—Por amor a la diosa luna —Deniska tomó un vaso de agua que pidió un momento antes mientras Liam seguía con su relato—, por supuesto, tuvieron un bebé.
Los alfas estaban algo anonadados con toda la información brindada por Liam. Algunos inmersos en sus propios pensamientos, otros como Deniska o Isaac, que mostraban en sus gestos y maldiciones los tocados que estaban por todo lo que se estaban enterando.
Natsuki miraba sus manos, ahora podía juntar todo el panorama y sobre todo les creía sobre la amnesia de Jessy, el mismo fue testigo como Jessy chocó mientras caía por los aires. Él ciertamente sabía que, si no hubiera muerto, estaría hecha polvo.
En lo demás no sabía que pensar, una parte de él estaba enojado porque Bael la había mordido antes de abrir otro consenso y otra parte entendía su desesperación. La conexión de mates era algo inexplicable que no podía pasar por alto, su parte lobuna no entendía de leyes o traiciones.
—Si me permiten tomar la palabra —el alfa Robert se dirigió ante los dos escuadrones y alfas presentes después de que Liam terminará—, quisiera expresar una idea.
—Adelante alfa Robert —le admitió Oliver.
—Creo que, si bien antes no ha sucedido, en este momento se nos permita a los alfas reunirnos a nosotros solos sin la presencia de los dos escuadrones para hablar de este tema.
La cara de los dos escuadrones fue muy clara. Jaime se veía indignado y Alan se mordía la lengua para no reírse y amenazar a Robert por aquel atrevimiento. Oliver se veía por otro lado algo confundido.
—Es mejor que todos discutamos esto juntos —empezó a decir el Rey.
—Ustedes prácticamente nos están acorralando —habló Nick molesto mirando a Oliver—, ustedes son familia y se respaldan entre ustedes. Han tenido tiempo para procesar todo esto y es claro que, si el príncipe Bael la ha mordido y la tiene junto a él como su pareja, es que ustedes han decidido perdonarla. Así que creo que es justo que nos dé tiempo para hablar entre nosotros el tema sin la contraparte que está involucrada.
Bael apretó los puños, prometió no interferir hasta que se lo pidieran. Sin embargo, seguir sin decir nada a pesar de haber escuchado cosas como que quieran colgar a Jessy lo estaba volviendo loco.
—Que el príncipe Bael la hubiera mordido no cambia que... —intentó hablar Liam.
—Por favor, Liam —lo corto Murat—, conocemos a Bael lo suficiente para saber que no importa lo que decidamos, si la quiere a su lado y ustedes le respaldan. Prácticamente no tenemos voz y voto en esto.
Liam miró dolido a Murat, aunque este no parecía molesto, más bien parecía desilusionado.
—Al menos entienden que no tienen nada que decir al respecto —se burló Auguste.
Parecía que nuevamente iban a discutir entre todos, entonces todos se callaron cuando Natsuki se levantó.
—Creo que el alfa Robert tiene razón, sé que esto está fuera del protocolo y que parece alguna especie de complot, no obstante, les pido no solo por consideración sino por nuestros fuertes lazos de amistad que hemos forjado con los años, que se nos permita un momento de debate entre nosotros para tener una conclusión de que hacer con la información que nos han brindado.
Natsuki hizo una pequeña reverencia hacia Oliver.
Y ante la negativa que mostraba su escuadrón, Oliver tomó una decisión.
—Creo que tienen derecho a eso —respondió Oliver con semblante triste—, tienen razón, tienen derecho a tener un espacio para debatir.
—Un día diría yo —intervino Jonny—, estamos hablando de una información que causara revuelos entre todo tipos de manadas. Las cosas que hizo Elizabeth se expandieron por tantas manadas como una enfermedad. Muchas de las manadas que están en nuestros territorios se vendrán contra nosotros si tomamos una decisión apresurada. Todos nos quedaremos para el matrimonio del futuro beta, así que tenemos tiempo de sobra para reunirnos mañana y decir lo que pensamos con la cabeza fría y descansada.
—Concuerdo con el alfa Jonny —dijo Natsuki prosiguiendo inmediatamente—, no solo le pido este tiempo para meditar nuestra respuestas pensando en nuestras manadas. Ahora mismo todos estamos muy alterados y temo que podríamos decirnos cosas que nos hieran. La mayoría de los recientes alfas hemos crecido y prácticamente criado hombro a hombro junto al escuadrón menor, lazos fuertes de amistad y amor nos unen a ellos. Así que creo que sería esencial retomar esto en un mejor ambiente.
Oliver sonrió con tristeza. Natsuki era tan inteligente y sabio a pesar de su edad. Se dio cuenta que tenía razón. Los alfas más jóvenes veían con decepción, resentimiento, y desengaño a los miembros del escuadrón menor. Tal vez necesitaban que el escuadrón menor se acercase más como amigos que como príncipes y un día daría el tiempo para eso.
—Está bien —Oliver asintió a pesar de sentir la mirada pesada de los miembros propios de su escuadrón—, pausare en este momento la reunión de manadas que será retomada el día de mañana a la misma hora y el mismo lugar.
—Muchas gracias su majestad —Natsuki hizo otra reverencia, aunque los demás alfas parecían entumecidos—, sé que esto es inusual, le agradezco su benevolencia ante nosotros.
—Entonces nos retiramos primero —Oliver se levantó mirando a los dos escuadrones que parecían paralizados, nada había salido a sus planes—, si no es mucha molestia para ustedes, dentro de unos días será la gran luna y después viene la boda de Theo, así que estamos muy ocupados. Siéntanse libres de usar las instalaciones del palacio a su antojo. Este siempre será su hogar, no importa las circunstancias.
Oliver abrió la puerta, por si solo a pesar de que Sulen intento evitarlo. Hizo un ademán con la cabeza para apurar a su familia. La salida fue incómoda para todos. Liam intentó mirar a los alfas, pero todos le voltearon la cara.
Joon fue el único que le sonrió, pero hasta sus ojos mostraban algo de miedo. Liam sabía que él pobre Joon será señalado por su lazo con Estefan y le sacarían en cara por haber ocultado todo esto. Al menos tendría a Auguste de su lado, el alfa francés sabría poner toda la atención y tirria hacia él.
—Sugiero que vengan todos a la residencia de mi manada —dijo de inmediato Natsuki.
—No creo que Auguste, Joon y Bastian deberían estar presentes —replicó Deniska mirando a Auguste que le sonreía engreídamente y le lanzó un pequeño beso volado—, los tres están obviamente a favor de esa.
—Yo estoy tan sorprendido como tu Deniska —Bastian la miró sintiéndose traicionado—, que tenga una opinión diferente no les da derecho de que nos excluyan.
—Tu estarás sorprendido —Deniska señaló a Auguste y a Joon—, pero estos dos de aquí lo sabían muy bien.
—¡Era un secreto familiar! —exclamó Joon sintiéndose atacado—, ¿Crees que no quise llamarlos inmediatamente después de enterarme?, he estado cuatro meses comiéndome las uñas y teniendo miedo de soltar el chisme sin querer.
—No sé de qué podremos discutir —Auguste bostezo con intención de enfadarlos más—, Bael ha aceptado a mi prima y no dejará que hagan daño a su pareja ni a su hijo. Yo tampoco, así que...
—Así que si esa es tu posición, creo que deberías hacerle caso a Deniska y evitar ir a nuestra reunión —lo corto Natsuki mirando a Auguste como si este fuera un bicho asqueroso, Auguste se sentó recto ya que la mirada gélida de Natsuki hizo que todos sus instintos se pusieran alerta—, sé que tal vez las cosas que pasaron gracias a Jessy y su familia no fueran nada para ti, pero algunos lo perdimos absolutamente todo y merecemos al menos luchar por quienes estuvieron involucrados de cualquier manera paguen por lo que hicieron. Se lo debo en memoria de mis padres.
Auguste alzó una ceja y estuvo a punto de responder cuando Robert golpeó la mesa. imponiéndose como el alfa de mayor edad ahí presente.
—No vamos a llegar a ningún lugar discutiendo e insultándonos entre nosotros —hablo Robert—, se supone que esta generación, era la generación que lo cambiaría todo por sus fuertes lazos de amistad, pero en este momento es como ver a sus padres matándose entre ellos como antes, como también lo hicieron los alfas anteriores a ellos.
Natsuki se sentó, aunque él y Auguste aún sostenían la mirada de forma amenazante.
—Yo propongo que todos, aun los que están a favor de la supuesta inocencia de la mate del príncipe Bael estemos presentes —acotó Jonny—, los que conozcan mejor a la susodicha nos den su versión de los hechos y los que están en contra también hablen, debemos llegar a un consenso entre todos y después enfrentar a los escuadrones.
—Creo que deberíamos tomarnos cada uno un par de horas y encontrarnos en la residencia de la manada japonesa cuando oscurezca —Nick suspiro mirando a los alfas más jóvenes—, todos estamos alterados y... ¿Alfa Murat está llorando?
Murat se limpió los ojos.
—Es que... es que el alfa Robert dijo que estábamos peleando como nuestros padres y recordé al papá de Auguste matándose a golpes con mi papá después de los juicios de guerra y también recordé como solían nuestros padres decirnos que no habláramos entre nosotros —Murat se limpió la nariz ruidosamente con una servilleta que le dio Isaac—, hace un día estábamos muy felices festejando la fiesta en nombre de Liana y hoy estamos sacándonos los ojos, no quiero que dejemos de ser amigos, hemos pasado muchas cosas, luchamos junto al escuadrón menor para que Deniska sea alfa, sobrevivimos ataques a nuestras manadas, ataques en la escuela, guerras y que Bastian se acostara con Joon, se lo contara a toda la escuela en la fiesta de Deniska y que viva para contarlo. Se supone que somos los mejores amigos y que nos gritemos entre nosotros como si fuéramos extraños me pone muy triste.
Era irónico que el llanto de Murat sacará sonrisas a varios y apaciguará las aguas.
—Nadie va a dejar de ser amigo de nadie —Isaac palmeo la espalda de Murat—, despues de esto, todo volverá a la normalidad, no llores gran tonto. Se necesita más que esto para separarnos.