Querido diario, JungKook se salió con la suya después de todo.
Estaba saliendo de mi última clase cuando JungKook me tomó de el brazo, me cargo en su hombro y como pudo cubrió mi trasero con su suéter para después comenzar a correr.
Cuando me bajó de su hombro estábamos en una cafetería, la misma a la que siempre voy con JinYoung. Me hizo sentarme frente a él y comenzó a hablar y a decir un par de oraciones que no entendía, honestamente no presté suficiente atención por pensar que si JungKook se ponía muy intenso, donde sería más rápido salir y tomar un taxi para huir de él. Reaccioné cuando puso su mano sobre la mía mientras repetía que le gustaba, pero aún así no terminaba de comprender lo que decía, es como su estuviese al fondo de un pozo intentando escuchar sin el eco. Hasta que formuló una oración que me hizo reaccionar en quien era realmente.
"Sé que te gusto, EunYeong."
Mi corazón latió con fuerza mientras el me observaba con la sonrisa más cínica que había visto en él, no pude evitar apretar el puño del coraje que me dio cuando vi la seguridad con la que lo decía.
Le grité que no era algo que le importara, y si fuese cierto, igual no me acercaría a él después de ver la persona que realmente es. Me marché de la cafetería cuando quiso volver a hablar.
Me siento muy decepcionada.