La noche sigue en esa sala, las amigas de Clarke, a excepción de Octavia, parece que han aceptado la situación entre Lexa y la rubia, llegaron a odiar a Lexa por lo mal que lo pasó Clarke, pero al ver la sonrisa que ahora no cesa en la cara de la rubia, no les ha quedado más remedio que darle una oportunidad y aceptarla como una más del grupo, realmente, a ninguna les gusta Finn para su amiga, solo lo aceptaban por ella.
Lexa sigue dándole vueltas en su cabeza a las palabras de Octavia, y además de bailar, cada dos por tres, se aferra a los brazos de Clarke, abrazándola como si no hubiera mañana, besándola mientras se pierde en esos labios, mirándola a los ojos sin decir nada, fundiéndose en ese azul como si quisiera nadar para siempre en ese brillante mar. Clarke se ve sorprendida por la actitud de la castaña, esos abrazos y esos besos son más cariñosos de lo habitual, no son como esos besos lascivos que suelen compartir siempre o esos abrazos en los que buscan el calor y el roce de sus cuerpos, en ellos hay mucho más, y Clarke sin saber por qué, no puede dejar de sonreír por ello.
- ¿Estás bien? – pregunta la rubia al ver cómo Lexa la mira embobada.
- Sí...es solo que...no quiero separarme de ti – la abraza de nuevo, aferrándose a su cintura y hundiendo su cara en el cuello de la rubia.
- Pues no lo hagas – susurra Clarke, abrazándola con las mismas ganas.
- Si te pido que vengas conmigo después... ¿crees que tus amigas se enfadaran? – la mira a los ojos con esa mirada de cachorrito adorable que tanto conquista a Clarke.
- Pues no lo sé...aunque primero tendrías que convencerme a mí ¿no? – levanta una ceja mordiéndose el labio divertida y juguetona.
- Vaya...pensaba que después de dejar que te sentaras en mi cara y lo disfrutaras tanto, no tendría que convencerte de volver a dormir conmigo – mueve ambas cejas dibujando esa socarrona sonrisa de lado.
- Eres mala Woods, eso es jugar sucio – le da un golpe en el hombro separándola de ella, provocando que la castaña se ría divertida mientras Clarke niega con la cabeza.
Lexa para su risa y mordiéndose el labio, la mira de arriba abajo, acercándose provocativamente a ella de nuevo, llevando sus labios hasta su oído para susurrar sensualmente en él.
- Y a usted le encanta que juegue sucio, Inspectora Griffin – roza con sus labios su lóbulo al decirlo, provocando un escalofrío que recorre como un rayo todo el cuerpo de la rubia, estremeciéndola por completo.
Clarke sonríe con una expresión entre bobalicona y excitada cuando Lexa se separa un poco de ella, mientras Octavia observa la escena con una ceja levantada cruzándose de brazos, algo que no pasa desapercibido para Lexa que la mira y traga hondo, sintiéndose intimidada.
Lexa carraspea y vuelve su mirada hacia Clarke, la rubia la mira frunciendo el ceño pidiéndole una explicación por su repentino cambio de expresión al mirar a Octavia.
- No iba a preguntarte nada, pero viendo tu cara ahora mismo, quiero saberlo ¿qué te ha dicho Octavia?
- No quiero hablarlo aquí, Clarke, por eso quiero que vengas conmigo esta noche, me gustaría hablar tranquilamente, sin nadie que nos observe – la rodea por la cintura entrelazando sus manos en su espalda y le da un tierno beso en la punta de la nariz.
- Pero... ¿hablar hablar o...? – mueve repetidamente ambas cejas, sonriendo de esa manera pícara que a Lexa le encanta – ¿...hablar a nuestra manera?
- Hablar de verdad, aunque luego, si tú quieres, también podemos hablar a nuestra manera – Clarke se muerde el labio inferior y Lexa sin poder resistirse, lo atrapa con sus labios haciendo gemir a la rubia – si te muerdes el labio de esa manera, será imposible que podamos hablar – susurra sobre sus labios, entremezclando sus respiraciones cuando Clarke abre la boca totalmente excitada.
- ¿Dónde coño está Raven? – pregunta Octavia en un tono bastante alto, haciendo que las chicas se separen y todas se pongan a buscar a la latina con la mirada por toda la sala.
Raven, mientras sus amigas bailaban, no ha perdido el tiempo, y en cuanto Ruby Rose ha acabado su sesión, la latina ha aprovechado y se ha acercado a ella, ambas se han puesto a hablar tranquilamente sentadas en uno de los sofás del fondo de la sala, resguardándose de las otras personas, y parece ser que la conversación ha ido más que bien, ya que Raven se encuentra en esos momentos devorando los carnosos labios de la actriz, o Ruby está devorando los labios de Raven, es bastante difícil saberlo entre tanto sensual intercambio de saliva.
- Vaya Griffin, parece que no vas a ser la única que no vuelva al hotel esta noche – Harper le da unos suaves codazos a Clarke en su costado riéndose, provocando que la rubia sienta como sus mejillas enrojecen al verse pillada en sus intenciones, mientras todas siguen alucinadas mirando la escena.
- Flipo con Raven, al final lo ha conseguido – comenta Niylah entre risas.
- Parece que al final Woods sí tendrá que buscarse un vestido de dama de honor – dice Octavia situándose al lado de Lexa, mirándola con cara de pocos amigos pese a su broma.
- Sí, eso parece, aunque tampoco es que yo haya hecho mucho, no me ha dado tiempo ni a presentarlas – Lexa se ríe mirando hacia Raven y Ruby ignorando la cara de Octavia, la actriz de repente se sienta a horcajadas sobre la latina – joder, como sigan así, van a acabar follando delante de todo el mundo.
- No hay paparazzis por aquí ¿no? – pregunta de repente la rubia mirando hacia los lados algo preocupada.
- No, tranquila, tienen prohibida la entrada – responde Lexa abrazándose a su rubia, tranquilizándola con su profunda y verde mirada – ¿te he dicho ya lo preciosa que estás esta noche?
- Sí, pero me encanta que me lo digas – Clarke se acerca a sus labios y le da un tierno beso, apoyando su frente en la de la castaña después – aún me cuesta creer que esto esté pasando – suspira, sin moverse.
- Te quiero Clarke – suelta de repente Lexa llevada por todo lo que la rubia le hace sentir, no entiende porqué antes le era tan difícil decirlo cuando siempre lo ha sentido, quizá porque ahora siente el verdadero miedo de volverla a perder y quiere recordárselo cada vez que puede, o quizá porque a ella también le parece todo como un sueño, un sueño del que no quiere despertar nunca.
- Oh por Dios, a este paso acabo vomitando arcoíris con tanto amor gay en el ambiente – se queja Octavia interrumpiéndolas, ganándose una mirada de reprimenda por parte de Clarke - ¿qué? No me mires así Griffin, dais mucho asco con tanta repentina felicidad.
- Y tú hueles a envidia por todas partes – suelta Clarke sin pensar, cansada de las miraditas y los comentarios de su mejor amiga.
- Uy sí, que envidia me dais – el alcohol está empezando a afectar a Octavia, y su tono y gestos irónicos lo demuestran, pero aun sabiendo que es el alcohol el que habla por la morena, Clarke no puede evitar enfadarse con ella – te recuerdo que como tú, yo tengo a un hombre esperándome en casa – y eso último es la gota que colma el vaso y Clarke se acerca hecha una furia hacia Octavia para encararla.
- ¿Pero a ti qué coño te pas...? – la rubia está dispuesta a enfrentarse a la que dice ser su mejor amiga, pero una mano firme sobre su pecho frena sus intenciones.
- ¡Parad! – exclama Lexa colocándose rápidamente en medio de las dos – No os peleéis joder, esto no es necesario, lo último que quiero es que os peleéis por mi culpa. Octavia relájate un poco y tú – coloca ambas manos en las mejillas de Clarke para que deje de mirar a la morena y la mire a ella – no le hagas caso, está borracha y no sabe lo que dice.
- ¡Que se pare el mundo que llegó la salvadora! – exclama Octavia llena de ironía, riéndose de una manera burlona.
Lexa se separa de Clarke y se acerca a Octavia.
- ¿Puedes parar? Entiendo que estés molesta conmigo, pero no lo pagues con Clarke, ella no tiene la culpa de nada – le dice muy seria, mirándola fijamente a los ojos.
- Parece ser que mi discurso no ha servido para nada – Octavia rechina con sus dientes, se siente molesta y rabiosa, ver que después de lo que le ha dicho a Lexa todo sigue igual, que siguen haciéndose carantoñas y gestos lascivos como si nada, puede con la poca paciencia que tiene.
- Joder Octavia, dame tiempo – susurra Lexa intentando que Clarke no las escuche – te prometo que hablaré con ella, pero no aquí, este no es el lugar para hacerlo.
- No confío en ti Woods, intento creerte y no puedo, y me jode saber que Clarke va a acabar dañada otra vez por tu culpa y estáis ahí como si nada, como si el tiempo no hubiera pasado y tú no hubieras sido una hija de puta – le da otro trago a su copa, mirando a la rubia por encima del hombro de Lexa, la cual las observa con el ceño fruncido y los brazos cruzados.
- Déjame intentar enmendar mis errores, por favor Octavia, no te pido que confíes en mí, solo te pido que respetes a Clarke y no os hagas esto – Octavia vuelve a mirar a Lexa, y por unos segundos, observando esos brillantes ojos verdes que la ex camarera posee mirándola de manera sincera, se permite creerla.
- Está bien Woods, pero cómo te he dicho antes, hazle daño, y te faltaran piernas para correr – pone una mano en su hombro y lo aprieta, en un gesto confuso para Lexa, no sabe si es cariñoso, o igual de amenazante que sus palabras.
- Gracias – es lo único que alcanza a decir, sabe que Octavia habla en serio, pero ella no tiene ninguna intención de hacerle más daño a Clarke, sino todo lo contrario.
- Lo siento Clarkie, ya sabes que cuando bebo digo tonterías – se disculpa Octavia apartando a Lexa para ir a abrazar a Clarke, que destensa su cuerpo y se deja abrazar por su mejor amiga – sabes que te quiero y soy demasiado protectora contigo, no me culpes por ello – le dice sin separar el abrazo y Clarke se aferra más a ella.
Lexa las observa en silencio con una sonrisa, sí, por una parte le da rabia que Octavia actúe así con ella, pero por otra, lo entiende perfectamente, solo quiere proteger a su rubia del dolor, y con todo el que ella misma le ha causado a Clarke, hasta le sorprende que Octavia le de ese pequeño voto de confianza. Sigue sin saber qué va a decirle a Clarke, sigue sin saber cuál es su futuro más próximo con ella, y aunque se muere por tenerla perdida entre sus brazos en su cama, sabe que deben hablarlo como dos adultas y no solo ser esas veinteañeras cachondas que solo piensan en perderse en el cuerpo de la otra.
De repente Dani, el amigo de Lexa, hace su entrada corriendo hacia la castaña como una loca.
- Lexa, Lexa – grita desesperado – uy hola – saluda en español parándose al ver a la ex camarera rodeada de Clarke y sus amigas.
- Hola Dani, ¿qué pasa? – pregunta Lexa también en un casi perfecto español algo preocupada al ver la cara de circunstancia del chico, Clarke la mira mordiéndose el labio, el español siempre le ha parecido un idioma muy sexy, y en la voz de Lexa aún más.
- Pues la Ruby esta, que ha cogido a una chica y se ha pirado sin decir nada, y en teoría tenía que volver a pinchar, de verdad, estoy hartita de tanta bollera – exclama suspirando como una verdadera drama queen – sin ofender cari, sabes que tú eres mi bollera favorita.
- ¿Ruby se ha ido? Espera, espera, pero si estaba con... - Lexa busca con la mirada a Raven y en efecto, la latina no está – Clarke, siento decirte que tu latina sabrosona se ha ido con la actriz tatuada – informa a la rubia esta vez volviendo a su idioma natal, riéndose sin poder evitarlo por la cómica situación.
- ¿En serio? ¡Joder con Raven! Al menos podría habernos dicho algo – niega con la cabeza mirando a sus otras amigas las cuales lo han oído todo.
- Déjala Griffin, que disfrute – suelta Harper totalmente despreocupada y alcoholizada sin dejar de bailar.
- Por cierto Dani, ella es Clarke – Lexa pone una mano en la cintura de la rubia, acercándola más a ellos.
- ¿Así que esta es tu famosa Clarke? Vaya, vaya, ahora empiezo a entenderlo todo – dice mirando sin cortarse un pelo sus voluptuosos pechos – con esas dos maravillas hasta yo me volvería loca.
- Dani, por favor – Lexa se lleva una mano a la frente, un poco avergonzada por el comportamiento de la loca de su mejor amigo.
- ¿Qué ha dicho? – pregunta Clarke confusa al no entender ni la mitad de la conversación, viendo como ese afeminado chico mira descaradamente sus tetas.
- Nada, nada, no le hagas caso – Lexa intenta salir del paso cómo puede, pero la maliciosa sonrisa que está poniendo ahora su amigo le hace sospechar que no va a ser tan fácil.
- He dicho que tienes unas tetas preciosas, cariño – suelta Dani en un inglés con acento español que provoca que Lexa se parta de risa – por cierto, encantada, yo soy Dani – le ofrece una mano y Clarke se la estrecha tímidamente, algo abrumada por el comentario del chico, ahora empieza a entender porque Lexa y él son tan amigos – bueno cariñas, voy a seguir con la fiesta, ya que la maldita bollera esta nos ha dejado tiradas, Dani la DJ tendrá que hacer su presencia en cabina.
- No sé qué haría sin ti – Lexa y su amigo se abrazan cariñosamente.
- Lex es preciosa, pórtate bien con ella, se la ve súper enamorada de ti – susurra en su oído para que nadie más lo oiga.
- Lo haré – Lexa le guiña un ojo al separar el abrazo y Dani se aleja de ellas contoneando las caderas de manera exagerada.
- Es peculiar – comenta Clarke cuando Dani está lo suficientemente lejos para no escucharlas.
- Debajo de toda esa pluma, el maquillaje y los tacones, es un chico de lo más normal, pero por la noche saca a la luz la vena loca, no puede evitarlo – comenta riéndose mirando a la rubia.
- No lo dudo.
Ambas se miran fijamente a los ojos quedándose en silencio, pero no un silencio de esos incómodos como los de la noche anterior, sino un silencio en el que las sonrisas de ambas entran en juego luchando por ver quién es la más amplia y sus ojos batallan por ver quién se pierde antes en la profundidad de los otros.
- Aquí ya no me necesitan, así que cuando quieras, podemos irnos – Lexa rompe el silencio llevando una mano a los labios de la rubia, acariciando suavemente su labio superior y ese enloquecedor lunar con su dedo índice, el cual es atrapado por los labios de la rubia, que no duda ni un segundo en succionarlo y lamerlo dentro de su boca sin dejar de mirar los ojos de la castaña, que se dilatan de golpe ante ese sensual gesto – joder Clarke... - resopla excitada - sí, creo que será mejor que nos vayamos – la agarra algo brusca de la cintura y estampa sus labios devorando su boca ferozmente.
- Por mí perfecto – susurra Clarke sobre sus labios separando levemente el beso.
- Pues déjame ir al despacho a por mis cosas y nos vamos.
- Vale, pero no tardes, mientras le digo a las chicas que me voy contigo – le da un suave beso y se separan.
- Gracias por evitarme el mal trago – Lexa le guiña un ojo y empieza a irse hacia su despacho privado situado en una de las puertas que hay en la sala VIP.
Clarke observa por donde se va la ex camarera con una sonrisa de lado y un pensamiento bastante pervertido en la cabeza, así que rápidamente les informa a Harper, Niylah y Octavia que se va a dormir a casa de Lexa y aún más fugazmente se va hacia la puerta por donde ha entrado Lexa.
Mira hacia los lados intentando no ser vista y abre y cierra la puerta con rapidez adentrándose en el despacho de Lexa. La castaña se encuentra detrás de su mesa, dejando unos papeles ordenados con la intención de coger su chaqueta y salir de allí, pero al ver a Clarke apoyada en la puerta, se queda estupefacta mirándola con la boca abierta al ver la ceja alzada de la rubia y esa sonrisa de lado que muestra sus intenciones.
- ¿Qué haces Clarke? Iba a salir ya mismo.
Clarke se muerde el labio inferior sensualmente, y cierra la puerta con la llave que está puesta ante la atenta y confundida mirada de Lexa.
- Lo siento Woods, pero no puedo esperar a llegar a tu casa, me has puesto tan cachonda hablando de esa manera tan sensual en español, que pienso comerte encima de esta mesa ahora mismo – mientras va hablando, poniendo esa ronca voz que tanto excita a la castaña, se va acercando poco a poco hacia Lexa mirándola intensamente.
A Lexa se le caen los papeles que tenía en las manos por los nervios, desparramándose por el suelo.
- Joder Griffin... - la temperatura corporal de Lexa ha subido varios grados de golpe al ver esa penetrante mirada de la rubia y escuchar esa ronquez tan adictiva de su voz.
Clarke no se corta un pelo, y situándose delante de Lexa apartando los papeles con el pie, la acerca a la mesa con el choque de sus cuerpos, tira todo lo que hay sobre ésta al suelo en un movimiento rápido e insinuante que hace temblar todo el cuerpo de la ex camarera.
- Menos mal que la música está alta, porque pienso hacerte gemir hasta que te quedes sin aliento – dice Clarke susurrando ronca y sensualmente, rozando los labios de Lexa con los suyos, en un toque completamente tentador.
- Vale – traga saliva profundamente sin dejar de contemplar esos azules ojos bañados por el deseo – pero luego nos vamos a casa y vamos a hablar.
- Prometido, pero ahora te voy a hacer hablar a nuestra manera – la empuja contra la mesa, haciendo que Lexa tenga que recostarse en ella.
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Buenas queridísimas lectoras!!!
Siento haceros esperar más días que antes pero tened un poco de paciencia conmigo, tengo muy poquito escrito y la inspiración brilla por su ausencia últimamente!
¿Qué os ha parecido el capítulo?
¿Pensáis como yo que Octavia está siendo un poco dura o pensáis que tiene toda la razón?
Parece que Raven ha conseguido su objetivo hahaha ¿qué os parece a vosotras? hahahaha
¿Y qué os ha parecido Dani? Me encanta este personaje que me he sacado de la manga, ¿y a vosotras? hahahaha
Y bueno...Lexa está completamente dispuesta a hablar, aunque parece que Clarke no está muy por la labor, al menos a hablar como deberían hacerlo hahahaha ¿Qué creéis que le dirá Lexa?
Bueno, espero que os haya gustado el capítulo, que sigáis adorando esta historia como yo lo hago y que me dejéis muchas y suculentas opiniones, teorías y votos para poder contestaros una a una! Os adoro!!!
Nos leemos!!! (espero que pronto!)