Gunnar no debía asombrarse, ha estado en grandes ciudades antes. Incluso cuando aún era un joven estudiante que no sabía que existía la magia, viajó a Londres como siempre lo había soñado. Lo que le sorprendió a Gunnar es que existiera una manada tan bonita y grande en medio de la nada.
Era enorme a comparación del pueblo de su manada, se veía mucho más acorde al mundo humano y los miembros de esta manada parecían un poco más civilizados. Esperaba que el alfa Roman aprendiera un poco de cómo se manejaban las cosas aquí, porque dios sabe que su pequeña manada necesita algunos cambios.
Dantalian se agitó un poco y escondió su pequeña cabeza en el cuello de Gunnar, este suspiro y le dio un beso en el cabello.
—No tienes de qué preocuparte pequeño —le dijo Gunnar—, son amigos, nuevos amigos.
—Está muy nervioso desde que despertó —habló Jessy—, tuvo una pesadilla.
Gunnar suspiro, Dantalian seguía muy afectado desde lo de su oso. Tendría que conseguir madera inmediatamente para que Kenai le haga un reemplazo antes de irse.
Los miembros de la manada Black Moon los recibían con amabilidad y alegría. Aunque el lugar era confortable estaban demasiado alejados de la civilización humana, debía ser todo un jubilo ver a personas nuevas.
—Gunnar —Kenai se acercó a ellos—, Roman te quiere presentar ante el alfa de esta manada.
Gunnar resoplo.
—Lo se amigó, pero el alfa quiere conocer al hechicero protagonistas de las proezas que Cameron empezó a contar como un loro —Kenai sonrió en disculpa—, sabes que no hay forma de callar a Cameron.
—No creo que exista un alfa tan parlanchín que Cameron en todo el planeta —Gunnar le entregó a Dantalian a su madre, en contra de la voluntad del pequeño—, estaré de regreso pronto ¿correcto?
Jess asintió mientras Dantalian se quejaba.
—Extraña al señor Toto —Kenai parecía preocupado—, nunca vi a Dan tan triste, empezare a tallarle uno esta noche. El alfa Roman pedirá madera, todos extrañan las travesuras de Dan.
Gunnar caminaba entre las personas de la nueva manada, algunas se le quedaban viendo al percibir por su olfato que él no era un hombre lobo.
Llegaron a lo que parecía el centro de la manada donde había un edificio más grande que los demás. En la entrada estaban Bruce al lado de quien suponía era el alfa de la manada Black Moon.
—¡¿Cómo que le contaste a Clark lo que está pasando?! —Bruce empezó a gritarle a quien Gunnar había supuesto que era el alfa.
—Estaba muy preocupado por ti, sabes lo insistente que puede ser tu hermano Bruce —el sujeto parecía arrepentido—, si no le decía yo, de igual manera se iba a enterar.
Bruce gruño.
—Tengo que llamarle después para que no cometa la locura de venir hasta aquí —hablo Bruce—, ese idiota es capaz de dejar sus estudios por venir a ver si estoy entero.
—De hecho —el supuesto alfa parecía temeroso—, creo que ya está de camino hacia aquí. Ayer me contó que tomaría un avión hacia América lo más pronto posible.
Bruce parecía querer asesinarlo.
—Aquí está Gunnar —hablo Kenai presentándolo.
—¡Hola! —el alfa ignoro a Bruce y se acercó a Gunnar para estrecharle la mano—, soy Inuk, alfa de esta manada, ya conoces a mi beta Bruce. Tu alfa y el alfa Cameron están dentro del edificio donde trabajo. Me han hablado mucho de ti desde que llegaron.
Gunnar respondió el saludo, los alfas se habían adelantado a las manadas en la llegada para poder hablar con el alfa Inuk para autorizar el recibimiento.
—Vamos todos, es un honor tenerlos aquí —Inuk empezó a caminar.
Entraron al edificio y notaron que Bruce parecía muy apagado.
Llegaron a lo que Gunnar identificó como la oficina del alfa, donde estaban Roman y Cameron revisando un mapa desplegado en una mesa.
—¿Llegaron con normalidad? —preguntó Roman—, estaba tan nervioso de dejarlos solos.
—Todos estamos bien Roman —le sonrió Gunnar—, están instalándose ahora.
—No pudimos ir a recibirlos porque estamos intentado trazar las posibles localidades de esa manada invasora —señaló Cameron—, hay rumores de que han atacado al menos dos manadas antes de atacar su manada.
—¿Dos manadas? —Gunnar frunció el ceño—, eso es terrible.
—Es por eso por lo que mande a Bruce averiguar si era todo cierto —hablo Inuk—, me alegra que pudiera encontrarlos y que los trajera. Esta es su manada el tiempo que quieran quedarse. Ahora mismo debemos contactarnos con las manadas "Steel Fangs", "Lunar Fury" y "Wild Blood" para ponerlos sobre aviso y pedir una reunión de manadas para empezar pronto el contraataque antes que se vuelvan muy poderosos.
—Todo tiene que ser lo más rápido posible, mandaré mensajes hoy mismo —hablo Bruce—, no tenemos tiempo que perder.
—Gunnar —Roman lo miro a los ojos—, se que la última vez que usaste tu magia te enfermaste, pero esta vez quisiéramos saber si puedes ayudarnos a localizar a esta manada invasora.
—No necesitamos que los ataques ni nada por el estilo —Cameron señaló el mapa—, solo queremos saber su progreso y si están cerca de aquí. En caso de un ataque, preparar otra evacuación a tiempo.
—Sin extralimitarse otra vez —hablo Bruce—, solo queremos que seas como un especie de centinela.
Gunnar miro al mapa evitando la mirada de los alfas. Se suponía que no se interferiría más, que él en pocas semanas se iría para siempre junto a Jess y Dantalian. Sin embargo, aún no encontraba un lugar para esconderse y detectar esa manada sería la excusa perfecta para desaparecer sin levantar sospecha.
—Lo haré —acepto Gunnar.
***
—Esto está mucho más ostentoso que el nombramiento de mi Bastian —dijo Luke sonriéndole a Hiro—, los coreanos son unos presumidos.
—Lo dice quien hizo el nombramiento de su hijo en un altar a lado de la playa —el alfa Hiro se interrumpió para toser—, con un camino de caracolas de oro para llegar ahí.
—Estoy seguro de que uno de los amigos de Bastian, el que es cantinero, se robó algunas caracolas —gruñó Luke.
—¿Qué no podríamos tomarlas de recuerdo? —pregunto Hiro—, yo tengo dos en mi cuarto.
Luke lo fulminó con la mirada, pero siguió ayudándole a empujar su silla de ruedas. El alfa Hiro ya pasó la edad donde su lobo empezaba a envejecer, acelerado por lo mucho que sufrió. Hiro ya no podía caminar solo y las enfermedades lo acechaban. Natsuki lo mantenía vivo por las pócimas curativas que Dylan preparaba especialmente para él.
—Abuelo —Natsuki se acercó a él, ya vistiendo su uniforme de gala de su manada—, realmente no tenías que venir.
—Joon es un buen chico, no me iba perder su nombramiento —dijo Hiro restándole importancia con un manotazo al aire.
—Alfa Luke —Natsuki hizo una pequeña reverencia.
—Ya no soy Alfa mocoso —sonrió Luke buscando a su hijo con la mirada—. ¿Dónde está mi gran alfa?
—Bastian está con Joon —explicó Natsuki—, Joon está algo nervioso porque no llegan Estefan con su familia.
Luke y Hiro fruncieron el ceño.
—Kerim dijo que Estefan lo recogería, por eso no quiso venir conmigo —Luke chasqueo malhumorado—, yo odio esos viajes mágicos, ¿habrá pasado algo en el Reino?
—Sería raro si algo no pasara —se quejó Hiro—, siempre están ocupados.
Los dos anteriores alfas se colocaron en sus sitios respectivos, los miembros de la manada coreana los miraba con asombro, sabían que el futuro alfa era visitado por los grandes alfas principales, pero era la primera vez que veían a uno en realidad.
Natsuki encontraba algo exasperante que la gente agachara la mirada o no quisiran hablarle, los miembros de su manada eran respetuosos, pero ahí lo llevaban al extremo.
El único que lo disfrutaba era Auguste que iba por ahí dándose de aires de suficiencia, solo le faltaba ponerse un cartel en la cabeza que dijera "Soy el alfa de Francia plebeyos"
—Al fin alguien que conocemos llega —se encontró con Auguste que tomaba champán—, todos están retrasados.
—Deben estar esperando a Estefan —Natsuki ya empezaba a ponerse nervioso—, ¿A ti también te llamo Deniska?
—20 llamadas perdidas de ella —Auguste alzó su celular—, esta histérica, Bael le prometió traerla primero para hacer su gran entrada.
Como si hubiera sido convocada, un brillo destellante alumbró la entrada. Pudieron ver a Bael y Deniska apareciendo, Bael desapareció antes de que llegaran a ella.
—Por la diosa luna —Deniska le quitó la copa a Auguste y tomó de ésta—, una hora de retraso, los coreanos deben estar botando espuma por la boca, se supone que son estrictos con los horarios.
Natsuki y Auguste la saludaron cariñosamente, no la veían desde el nombramiento de Bastian y de eso ya había pasado un año.
Después apareció Kerim, Bael no se dignó a hablar de nuevo.
Natsuki miró hacia atrás, todos los miembros de la manada estaban estupefactos. Posiblemente veían por primera vez la teletransportación de los semidemonios.
Kerim los saludo, Natsuki le explicó dónde estaba su esposo.
—Bael estaba de muy mal humor —explicó Kerim—, creo que Gabriela estaba haciendo todo un alboroto porque no la dejaron venir o eso entendí.
—¿Por qué Gabriela no puede venir? —preguntó Deniska.
—¿Aún no lo sabes ? —Auguste sonrió—. Está embarazada.
—¡¿Qué?! —Deniska abrió mucho la boca—, o por la diosa ¡Al fin podre ver a Gabriela gorda! ¡Mis súplicas han sido escuchadas!
Aparecieron Murat, Isaac, Rossmery la hija del anterior alfa Matthew, hasta Dorniar y Chad se hicieron presentes.
Johnny apareció sonriéndoles con indulgencia, después apareció Nick.
—¿Qué vamos a hacer Johnny? —Nick le palmeó la espalda—, seremos los únicos viejos a lado de toda esta generación de nuevos alfas.
—Bueno, a mí solo me quedan unos años más —Johnny se encogió de hombros—, mi sobrino cumple la mayoría de edad pronto, en unos años estará tomando mi lugar.
—Demonios, mi hijo recién va a cumplir diez —se quejó Nick—. ¿Qué estamos esperando?
—Deberíamos tomar nuestros lugares —hablo Natsuki—, solo falta la familia real.
—Oh, a esos les gusta hacer grandes entradas —se burló Johnny—, ¿Solo vienen los menores?
—No pueden dejar el Reino toda la familia a la vez, así que mandaran al escuadrón menor —explicó Auguste.
—Me hubiera gustado meterme unos tragos con Oliver —se enfurruñó Johnny—. Oh gracias a la diosa luna Luke está aquí.
Jonny y Nick se acercaron a Luke e Hiro con alegría.
Entonces un brillo más singular y estremecedor retumbo en la estancia.
Liam, Theo, Leia, Estefan y Bael hicieron acto de presencia.
Muchos grititos de sorpresa y emoción resonaron, la manada estaba agitada ya que muchos veían por primera vez a Liam.
Este empezó a caminar con Leia colgando de un brazo en dirección de sus amigos cuando toda la manada de Joon se agachó en el acto de hacer reverencias muy extremas en su presencia.
Liam se sonrojó notablemente lleno de vergüenza.
—Te lo advertí —gruño Estefan—, por esto nunca salgo de la residencia.
Incluso un hombre muy mayor empezó a llorar. Emocionado por tener al príncipe heredero en su presencia. Liam se acercó preocupado tocando las manos de aquel anciano. Este rompió en más llanto.
—Mírenlo dándose un baño de popularidad —habló Deniska—, el poder se le subió a la cabeza.
—Le encanta la atención —siguió Isaac.
—Todos los Moore son así —resoplo Auguste—, unos exhibicionistas.
—Ese sonrojo es falso —Murat entrecerró los ojos—, es un buen actor.
—Desde la escuela era así —asintió Dorniar—, se pavoneaba para que todas las chicas lo vieran.
—¿Se supone que ustedes son los mejores amigos de Liam? —Kerim negó con la cabeza—. Pobre Liam.
—Cuando tu novia de la escuela te confiesa que salió contigo porque eres el amigo del príncipe heredero y quería acercarse a él, tienes todo el derecho de tomarle el pelo cuando quieras —se defendió Chad.
Vieron cómo Estefan arrastraba a Liam para que no se detuviera a abrazar a cada persona que estaba llorando, porque la mitad de la manada de Joon estaba llorando y eso nunca terminaría.
Leia los abrazo a todos entusiasmada, Bael tenía cara de "no me toquen" que no sirvió para nada en Deniska que le plantó un beso en la mejilla solo para fastidiarlo, Theo tan amable y alegre como siempre.
Estefan preguntó por su esposo y salió corriendo detrás de él cuando le indicaron donde estaba.
—Estoy muriendo de hambre —se quejó Deniska echándose aire con un abanico—, espero que no hagan una ceremonia ridícula como bañarlo en el mar como la tontería de Bastian.
—A ti te hicieron una ceremonia militar que duró tres horas —replicó Kerim.
—Soy rusa cariño, tenía que haber militares —replicó Deniska—, al menos no me hicieron pelear con un oso como a mi papá.
—Eso me hubiera encantado ver —se burló Auguste, el alfa francés miro al alfa inglés—, ¿Dónde está la hermosa "fresa"?
—Di una sola broma sobre su nombre —Isaac lo miro amenazadoramente—, y te cortaré el cuello.
—Ni siquiera como alfas maduran —gruño Bael.
—Está embarazada —dijo Isaac de pronto cuando pasaron algunos segundos de silencio—, está en reposo en estos momentos, por eso no pudo venir.
—¡Felicidades! —Liam se acercó a abrazarlo—, estoy tan contento por ti.
—Por el amor a la diosa luna Liam —Bael miró impaciente a su primo—, el futuro Rey no puede llorar cada vez que alguien le dice que van a tener hijos.
—Es que es... —Liam ya estaba lagrimeando un poco—, es una noticia muy hermosa.
Los sonidos de tambores resonaron y señoras con trajes folclóricos con pequeños tambores aparecieron bailando. Un hombre que parecía un chamán o algo parecido se puso en medio del escenario empezando a dar un cántico en coreano.
—Si, definitivamente esto tomará su tiempo —siguió quejándose Deniska.