Camila POV
Habían pasado tres semanas y cada domingo inmediatamente cuando estuviera a punto de salir el sol, Lauren y yo salíamos de la universidad para tomar la carretera e ir al mismo bosque, nos acostábamos en el pasto e imaginábamos como sería nuestra vida como madres. Se podría decir que los domingos eran los días donde amabas demostrábamos el verdadero amor mutuamente, cada domingo en la tarde salíamos del bosque para ir a algún restaurante a comer y en la noche era donde Lauren con sus ojos verdes llenos de lujuria besaba cada parte de mi cuerpo. Nuestra vida cambia a cada domingo, pues cuando era otro día la veía muy poco pues Dinah pensaba que si seguía envolviéndome en la "red de mentiras" de Lauren yo saldré lastimada, pero, yo amo a Lauren y la verdad ya no me importa mucho lo que diga Dinah, aunque hay días que pienso que Dinah tenía una relación con Lauren y como la desecho ella tiene celos, muy loca la idea pero es lo único que concuerda.
Era sábado por la noche y me encontraba sentada en mi cama con mi laptop encendida, en la pantalla había miles de palabras llenas de amor que hacía que me inundará en un mar de cursilería. Me encantaba esa novela y no podía creer que esa novela estuviera algo apegada a mi vida amorosa de Lauren, es decir, Carla y Laura se hacen un tatuaje, nosotras cada domingo vamos a un bosque y ellas cada sábado van a un bosque también. Era extraño pero me enamoraba cada vez más de Laura, si ella fuera real, probablemente aunque sonara grosero dejaría a un lado a Lauren.
Mientras leía mi celular empezó a sonar como loco, revise y tenía varias llamadas perdidas de un número desconocido e inmediatamente atendí dicha llamada.
—¡Por Dios! Camila ¿dónde has estado? Me has tenido preocupado por semanas, pero no me voy a enojar contigo...
No reconocía la voz, mire de nuevo el número telefónico y decidí colgar pero inmediatamente la voz regreso.
—Camila, no me ignores, sé que eres tú y que aún me amas... ¿Por qué ya no estamos juntos? ¿Qué hice mal?
Esto era muy extraño, así que decidí seguir el hilo de la conversación.
—No quiero ser grosera, pero... ¿Quién eres?
Escuche un gran silencio pero al fondo de la otra llamada se escuchó una risa burlona.
—Camila, eres muy graciosa, soy yo Ken...
Abrí los ojos como plato y tragué saliva, me había olvidado por completo de Ken, ese chico fue como un comodín para que no me sintiera desesperada y sola cuando Lauren me dejo por un tubo. Ken era atractivo como para una chica hetero pero la verdad el no me llamaba la atención, solo accedí a ser su novia por hacerlo sentir feliz y por no sentirme sola por el echo de tener el corazón roto.
Me sentí mal en aquel momento, quería acabar la llamada pero sabía que el volvería y la verdad Lauren ahora está bien, no quiero que por un chico vuelva a perder la cabeza. Decidí actuar rápido.
—¿Podemos vernos mañana?
—Lo que sea por verte.
Sin decir más colgué y deje aún lado el celular, tenía que planearlo. En la mañana antes de ir con Lauren al bosque me vería con Ken, lo cortaría y seguiría con mi domingo normal, estaba listo, ahora solo quería leer y leer.
[...]
A la mañana siguiente me levante más temprano y fui directo a la cafetería del sur donde me había quedado de ver con Ken, que por cierto estaba ya sentado en una silla con los brazos cruzados y moviendo el pie desesperadamente.
—Ya estoy aquí—exclamé mientras daba un paso y me cruzaba de brazos.
—Iré al grano...—dijo el chico mientras se levantaba de la silla y daba un paso para acercarse más a mi—¿Aún me amas?
La respuesta era fácil, no tenía porque dudarlo o pensarlo, así que al momento de abrir la boca, él me negó.—Camila, sé que no hemos estado mucho tiempo juntos, pero antes de que me respondas quiero saber en dónde has estado estas tres semanas. Dinah está preocupada y enfurecida.
—Si en verdad quieres saber, me debes prometer que no mencionaras a Dinah enfrente de mi... ¿Ok?—exclamé mientras elevaba la voz y me ponía firme, era hora de que dejara salir todo, quería dejar las cosas claras con Ken, quería que Dinah dejara de tachar a Lauren como una maldita perra y que dejara aceptar nuestro amor.
Explique poco a poco como ha sido mi vida durante esas tres semanas, sus expresiones cambiaban, algunas eran de furia y otras era de sorpresa. Pero cuando llegue al punto central el decidió dar su punto de vista.—Voy a romper mi promesa, pero esa Lauren es de único que habla Dinah. Esa chica que haces llamar "tu novia" ¿no le temes?
Su pregunta me pareció muy ridícula, eso odiaba y quería dejar claro que Lauren Jauregui no era ningún monstruo que me valla a comer por las noches.—¿Por qué le temería a mi verdadero amor?
Los ojos de Ken se abrieron como platos y dejó salir un suspiro.—Haces mal Camila, yo no apoyo tu "relación" con esa loca.
—Aparte de insultar a mi novia...—enfatice—¿Qué más quieres?
—A ti
Mis ojos se abrieron como plato y lo que siguió en verdad no me lo esperaba. A pesar de que hubiera gente a nuestro alrededor, Ken me tomo de la cintura haciendo que nuestros cuerpos se juntaran, yo traté de zafarme de él con unos goles en su torso, él me apretó más y empezó a chitarme de manera lenta.—Basta bebé—exclamó, no permitía que nadie me llamara bebé pues eso solo puede Lauren. Él decidí tomarme de la cintura con un solo brazo y con la otra hacía que mi barbilla se levantara para que nuestras miradas se toparán.
Sus labios se acercaron haciendo que mis labios se juntaran con los de el de una manera tan forzosa y asquerosa.
Los problemas se acercaron cuando detrás de mi estaba Lauren.
N/A
Hola! Perdón por si hay alguna falta de ortografía o algo mal redactado.
L@s amo!