo abracé tomandolo por sorpresa.

-Hiciste todo bien, todo fue perfecto- susurré en su oído mientras él me rodeaba la cintura con sus brazos.
No había nada que se comparase con el sentimiento que me daba estar así con Fede.
Me sentía protegida, me sentía a salvo, me sentía indestructible pero por sobre todo, me sentía querida.

- Yo te protegeré, te cuidaré y te querre de ahora en más. Nunca te faltare, nunca- dijo cerca de mi oído, depositando un suave beso en mi cabeza.

Al separarnos del abrazo, seguimos en una distancia bastante corta. Apenas nos separaba un márgen de aire, lo que me hacía sentir una extraña sensación a mi estómago. Lo miré fijamente a los ojos mientras el me miraba como si estuviese controlando algo en él. ¿Pero que cosa?
Sus ojos bajaron en un rápido movimiento hacia mis labios para luego volver a conectarse con los míos. El mordió suavemente su labio inferior mientras yo me derretía ante una imagen tan tierna pero atractiva a la vez.
Nuestros rostros se fueron acercando, milimetro a milimetro, y ahí supe lo que estaba por ocurrir. Mi respiración comenzó a agitarse y mis labios temblaban.

-Nicky- dijo mi nombre en un susurro, mientras entrelazaba los dedos de nuestras manos a nuestros costados.
- ¿Si? - mi voz salió débil y cortada.
- ¿Puedo besarte? - una tierna sonrisa se mostró en sus labios mientras mis mejillas tomaban un exagerado color rojo.

¿Mis oidos me engañaban? ¿Me estaba preguntando si podía besarme? ¿Qué chico normal te pedía permiso para un beso?

No sabía que contestar. ¿Quería que me besase? ¡Claro que quería! Entonces... ¿porque dudaba tanto?

-Con una condición- contesté descubriendo el porque de mis dudas.

- La que quieras- sonrió anchamente con un intenso brillo en sus ojos.

- No me dejes nunca -

Él solo asintió con su cabeza, me tomó por la cintura y lentamente sus labios chocaron contra los mios.
Era un sentimiento tan agradable la corriente que sus labios moviendose sobre los mios me provocaba. Lleve ambas manos a su cuello y entrelacé mis dedos detras de su nuca mientras el seguía saboreando mis labios con una lentitud y ternura que hacia que un nuevo sentimiento comenzara a nacer en mi, un sentimiento que me hacía dependiente de él, de su presencia cerca mío, necesitaba su calor y su sonrisa iluminando mi deprimente vida.
En síntesis, me estaba enamorando.
En unos segundos, la necesidad de aire se hizo presente y poco a poco nos fuimos separando.

- Estaré contigo hasta que mi aire se termine, Nicole- susurró en mi oído, abrazandome con fuerza. -Al fin lo logré-dijo acariciando lentamente mi mejilla. - Luego de tantos meses lo logré-
- ¿Varios meses? - nos conociamos bien hace una semana, no entendía a que se refería con eso.

- Exactamente 6 meses- aún seguiamos abrazados, a una distancia muy corta. - Hace 6 meses, te vi entrando al salón de clases por primera vez, con tus brazos abrazandote y tu hermosa mirada fija en el suelo. Desde ese día no podía fijarme más en nadie que no fuera la callada chica del salón. Me propuse algún día hablarte y besarte como en mis sueños. Y hoy lo logré luego de tanto esperar- sonrió acomodando un mechón de cabello detrás de mi oreja.

Me quedé helada mirandolo a los ojos sin decir palabra alguna. Yo siempre había pensado que había pasado desapercibida antes los ojos de todos, pero siempre hay una exepción. Fede era mi exepción.

Luego de ese momento, la tarde transcurrió con total normalidad. Habían ocasiones donde me mostraba sonrisas complices o no despegaba su vista de mí haciendome poner un poco incómoda, pero muy en el fondo me agradaba.
Ya faltaban 10 minutos para que llegara la hora en la que Fede debía irse. Estabamos mirando la televisión juntos, hasta que él saca su celular y se acercó cada vez más a donde yo estaba sentanda.

-¿Qué haces Fede?- pregunté curiosa mientras el tecleaba su pantalla táctil rápidamente.

- Este ha sido lejos el mejor día de mi vida Nicole, y no me iré sin una foto para recordarlo- dijo mientras se colocaba cerca mío y ponía su teléfono frente a ambos. Rápidamente tapé mi cara con ambas manos, haciendo que él soltara una gran carcajada.

- ¿Qué haces Nicky?- preguntó tomandome ambas manos y sacandolas de enfrente mío.

- No me gustan las fotos, salgo fea- admití haciendo un leve puchero para hacer reír a Fede.

- Eres hermosa en las fotos, pero más bella eres en frente mío- se acercó nuevamente hacía mi y depositó un dulce beso en mi mejilla.

- Okey- dije suspirando rendida mientras haciamos unas raras muecas para la foto. Luego de colocarle un divertido efecto, Fede la guardó en su telefono.

- Nos vemos mañana cielo- se despidió colocandose de pie y dirigiendose a la puerta. Lo seguí y abrí mi puerta para permitirle el paso.

- Adiós Fede- sonreí viendolo irse.

Estaba apunto de adentrarme en mi casa, cuando él viene corriendo hacia mi y me da un rápido beso en los labios, antes de salir corriendo fuera de mi casa con una sonrisa victoriosa en el rostro.

Este chico era un caso serio, pero así me gustaba.

Selfie de Nicole y Federico en Multimedia♥

Bueno, resubi el capitulo porque wattpad se puso loco y se veia horrible!
SE BESARON!!!! AAAAHHH!!! okey, Cálmate Tamara, cálmate.

Espero que les haya gustado este capítulo! Acuerdense de votar y comentar si les gusta! UN BESO♥

Enamorado de sus cicatrices.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora