CAPITULO 55 YOU'VE GOT TO HIDE YOUR LOVE AWAY

83 7 2
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


SHADIA

Dan conducía a toda velocidad por la autopista siguiéndole el paso a Nate, de repente disminuyó la velocidad y observé como el auto de los chicos se perdía de vista. Me puse un poco nerviosa porque no sabía qué le sucedía, quería encararlo y preguntarle nuevamente, pero ya me había puesto furiosa por su actitud; sí, era cierto que me marché cuando me pidió que me quedase y juro que se me apretó el corazón al imaginarlo escribir esas notas, pero ¿Qué le íbamos a hacer? Ya lo había jodido todo.

—Dan ¿Por qué te detienes aquí? los chicos han ido por el otro lado.

—Quiero mostrarte algo. —Apagó el motor y se bajó; antes de hacerlo yo también, miré por la ventanilla bastante confundida, ¿Qué me iba a mostrar?

Un letrero rezaba "Jubilee Park And Garden".

Daniel me alcanzó del lado del copiloto justo cuando abrí la puerta y me ofreció una mano.

—Ven conmigo. —La tomé un poco tímida y a la vez emocionada porque cuando por fin me bajé del auto ahí ante mis ojos estaba "The London Eye". Sonreí de inmediato, me encantaba el lugar aunque no había tenido la oportunidad de subir. Suspiré impresionada.

Me llevó de la mano y nos hicimos paso entre una multitud; había varias personas haciendo fila para subir a una de las cápsulas.

—Espera aquí, no te muevas, no tardaré. —Se fue dejándome confundida e intrigada al mismo tiempo, sin embargo no pude evitar la conmoción.

¡Ahhh!

Me llevó al London Eye.

A veces simplemente no lo podía odiar.

No demoró en regresar hechizándome con esos ojos y una sonrisa a medias en sus labios, como si hubiese descubierto todos mis oscuros secretos para utilizarlos en mi contra.

Me sujetó de la mano en un agarre firme, entrelazando mis dedos con los suyos, emitiendo descargas intermitentes que recorrían mi piel en toda su extensión.

—Ven —pidió.

Nos acercamos más y mi corazón latió desbocado. Se detuvo y giró hacia mí cuando estábamos lo suficientemente cerca de unas personas que iban a abordar una de las cápsulas, humedeció sus labios y me miró con profundidad.

—Vamos a abordar una cápsula privada —informó.

Mi corazón estalló en un ruido ensordecedor al igual que el gentío detrás de nosotros con sus gritos al ver que solo subimos los dos cuando ellos estaban evidentemente esperando su turno. Daniel me llevó casi jalando del brazo porque me encontraba en otra dimensión.

La cápsula no paraba al abordar, se mantenía en un movimiento lento mientras los ojos oscurecidos de Daniel emitían fuego esa noche. No sabía si emocionarme porque podía leer sus intenciones entre líneas o temer por mi estabilidad emocional.

Nocturnos © [+18]  ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora