Capítulo 37

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-Ya está listo -Dice Raksha -Solo debemos esperar a Vesta.

-Iré con Ryuka -Dice Remena.

-No, Ryuka puede con eso. Nosotras debemos esperar a que Vesta regrese para llevar a cabo la última parte del plan.

-¿Crees que lo logre?

Ambas ven lo que parece un resplandor azulado en una parte del bosque. Raksha sonríe.

-Yo digo que ya lo hizo.

...

Del otro lado de la grieta del muro, Ryuka atrapa a los demonios que salen luego de despertar.

-Son demasiados -Dice la bruja -Pero puedo contenerlos.

-Ánimo... -Dice Lonch -Creo que ese es el último.

-¡Listo! -Anuncia Lanch.

-¿Y ahora qué? -Pregunta Gob.

-Nos queda esperar -Responde la bruja.

...

Vesta deja salir su fuego azul, envolviendo a todos con ella. Borkoff deja de luchar al verse afectado por la magia; y la otra Vesta permanece a su lado sin soltar su garra.

Mientras, Borja permanece inmóvil para dejar que Vesta lleve a cabo lo que sea que tiene en mente. Así como la última vez, aunque lo estuviera traicionando, no sería capaz de hacer nada contra ella.

-Estarás bien -Dice Vesta, apretando ligeramente la garra de Borja.

-Lo sé. No sé qué haces; pero sé que dices la verdad.

-Gracias por confiar en mí, padre -Borja la mira con sorpresa. Aquella palabra lo hace sentir extraño; pero no incómodo. Se siente cálido al ser reconocido de ese modo. Se siente feliz -Es lo que eres, Borja. Lo has sido desde que me encontraste en este mismo lugar cubierto de nieve. Te quiero.

-Y yo a ti, niña. Termina con esto de una vez. -Vesta asiente en silencio y nota que Borkoff parece somnoliento.

-Inocentes nacidos por la culpa de alguien más. Culpables por querer saciar su propósito. Encierra el pecado en el frágil cristal y déjalo descansar por siempre. -Recita -Este no será el trabajo de una, sino de cuatro brujas que buscan proteger los pecados de alguien más. Que mi árbol sea su cuna; y el bosque su único hogar.

Un gran resplandor capaz de cegar a quien lo mire ilumina el lugar. Al desaparecer, solo Vesta se encuentra en el lugar. Y a sus pies, posadas sobre la fría nieve, tres esferas de cristal permanecen inmóviles a la espera de ser levantadas.

-Ya todo acabó. Ahora estarán a salvo. Lo juro -Dice Vesta mientras levanta cada esfera para acunarla en sus brazos y comenzar a caminar hacia sus tías.

Al llegar, Vesta ve su árbol rodeado de nieve y bañado completamente por la luz del sol. Raksha y Remena la observan acercarse en silencio hasta que solo se detiene y baja la mirada hacia las esferas.

-Ya está. -Es todo lo que dice para que Raksha tome la primera esfera y la envuelva con una fina capa de enredaderas que se conectan a una de las tantas ramas del árbol. Al finalizar con las otras dos, Vesta lo mira un momento -Vamos por los demás...

...

La bruja permanece concentrada en su magia e intentando no perder a ningún demonio del interior del torbellino creado para contenerlos.

-Ahí está Vesta -Anuncia Lonch. -¡Se escapa!

-Claro que no lo hará -Dice Lanch, antes de saltar para devolver al demonio que trata de escapar.

-¡Lanch! -Exclama Lonch.

Al devolver al demonio al torbellino, Lanch también queda atrapada junto con los otros demonios. Pero nadie puede hacer nada, sacarla de ahí significaría correr el riesgo de que todos salgan.

-¡Vesta! -Dice Ryuka -¡Rápido!

-Descuida -Se para frente al torbellino y espera a que Raksha y Remena se paren a ambos lados de este -Todo listo.

-Inocentes nacidos por la culpa de alguien más. Culpables por querer saciar su propósito. Encierra el pecado en el frágil cristal y déjalo descansar por siempre... -Recitan las cuatro brujas.

-...Que mi árbol sea su cuna; y el bosque su único hogar.

Terminado el conjuro, el torbellino de Ryuka se vuelve de un tono azulado cada vez más brillante. Vesta le dice a Ryuka que comience a deshacerlo con cuidado, hasta que lo único que queda, son un montón de esferas azules que resaltan sobre la nieve.

-Son demasiadas -Dice Raksha.

-Descuida -Dice Vesta -Habrá espacio para todos.

Luego de recoger todas y cada una de las esferas, las cuatro brujas y los demonios libres se dirigen al árbol.

-¿Esos son...?

-Mi demonio, Borkoff y... Borja -Responde Vesta con desánimo.

-Debemos dejarlos ya -Dice Remena.

-¿Nos encerrarán también? -Pregunta Gob.

-Ustedes nos ayudaron a lograr todo esto -Dice Raksha, tomando una de las esferas y rompiendola con sus manos -Se ganaron su libertad.

-¡Lanch! -Lonch se lanza sobre ella. -¿Somos libres?

-Irán con nosotras. Allí podrán ser libres y ningún humano correrá peligro.

-Que aburrido -Dice Lonch.

-Peor es nada -Dice Gob.

-Mika también irá con nosotras y...

-Yo me quedaré en este lugar -Interrumpe Kimia -Parece un buen lugar para mí -Vesta sonríe.

-Sí que lo es.

Las brujas acomodan las esferas en las ramas del árbol. En cada rama y en cada rincón del tronco del gran árbol, una esfera tiene su lugar.

Al colocar la última, las tres brujas rodean el tronco para iniciar un hermoso cántico que Vesta desconoce. Aquella melodía parece tener una clase de efecto sobre el árbol.

-Se están...

Las esferas comienzan a fusionarse entre ellas y con el árbol hasta formar un bello árbol de cristal azul.

-Un árbol para todos los demonios de este bosque -Murmura Vesta -Espero que esta vez funcione.

-Descuida. Solo nosotras podemos liberarlos. Si no es por nuestra mano, el cristal no se romperá.

-Entiendo. -Raksha nota el brillo en los ojos de Vesta.

-Vámonos, te daremos un nuevo hogar, al igual que estos demonios.

-Claro...


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Nota:
Nos vemos mañana en el último capítulo 😉

____Nota:Nos vemos mañana en el último capítulo 😉

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El bosque de los demonios (2): Fuera Del BosqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora