El bosque de los demonios (2): Fuera Del Bosque

Capítulo 16

Del otro lado del bosque, Stolas y Vesta reaparecen envueltos por las llamas azules del brujo. Vesta se siente algo confundida y aterrada por todo lo ocurrido.

—Tranquila, tesoro mío —Dice Stolas sin dejar de abrazar y acariciar el cabello de la chica que llora aferrada a él —Todo está bien, no hay nada que temer.

—Ese demonio... —Dice entre sollozos —¿Por qué sabe mi nombre?

Stolas guarda silencio un breve momento. Había pensado en todo para hacer que la chica le creyera; pero no pensó en que el demonio podría ser una pieza clave que podría arruinarlo todo.

—Pues, porque eso es lo hacer, querida hija. Los demonios son los amos de la confusión. —Seca las lágrimas de Vesta —Así es como causan el mayor de los sufrimiento, cariño. Fingen que te conocen para ganar tu confianza y luego solo... Se acabó.

—Su rostro no se parecía al de un demonio...

—Todo es mentira, Vesta. Nunca confíes en un demonio como ese.

—Pero...

—Amo —Ambos voltean a ver a Mika.

Vesta se sorprende al ver a Ambos demonios detrás de Mika. Y para sorpresa de Stolas, se levanta y corre hacia ellos.

—¡Lanch! ¡Lonch!

Ambos demonios la abrazan mientras ríen a carcajadas por haber encontrado a su humana demonio.

—¿Tienes idea del tiempo que llevamos buscándote? —Dice Lanch.

—No es que nos estemos quejando —Dice Lonch —Estar fuera del bosque fue lo más grandioso que he hecho en siglos.

—¿Buscarme? ¿De qué hablan? Este es mi hogar, con mi padre.

—¿Padre? —Dice al unísono.

Ambos demonios miran al hombre a unos cuantos metros de ellos. Su mirada penetrante los hace sentir extraños, los hace sentir eso que sintieron en aquel lugar.

Sus respiraciones se vuelven cada vez más rápidas al seguir mirando al sujeto ¿Cómo puede ser capaz de hacer sentir miedo a un demonio sin siquiera acercarse?

—Ah, claro —Dice Lanch, intentando ocultar su nerviosismo —Por supuesto que sí —Le da un codazo que no pasa para nada desapercibido a Lonch.

—Sí... Como sea.

—Al igual que tu padre... Nosotros también te estuvimos buscando cuando desapareciste.

—Bueno —Habla Stolas —, ahora que ellos están aquí, me encargaré de ese demonio que nos acecha.

—¿Demonio? —Pregunta Lanch.

—La calamidad está aquí —Responde Vesta con preocupación.

—Tesoro mío —Stolas se acerca a Vesta y toma una de sus manos —Para hacer que ese demonio se aleje de nosotros, necesito que me cedas tu don y tu poder por un momento.

Vesta siente la presión causada por Lanch en sus hombros. A pesar del miedo que el hombre le provoca, el demonio se niega a separarse de ella.

—Yo...

Stolas acerca su mano a la mejilla de la chica; pero antes de poder tocarla, Lanch lo sujeta con firmeza deteniendo su avance.

El hombre se levanta lentamente sin quitarle los ojos de encima al demonio que comete la osadía de enfrentarlo.

—No te atrevas a usarla... —El miedo desborda en las palabras de Lanch. —Tú...

No es necesario que Stolas diga nada para hacer que Lanch acabe abandonando el lugar, dejando a Lonch junto a Vesta.

—¡Lanch! —Llama Vesta.

—Descuida, volvera —Dice Lonch, evitando a toda costa tener algún contacto con el hombre.

—Ahora, cariño... —Vesta vuelve la mirada hacia Stolas. —Sigamos con...

—Aun no logro hacer que despierte —Lo interrumpe —¿Cómo...?

—Solo tienes que concentrarte en tu poder, cariño.

—Vesta... —Stolas mira a Lonch haciéndolo callar de inmediato.

—Está bien, lo intentaré —Dice Vesta, sujetando ambas manos de Stolas y cerrando los ojos para concentrarse.

...

Raksha y las demás utilizan su magia para transportarse al sitio en el que supuestamente se encuentra Vesta.

—¿Por qué este bosque? —dice Remena.

—Bruja. —Gob las ve mientras se dirige al bosque.

—¿Por qué no estás con el demonio? — Se adelanta Raksha.

—Lo perdí cuando...

—¡¿Cómo que lo perdiste?! ¡A semejante demonio!

—Borja está... —la vista de Gob se desvía, haciendo que las tres brujas volteen a ver lo que él ve.

—No puede ser —Dice Raksha con expresión de extrema sorpresa.

—¿Cómo es que...? —Remena cubre su boca intentando no romper en llanto.

—¿Cómo es que estás aquí? —Dice Ryuka.

Gob permanece confundido ¿Acaso las brujas conocen a quien se acerca? ¿Por qué esa reacción tan repentina de la bruja mayor? ¿Quién es esa persona?