Escúchame.
Mi corazón retumbaba fuertemente en mis oídos. En esos momentos podría haber matado a Niall Horan, si no fuera por el testigo que tenía frente a mí, Harry, que seguía diciendo trivialidades junto a «Ted».
-Bien, si metes éste Hot Dog entero a tu boca, te daré... diez dólares.
-Que sean... cinco dólares. -Regatea Harry, bueno, él no era tan inteligente a la hora de hacer apuestas, pero no lo culpo.
-Hecho -Dice Niall deslizando el Hot Dog hacia Harry. Ay, dios mío, pienso, ¿Él lo va a hacer en verdad?
Harry entreabre los labios, metiendo el asqueroso Hot Dog de la cafetería a su boca justo cuando el timbre resuena, y en ese momento puedo mirar al cielo y bailar dándole gracias a Dios todo poderoso.
-Me tengo que ir -Dice Harry, parece algo tranquilo al no tener que comer el Hot Dog descompuesto. -Fue un gusto hablar contigo Ted -Extiende la mano hacia Niall y los dos hacen un saludo con los puños y todo eso, como si se conocieron de toda la vida. ¡Por favor! Hace como cinco minutos atrás estaban teniendo un concurso de meadas* Harry se levanta, al igual que yo y Niall. Harry me observa con su sonrisa toda sexy -Adiós, ____. -Murmura con su voz ronca, luego se acerca a mí, para depositar un beso en mi mejilla.
-No te acerques tanto, rulos -Murmura Niall empujando un poco a Harry, para que se aparte de mí. Harry frunce el ceño hacia Niall, que sonríe dulcemente -Sigue tu camino, buen hombre, sigue tu camino. -Exclama empujando aún más a Harry que se tambalea un poco antes de saludar torpemente con su mano e ir caminando, alejándose de nosotros. De seguro piensa que estamos dementes, y otra vez, no lo culpo.
Niall se vuelve hacia mí, aun sonriente, pero su sonrisa se desvanece al ver mi rostro, que de seguro es una de odio total. Él abre la boca, para decir algo, pero yo levanto mi mano, cortándolo.
-Apártate, Niall -Digo y mis pies se mueven por si solos, alejándome de Niall Horan. A grandes zancadas salgo de la cafetería con "Ted" pisándome los talones. ¿Quién demonios se cree qué es? Él no puede simplemente venir, con una boba peluca y creer que yo voy a caer a sus pies. Yo no funciono así.
Cuando estoy a punto de entrar en la clase de Biología, Niall coge mi mano suavemente.
-Espera, hice todo esto por ti, déjame explicártelo.
-Creo que fui bastante clara anoche ¿No te parece? No quiero escucharte.
-Eres imposible -Gruñe Niall soltando mi mano, y dejando sus brazos colgados a sus costados.
-Gracias. -Digo irónicamente y entro en la clase de biología, antes de que él pueda decir algo más.
Amber está sentada junto a mí, su boca aun esta entreabierta por la sorpresa. Su cabeza gira reiteradas veces hacia la puerta, en donde seguro Niall sigue esperándome. Mi celular vibra en mi bolsillo, lo cojo con disimulo, levanto la mirada en el profesor que sigue cernido en la clase, y parece no notarnos.
"¿Hablas en serio?"
Tecleo una respuesta.
"Síp".
"Vaya, ese chico está más loco que el ex esposo de mi madre... ¿Brian? ¿Lo recuerdas? El tipo que coleccionaba mariposas muertas."
"Sí." Escribo, antes de que se le ocurra seguir hablando de los ex novios de su madre, nada bueno ocurre cuando eso sucede. Nada bueno.
-Bien, entonces, cuando los extraterrestres vengan al mundo... ¡Ustedes dos! -Amber y yo nos sobresaltamos, bajando rápidamente nuestros celulares, el profesor nos observa con el ceño fruncido. Cuando está por maldecirnos, la campana suena, y como siempre, nos salva de cualquier reproche.
-Es mejor quedarme aquí, y escuchar como el profesor Webs habla de extraterrestres que enfrentarme a uno allí afuera -Digo alzando la barbilla y apuntando la puerta. Donde Niall asoma la cabeza. Demonios.
Amber suelta una risita, palmeando mi espalda.
-Lo lamento, nena -Murmura -Algunas veces tenemos que enfrentar este tipo de cosas.
- ¿Me ayudaras a echarlo, verdad? -Pregunto, esperanzada. Amber aprieta los labios.
-Er... me encantaría... la cuestión es que... yo... tengo que hacer... -Vacila mirando sus botas negras -Eso, si, exacto tengo que hacer... pipi. Aja, tengo una vejiga muy pequeña y si no voy ahora me hare en los pantalones -Ríe suavemente -Lo siento. -Dice, deslizándose entre los estudiantes.
- ¡No escapes, cobarde! -Exclamo, pero Amber ya está lejos. Ya tendría su merecido la desgraciada.
-¡_____! -Grita Niall cuando yo paso rápidamente a su lado, bajando la cabeza. Algunos se nos quedan mirando, ¿La razón? Pues tengo un tipo que me persigue con fachada de loco maniático. ¡Y ese cabello! Oh por Dios, ¿Cómo se me ocurrió llevarlo al cine con esa cosa?
- ¡______, corazón! -Canturrea, ¡Bastardo! Está haciendo esto apropósito. - ¡Mi princesa! ¡No corras, amor mío!
Siento como la sangre sube lentamente por mis mejillas, las risas resuenan en el pasillo. Aprieto los puños, deteniéndome. Volteo hacia Niall, que para abruptamente. Casi tropezándose. Suelto un suspiro, observando su atuendo. Desde su peluca hasta su remera que dice "Bésame, soy irlandés". Debería decir "Golpéame, soy un gilipollas". Un grupo de chicas se detiene observando a Niall, no porque fuera lindo o algo así, se quedan a mirarlo por lo patético que se ve. Y por alguna razón eso me molesta.
-Te ves patético -Gruño, cruzándome de brazos.
-Lo sé.
-Eres un idiota -Vuelvo a soltar, con otro gruñido.
-Lo sé.
-Esa peluca te queda horrendo.
-Lo sé.
-En estos momentos quiero golpearte.
-Comprendo.
-Lo que hiciste estuvo horrible, me molesto mucho.
-Sí.
Mi cara se torna roja, por la rabia que me empieza a consumirme lentamente. Niall, como siempre, esta tan tranquilo. ¿Por qué está tranquilo?
-Sé que lo que hice estuvo mal...
-Oh, no. -Retrocedo un poco, haciendo una mueca -Ya se el tonto discurso. Me vas a decir que no volverá a pasar, que me quieres, y yo sonreiré y seremos felices por siempre.
Niall sonríe, alzando los brazos.
- ¡Exacto! ¿Ves lo fácil que es todo?
- ¡No! -Gruño arrugando la nariz, - ¡No es fácil! Nada es fácil. -Cierro los ojos, tratando de tranquilizarme -Lo único que haces es confundirme. -Replico, abro los ojos cuando siento la respiración de Niall acariciando mi mejilla. -Un momento... -Murmuro, cuando su boca roza mi labio inferior. - ¿Cómo coño sabes en que escuela entro? -Lo aparto, con los ojos bien abiertos.
Niall aprieta los labios, tratando de no sonreír.
-Porque... -Dice, levantando su dedo índice -Soy el mayor acosador del mundo. -Ruedo los ojos -Incluso soy mejor acosador que tú.... Y Christian Grey*-Abro la boca, para protestar, pero cuando escucho sus palabras, frunzo el ceño.
- ¿Christian Grey? -Digo, tragando saliva -Oh no, ¿Has leído 50 sombras de grey*?
Niall enarca una ceja, burlón.
-Obvio -Dice rodando los ojos - ¿Quién no?
- ¡Genial! -Exclamo sarcástica -Tengo un novio que lee porno. Simplemente, no puedo creerlo.
- ¿Qué haya leído cincuenta sombras de Grey?
- ¡No, idiota! -Gruño golpeando mi frente - ¡Que me hayas perseguido hasta aquí! ¿Es que tú no conoces el significado de espacio propio?
-Oye, escucha -Dice de repente, en un murmullo.
- ¿Qué? -Frunzo aún más el ceño, nos quedamos en silencio, oyendo las voces de los estudiantes y los zapatos rechinando por los pasillos.
- ¿Escuchar qué? -Levanto la mirada, fulminándolo.
- ¿Sientes eso?
- ¡¿Sentir qué, joder?! -Grito en un susurro.
-Es nuestra primera pelea. - Niall sonríe, enternecido.
- ¡Oh, por favor! -Miro al cielo, preguntándome que hice para merecer a este idiota. Quiero darme la vuelta, pero Niall coge nuevamente mi mano, deteniéndome, para que no escape.
-Escúchame -Murmura - Hasta te escribí una canción... -Carraspea, y hace su mano un puño, pretendiendo un micrófono. -Perdón... -comienza a cantar, -Perdón... -Luego se detiene, sonriente.
- ¿Y luego? -Enarco una ceja, desconcertada.
-Eso es todo. -Se encoge de hombros.
«Ay, que profundo»
Ruedo los ojos.
- ¡Espera! -Exclama -Todavía no está terminada... deberías estar sonriendo, deberíamos estar observando como el sol cae lentamente al atardecer o algo así, deberías haberme perdonado ya. Quiero decir, ¿Quién más haría esto por ti?
-Eres tan imbécil. -Digo cruzándome de brazos. - ¿Qué querías? ¡Que estuviera feliz porque mi novio me engaña! ¿Eh? ¡Mírame! -Grito y algunas chicas que están cuchicheando sobre el cabello de Niall me observaban - ¡Mi novio me engaña! ¡Sí! ¡Qué felicidad!
- ¡Alquílate un gato! -Grita una de las chicas, la fulmino mostrándole mi hermoso dedo del medio y haciéndola callar. Ja, no te metas con ____, perra.
- ¡Espera! -Vuelve a decir Niall, levantando una mano -Quédate justo como estas -murmura y yo frunzo el ceño sin moverme. Niall quita su celular, mientras teclea algo, luego y sin aviso el flash de la cámara me ciega. Parpadeo, confundida.
- ¿Qué demonios...? -Susurro, aleteando mis pestañas.
-Te ves sensual cuando estás enojada-bromea guiñándome un ojo, luego levanta su celular mostrando la foto en donde estoy yo, con el entrecejo fruncido y los labios apretados.
« ¡Que horrible! Luzco como si estuviera estreñida o algo así»
- ¿Por qué hiciste eso? -Siseo.
-Para ponerla en nuestro álbum de recuerdos -Dice dulcemente, como un genuino cabrón.
-No tenemos álbum de recuerdos. -Coloco los brazos en mis caderas.
-Decidí, en este momento, que lo vamos a tener y esta -Dice levantando su celular con la fotografía -Sera la primera foto que pegare.
-Basta, esto se termina, vete. -Mi paciencia diluye rápidamente, como si jamás hubiera estado allí. « Las pelotas de Niall corren peligro.»
- ¡No! No hasta que me perdones. -Refunfuña, como niño pequeño - Escúchame solo un segundo... ¿Bien?
Suelto un suspiro. Eso es todo lo que él quiere, que lo escuche por un segundo, y luego se largara. Bien, puedo vivir con eso.
-Vale. -Digo a regañadientes, levantando mi barbilla.
-La verdad es que yo... -Comienza diciendo, con voz de perro degollado.
-Ya, listo, el segundo ha pasado. -Alzo mis manos, victoriosa.
-No lo decía literal -me gruñe -Escúchame. -Cuando no digo nada él suelta un suspiro y dice: -Lo siento ¿Si? Solo tú tienes el poder de hacer que mis días se tornen brillantes. Perdóname por ser tan tonto, nunca antes había amado a alguien así, y eres a quien herí sin intención. Nunca volverá a pasar. Te amo. -Lo dice todo tan rápido que tengo que procesarlo por varios segundos.
-Vaya, que profundo -Ironizo - ¿De dónde lo quitaste?
-Internet. -Dice simplemente, encogiéndose de hombros.
-Eres inadmisible -Digo queriendo darme la vuelta, y escapar de él, y simplemente dormir, hasta despertare y asegurarme que fue una pesadilla.
-No sé lo que inadmisible significa pero... ¡Necesito que me perdones! Además no soy bueno expresando disculpas, ¿Qué mejor profesor que la computadora? Déjame explicarte todo. -Dice acercándose -Simplemente... yo... -traga saliva -No voy a soportar si esto se acaba, no tan pronto, no de esta manera.
-No voy a dejarte, Niall -Digo frunciendo el ceño.
- ¿Ah, no?
-No, idiota. Solo... estoy enojada.
-Te lo voy a explicar todo ¿Entiendes?
-Si -asiento.
-Por eso eres la mejor -Dice acunando sus manos en mi cara e inclinándose para darme un beso. Lo aparto.
-Ja, no lo creo, tendrás que esforzarte más, amorcito -Escupo, el sarcasmo es obvio en mi voz -Además compartiste saliva con Tiffany, tendrás que desinfectarte la boca si quieres volver a probar estos sexys labios -Frunzo mi boca, tirando un beso en el aire. Niall suelta un suspiro.
-Eres cruel.
-Lo sé -Murmuro, dando pequeñas palmaditas en su mejilla, luego me doy media vuelta, alejándome, mientras contoneo mis caderas.
- ¡Eso es trampa! -exclama Niall, con voz estrangula. Suelto una risa, inclino mi cabeza hacia atrás, guiñándole un ojo antes de desaparecer al doblar en los pasillos.
***
Suelto un bostezo, llevando otra palomita a mi boca. Mis parpados van cerrándose, cada vez más pesados. Observo como la pantalla de la televisión se hace borrosa, a medida que caigo en un sueño.
El timbre me sobresalta, haciendo que las palomitas salgan disparadas por todas partes, como copos de nieve.
- ¡Yo voy! -Exclama Madison, perezosamente, cierro los ojos, escuchando como el clic de la puerta se abre. Estoy apunto de dormir nuevamente, cuando la chillona voz de Madison me sobresalta.
-¡______! Aquí un tipo rarito quiere verte.
Abro los ojos, confundida. ¿Harry? No, ¿Por qué Harry me visitaría? Me levanto del sofá, refunfuñando. Mis pies se arrastran hasta la puerta principal. Casi me atraganto cuando veo a Niall que me sonríe angelicalmente.
-Creo... creo que los dejo solos -Dice Madison, mirando de reojo a Niall. Rápidamente se apresura a desaparecer escaleras arriba. ¿Por qué todo el mundo se escapa cuando "Ted" está cerca? Me pregunto, pero luego al ver más bien a Niall, me sobresalto.
- ¿Qué te paso? -Pregunto, mirando su camiseta, toda rasguñada.
-Bueno, básicamente, subí a mi primer bus solo.
- ¿Y?
-Solo puedo decirte... que nunca, por lo que más quieras, molestes a una anciana que tiene un gato... y un bate de beisbol.
-¿Por qué una anciana tendría un bate de beisbol? -Murmuro entornando los ojos.
- ¿En realidad quieres saberlo?
-No.
-Vale-Asiente con la cabeza. Toma una gran bocanada de aire y luego exhala - ¿Que tengo que hacer para que me perdones? -Empieza diciendo -Dime, realmente no te comprendo. Un día estamos bien y al otro... todo se desmorona.
Enarco una ceja. ¿Él habla en serio?
-Tú lo desmoronas -Digo, impasible - Me haces pensar que eres el novio perfecto... Y luego ¿Qué? Vas y besas a la zorra de Tiffany en televisión. ¿Qué creías? No sé cómo realmente quieres que yo reaccione.
Niall se queda estático, baja sus gafas mirándome sorprendido.
-Sí, acabo de llamar a Tiffany zorra ¿Algún problema? -Me cruzo de brazos. Entonces Niall sonríe ampliamente.
-No, pero te ves sexy enojada.
Inhalo fuertemente, fulminándolo.
-Vale -Ríe nervioso, y retrocede unos pasos -Te ves sexy, pero me das algo de miedo.
-Vete, Niall -Murmuro negando con la cabeza, cansada de todo esto, ¿Por qué no puede dejarme en paz? Niall se acerca, con paso lento, como si yo fuera un animal salvaje y en cualquier momento atacara contra él. Levanta su mano, y lentamente acaricia mi mejilla, su respiración cosquilleando mi mejilla.
-No me gusta que peleemos -Ronronea, su otra mano se desliza hacia mi cintura, atrayéndome más a él, hasta que mi cuerpo está prácticamente pegado al suyo. Sus labios descienden a mi cuello, depositando suaves besos. Antes de que se le ocurra violarme en la puerta de mi casa, lo empujo. Niall me mira con la respiración pesada, y los ojos azules oscurecidos.
«Uy, se éxito»
- ¿De verdad, Niall? ¿Seducción? ¿Tan bajo has caído? -Enarco una ceja, pero no puedo negar el retumbo de mi corazón acelerado.
Niall inhala bruscamente, pero no dice nada. Ruedo los ojos, entrando nuevamente a mi casa, pero él detiene la puerta con su pie antes de que la pueda cerrar.
Puto.
- ¿Qué tengo que hacer, ____? -Murmura -Dime.
-Suplica, Horan -Digo con una sonrisa en los labios.
-Si no te has dado cuenta es lo que he estado haciendo todo el día. -Replica.
-Pues tendrás que esforzarte más.
-Antes de que cierres la puerta en mi cara, te advierto que volveré, nena. Esto no ha acabado.
-Adivino, ¿Zayn te aconsejo que dijeras eso? -Suelto sarcástica, y Niall se encoge de hombros, avergonzado.
-En realidad... sí.
Ruedo los ojos, y antes de que cierre la puerta, Niall exclama:
-¡Esto solo ha empezado!
Y entonces la puerta resuena cuando la cierro en las narices de Niall Horan. Y sin poder evitarlo sonrió, preguntándome como puede ser tan imbécil, pero entonces mi subconsciente se burla de mí. Estoy enamorándome de ese imbécil. Y eso me asusta.
*concurso de meadas: es una frase no literal, usada cuando dos personas compiten entre sí, hombres, para ser exactos.
*Christian Grey: personaje principal del libro 50 Sombras de Grey, que se caracteriza por su carácter casi "obsesivo" y "acosador" por la protagonista femenina.
*50 sombras de Grey: Libro erótico.