DELÍRIUM

By JorgeMoonRodriguez

5K 492 811

Pepe y sus amigos, viven en la indigencia, limpiando los vidrios de los automóviles e intentando sobrevivir... More

Capitulo 2
Capítulo 3
Capitulo 4
Capitulo 5
Capitulo 6
Capítulo 7
Capitulo 8
Capitulo 9
Capitulo 10
Capitulo 11
Capitulo 12
Capitulo 13
Capitulo 14
Capítulo 15
Capitulo 16
Capitulo 17
Capitulo 18
Capitulo 19
Capitulo 20
Capitulo 21
Capitulo 22
Capitulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capitulo 26
Capitulo 27
Capítulo 28
Capitulo 29
Capítulo 30
Capitulo 31
Capitulo 32
Capitulo 33
Capitulo 34
Capitulo 35
Capitulo 36
Capitulo 37
Capitulo 38
Capítulo 39
FINAL

Capitulo 1

470 32 40
By JorgeMoonRodriguez

Contenido +18

Pepe apodado "El Chatarras", no despertó con los primeros rayos de luz, ni se le hizo tarde para el colegio. Su vida no era esa y distaba de serlo.
En una casa abandonada, se encontraba teniendo relaciones sexuales con su mejor amigo "El Chacal".

—Follame con mas fuerza... ¡Por favor!.— Gritaba el chatarras mientras cabalgaba con fuerza a su compañero.

—Cada día te vuelves más zorra... Tengo miedo que mi pene no te sea... Ahg... Suficiente.— Dijo el chacal, mientras seguia penetrando a su amigo.

Ahí estaban los dos, completamente desnudos y sudando por la actividad sexual que estaban practicando.

—Correte adentro de mi.— Gimió  mientras se movía con más prisa.

—Te mueves como una puta y eso me pone bien caliente... ¡Agh!... Ahí te va mi leche.— El chacal penetró a Pepe con todas sus fuerzas mientras lo hacía gritar de placer.

Aquella casa abandona, no era de nadie más que de ellos.
Pero  esa casa, había sido testigo de muchas cosas.

—Si van a follar, asegúrense de que no haya nadie. — Dijo una chica que recién llegaba, descubriendo a los amantes en pleno acto.

" La pelos", era una chica que también había sido abandonada desde pequeña. Su vida la había pasado en las calles, limpiando los vidrios de los automóviles que paraban frente a los semáforos.
No tenía nombre, ni sabia nada de su familia. Su única familia era Pepe y el Chacal.

—Que te valga verga lo que hacemos.— El chachal respondió mientras se ponía la ropa.

—Ya pelos, mejor ve a comprar algo para comer. — Sugirió Pepe.

—Ya no hay dinero. Lo último se lo gastó tu "chacal". Preguntale en que cosa lo gastó. — Se burló la pelos.

Pepe miró al aludido, esperando por una respuesta.

—Pues... Me lo gasté en unas empanadas. Tenía mucha hambre y...

—¡Mentira! Lo usaste para comprar pegamento para aspirarlo, maldito drogadicto de mierda. Nunca vas a aprender. ¿Recuerdas que el macaco murió por estar inhalado esas porquerías? ¿Te quieres morir o qué?. — Reclamó la pelos.

—¿Eso es cierto, chacal?.— Cuestionó Pepe.

—No... Yo... Bueno... ¡Ultimadamente, ¿A ustedes que les importa lo que yo haga? Si me quiero meter un plomazo en los sesos, es asunto mío y no de ustedes, malditos metiches.— El chacal término de abrocharse el pantalón y salió de ahí, molesto con sus amigos.

—Cambiate ya. Ayer el Chucky estuvo preguntando por ti y le dije que no te sentías bien. Pero ya sabes lo que sucede sí se enoja. No quiero que te pase nada.— La pelos se acercó y acarició el rostro de Pepe. Ella sabia que el era homosexual y no le importaba. Su sueño, era verse casada con él algún día.

—Pelos yo no...

—No digas nada. Algún día te voy a quitar lo maricón, te vas a casar conmigo y tendremos muchos hijos. Verás cómo "eso", se te va a quitar. Nada más porque no me has querido probar. Ya sabes, que si deseas tomarme, puedes hacerlo. No necesitarás del chacal.— La pelos besó a Pepe mientras su mano bajaba hasta la entrepierna de este y le acariciaba lentamente.

—No por favor. — Pepe apartó a la pelos y se puso la camisa.— Yo te quiero, pero no así. Eres mi mejor amiga y eso nunca va a cambiar. Además, ser gay es algo que se trae, no me lo puedes quitar así cómo si fuera gripe.

—¡¿Por qué no puedes amarme?! Yo te quiero dar todo de mi, mí cuerpo, mí alma, mí todo, tomame por favor.— La pelos se despojó de su vestido sucio y desteñido, quedando completamente desnuda frente a Pepe.— Ven, tocame para que te guste.— La chica tomó la mano de Pepe y la dirigió a su zona íntima. — Siente lo mojada que estoy por ti. Meteme los dedos sí quieres.— Pepe se dejó llevar un poco y con precaución, metió un poco el dedo en la vagina de la pelos.

—No puedo, lo siento.— Quitó su mano de ahí y salió rápidamente, dejando a la pelos sola y desnuda.

—¡Pepe, Pepe no te vayas por favor, no me dejes así!.— Le gritó la chica.

Siempre era igual, pero esta vez, la pelos había llegado demasiado lejos.

En otro lado...

Doña Evangelina y sus sobrinos estaban en la notaría.
Su esposo acababa de fallecer y ahora mismo se llevaban acabo la lectura del testamento.

Evangelina guardaba muchos secretos y lo único que le importaba, era el dinero.
Se había vuelto tan fría y a la vez, era parte del grupo "Hermanas Cristianas". En apariencia, ayudaban al prójimo. Pero esto, solamente le servía para hacer más grande su fortuna y de paso, contar los mejores chismes frente a sus hipócritas amigas.

—Me voy a volver más vieja sí no abre ese maldito sobre. — Reclamó la señora.

—Ya tía, no te mal viajes.— Dijo Brandon. Él era su sobrino favorito, y además, también era bastante guapo y atractivo. Obedecía a su tía en todo, incluso aunque no estuviera de acuerdo.

—Relajate mil tía, no te vaya a dar algo y que oso.— Dijo Martina. Su hermosa y linda sobrina, con el mismo carácter que su hermano.

—Si me permiten, voy a continuar.— Dijo el licenciado. — " Yo, Don Vicente de Saavedra, en pleno uso de mis facultades mentales, hago entrega de mis bienes y dejo a cada miembro de mi familia, lo que le corresponde.
A mi querida sobrina Martina, le dejo la cantidad de 500 dólares para que los use cómo le venga en gana.
A mi apreciado y despreocupado sobrino Brandon, le dejo la misma cantidad que a su hermana. Estoy seguro que lo derrocharán tan pronto cómo llegue a sus manos.

—¡¿Qué oso con el ruco de mi tío?! Dejarnos 500 miserables dólares... Puto anciano ¿Cree que trago aire o que pedo?.— Se exaltó Brandon.

—Hijo, deja de hacer desfiguros. Estás haciendo el oso, cómo dices tu.— Le reprendió su tía.

—¿Puedo continuar?.— Preguntó el licenciado.

—Siga, siga.

—"Y por último, a mi querida y ambiciosa esposa, le dejo la cantidad de 100 dólares. Es tan astuta, que sabrá como usarlos.

—¡¿Qué?!. — Gritó la mujer al oír la cantidad de su herencia.

—Zaz culebra.— Se burló Brandon.

—¡Cierra la boca mequetrefe!. — Le gritó su tía.— Licenciado de quinta, estoy segura que esto es obra suya y sepa que va a pagar muy caro el burlarse de mi. Dios está conmigo y me protege, y en nombre de Dios, proclamo que usted se va a arrepentir.— Amenazó la señora.

—El testamento lo escribió su esposo, de puño y letra. Yo no hice ninguna modificación.— Sonrió el licenciado burlonamente.— Él fue quién modificó, porque dijo que había descubierto algo perverso.— Se acercó el licenciado a la señora y casi le susurró al oído, haciendo que la mujer se estremeciera.

—No sé de que habla. Mi esposo ya estaba senil. Veía fantasmas y seguro no sabía lo que decía. De todos modos, voy a invalidar el maldito testamento. Pelele desgraciado.

—No puede. Tiene la firma legal de su esposo y todo está en orden. La invalidación solamente la hará gasta dinero que ahora ya no tiene. Por cierto, en la ultima cláusula, dice que tienen una semana para desalojar la mansión. Será puesta en venta junto a todas las propiedades y las acciones de la empresa. — Remató el licenciado.

—¿Lo está disfrutando verdad maldito enfermo?. — Cuestionó colérica doña Evangelina.

—Mentiría sí dijera que no.— Sonrió el hombre.

—No será la ultima vez que nos veamos. Usted va a pagar por burlarse de mi.
Dios lo va a castigar con el fuego eterno.— Amenazó la mujer.

—Tiene razón, quizás no sea la ultima vez que nos veamos. Vengo sospechando que su marido fue asesinado y el sospechoso está entre ustedes tres.— Señaló el hombre.

*Flashback*

Doña Evangelina desayunaba con su marido. Don Vicente esperaba el desayuno, pero parecía molesto.

Mientras su mujer endulzaba el jugo de naranja. Discretamente sacaba un gotero y vertía el contenido en el jugo.

—Deja la hipocresía a un lado Evangelina. El detective que contraté, ya me dijo quién eres en realidad. No puedo creer que después de 25 años, apenas me venga a dar cuenta que te casaste conmigo... ¡Por mi dinero!. — Se exaltó el señor.

—Eso no es verdad cariño. Te juro por mi madre que no. Yo en verdad te amo.— Doña Evangelina puso la charola del desayuno frente a su marido.— Siempre me he preocupado por ti, por la familia.

—Ahora entiendo porque nunca me quisiste dar hijos. Siempre poniendo pretextos.— El hombre tomó el vaso de jugo y le dio un sorbo grande.— ¿Dónde está la servidumbre?. — Preguntó el hombre.

—Les di el día. — Sonrió la mujer.

—¿Por qué?.

—Porque quería pasar la mañana contigo. — Soltó burlona.

—No te creo nada, no creo en nada de lo que salga de tu boca... ¡Aghh!.— Don Vicente se llevó la mano al corazón, al parecer, le estaba dando un infarto. — ¡Llama... Llama al médico!.

—No, no voy a llamar a nadie, maldito viejo repugnante.— Sonrió doña Evangelina.

—¿Qué... Qué me... Hiciste?.— Preguntó el hombre a punto de desfallecer.

—Le puse veneno a tu jugo. Y antes de que te mueras, dejame decirte, que el investigador privado, tenía razón. Solamente me casé contigo por dinero y también, es cierto que yo asesiné a tu hermano, para que toda la herencia de tu familia pasara a nuestras manos. Hubieras visto la cara del cretino de tu hermano, suplicando "No me asesines por favor". — Se burló la mujer.

—¡Maldita!.— Gritó el hombre, antes de caer al suelo completamente muerto.

—Maldito tu, viejo asqueroso. Qué Dios mi señor todopoderoso, te refunda en las llamas del infierno junto a satanás y el leviatán.

*Fin del flashback*

—¡Qué horror! ¿Yo, matar a mi tío? Súper no.— Se horrorizó Martina.

—Vámonos niños, tenemos muchas cosas que hacer.— Sentenció doña Evangelina mirando con rencor al licenciado.

—Qué tenga buen día "señora". — Dijo el licenciado, remarcando esta última palabra.

Doña Evangelina tomó su bolsa y salió sin responder, en compañía de sus sobrinos.

La vida de todos ellos, estaba por mezclarse, y el resultado no es nada bueno.

Continuará...

Continue Reading

You'll Also Like

54.4K 4.2K 34
¡FINALIZADA! Papulince x panafresco, un chico sumamente enamorado y otro que no sabe lo que quiere, además de negar rotundamente su amor por Luis, cu...
1.3M 19.5K 66
...
65.9K 9.9K 12
Taehyung era un abogado distinguido entre la sociedad, la vida perfecta hasta que conoció a jungkook, un pequeño de 13 años hijo de su mejor amigo el...
7.2K 1.4K 27
becky lo sabía que freen la engañada con Jenni, su mejor amiga.. esta historia no es mi... una abtacion freenbecky... todos los derecho y réditos a...