Capítulo 15

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Al dejar de aullar, Gob mira a Borja con extrañeza ¿qué fue todo eso? ¿Acaso la calamidad acaba de "llorar"?

—¿Borja? —Gob nota el evidente cambio de color en sus ojos. —Oh, demonios...

Gob se aleja de Borja lo más rápido y lejos posible para informar a la bruja sobre lo ocurrido.

—Oye, bruja. Tenemos otro enorme problema aquí.

—Habla, demonio —Responde Raksha.

—Mira esto.

...

Raksha mira sorprendida lo que Gob le enseña. 

El enorme demonio tiene una mirada diferente a la de siempre ¿Qué está pasando?

—Raksha —Dice Remena

—¿No sé qué pasa? —Dice mientras intenta mantener la calma —Esto no pasó aquella vez con Rynna.

—¿Qué dices?

—Nunca antes había visto aquella mirada en ese demonio. Es como si...

—Estuviera furioso en extremo.

—Oye, bruja. Borja volvió a ponerse en movimiento.

—El demono es imparable ahora. Déjalo avanzar y trata de hacerlo volver. Intentaremos encontrar a Vesta lo antes posible.

—¿Saben en dónde está?

—No; pero ya estamos cerca.

...

Mientras corre sin un rumbo predestinado, la mente de Borja se mantiene en un constante caos de recuerdos y frustración.

—Lo intenté por tu medio... —Murmura —Ahora lo haré por el mío, Valko.

<<Tu modo podría poner en peligro a Vesta>>, oye la voz de una de las incontables almas de su interior.

—No hay ningún rastro de ella... —Gruñe con ira mientras ve el blanco de la nieve que cae sobre su rostro lobuno —Ni siquiera del maldito de Stolas —Recordar a aquel hombre lo enfurece más —Hizo llorar a Rynna... Y ahora se atreve a quitarme a Vesta...

<<¡Espera!>>, Borja se detiene en seco ante la advertencia desde su interior. <<Esa es...>>.

A lo lejos, Borja logra divisar un bosque a traves de la tormenta que nuevamente se había vuelto a desatar. En él, a pesar de la distancia, consigue ver un diminuto punto rojizo que resalta en la blancura; y que parece estarse moviendo como si jugara entre los árboles.

—Vesta... —Los ojos del feroz demonio vuelven a ser amarillos al ver a su querida niña —¡Vesta! —No lo piensa dos veces y comienza a correr en dirección a ella. Al fin se siente aliviado. Al fin encontró a su cría.

...

Vesta sale a caminar por el bosque en cuanto todas sus dudas se resuelven. Su nombre, sus padres, su don. Esas y otras cuantas preguntas más son respondidas gracias a la magia de Stolas. La única pendiente, es la de cómo hacer para que la magia de la chica despierte nuevamente.

—No lo entiendo —Dice Vesta sin dejar de mirar sus manos —¿Cómo puedo hacer para que...? —Nota que los copos de nieve se derriten apenas tocan sus manos y el agua se evapora sutílmente.

Recuerda aquellos días en los que estuvo con Jack. Por eso nunca sintió frío.

—Mi magia siempre estuvo ahí. Pero, es muy débil —Por alguna razón se siente frustrada al no saber cómo despertar su poder.

Por un breve momento intenta olvidarse de todos sus problema jugando entre los árboles, fingiendo que es una humana completamente ordinaria; y que en algún momento sus padres aparecerán y la llamarán para que regrese con ellos.

—¡Vesta! —Una curiosa voz ronca parece llamarla a lo lejos. Pero ¿dónde está?

—¿Quién es? —Con el pasar de los segundos, un extraño temblor mueve la tierra, cada vez, con más fuerza —¿Qué está...? —Su respiración se acelera en cuanto lográ ver al causante de aquel movimiento. Al dueño de aquella voz parecida a un gruñido.

—¡Vesta! —Lo ve mejor. Es enorme.

—Es él... —Murmura, perdida en su propio miedo mientras el lobo se hace más grande conforme se acerca a ella.

Vesta no sabe qué hacer, el miedo no la deja pensar, y el enorme demonio está demasiado cerca como para poder huir de él ¿Este era el fin para ella?

En cuanto Borja llega al bosque, no puede evitar detenerse al ver la expresion de pánico y terror que la Vesta tiene al verlo. Está confundido al ver su reacción. 

—Ves...

—¡No te acerques! —Grita Vesta entre lágrimas mientras retrocede con torpes pasos —¡Tú... Demonio!

<<Algo anda mal>>, escucha Borja.

Borja reduce su tamaño y cambia su forma a la de un licántropo, esperando que con eso, Vesta logre reconocerlo. Pero no parece funcionar.

—¿No me reconoces? —Vesta lo mira con pavor y asiente en silencio.

—Eres la calamidad... —Dice con voz temblorosa —Eres el demonio mas peligroso entre todos los demonios —Solloza —Matas a todos sin piedad... Así como lo hiciste con mi mamá...

—¿Qué? —La mira confundido por sus palabras —Rynna —Vesta cubre sus oídos —¡¿Qué estás?!

—¡Vesta! —El demonio y la chica voltean a ver al hombre —¡Atrás, demonio!

En la confusión, Vesta aprovecha la oportunidad para correr hacia Stolas, quien la abraza sin dejar de mirar al demonio.

—¿Estás bien, hija? —Vesta asiente en silencio —Salgamos de aquí.

—¡No! ¡Vesta!

Borja intenta alcanzarla sin tener éxito, ya que el brujo deja salir su poder para desaparecer junto con la chica.

<<Oye, oye. Debes calmarte>>.

—Ella... —Se arrodilla sobre la nieve con la mirada perdida mientras se abraza a sí mismo —Me tenía miedo...


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Capítulo extra de sábado 😉

Capítulo extra de sábado 😉

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El bosque de los demonios (2): Fuera Del BosqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora