—No es que quiera ser entrometido —dice Cameron.
—Pero igual vas a hacerlo —replica Bruce.
—¿Dantalian no es hijo de Gunnar cierto? —insistió el alfa Cameron ignorando a Bruce.
Jess miró a otro lado algo avergonzada, mientras Bruce y Roman reprendían a Cameron. El padre de Roman siempre fue amable, pero era un alfa muy serio al igual que su beta. Para Jess era algo chocante ver a Cameron y Roman, que eran alfas muy jóvenes, ser tan joviales y graciosos. Bruce era más serio que los dos, pero solo llevaba unos años más que ellos.
Desde que Gunnar cayó enfermo, o lo que sea que le sucediera, los dos alfas y el beta habían procurado cuidar mucho a Jess y Dantalian. No quisieron darle una explicación sobre qué le pasó exactamente a Gunnar, pero ella estaba segura de que habían hecho usar demasiada magia a Gunnar y se sentían culpables al respecto.
En el único en el que confiaba realmente era en Kenai, así que estuvo más pegada a él que a los demás. Ayudaba que Dantalian se llevará de maravillas con su amigo.
—No lo es —dijo Jess mirando a los alfas que dejaron de discutir—, pero realmente no deseo hablar de eso.
Realmente no le hubiera gustado darles esa información, pero no podía negar lo obvio.
—Lo siento —Cameron parecía avergonzado—, es que soy muy entrometido y note que él pequeño no se refiere a Gunnar como su papá, sin embargo, el niño huele a magia.
Jess lo miró confundida.
—¿Ah magia? —preguntó Jess—. ¿De verdad?
—Tal vez sea porque vive con Gunnar —dedujo Roman intentando no ahondar en el tema—, es normal que a Dantalian se le pegue el aroma.
—No —Cameron negó con la cabeza—, es algo más, no huele a la magia de Gunnar, es otro tipo de magia, pero realmente nunca he olido algo así.
—Es leve —Bruce intentó calmar a Jess, que parecía consternada por lo que decían—, es muy leve, pero Cameron tiene razón, hay algo de una especie de magia en tu hijo.
—¿Cómo no me he dado cuenta? —Jess miro a todos lados buscando a Dantalian.
—Porque estás tan familiarizada con su olor que no percibes lo diferente —Roman la miro algo triste—, y bueno... ya sabes.
Jess escuchó la voz de Roman en su cabeza.
"No podrías recordar a qué huele Dantalian"
—Ya que faltan menos de una hora para que oscurezca, los delegados preguntan si pueden organizarse para pasar la noche aquí —preguntó Kenai llegando a ellos.
Los alfas asintieron.
—¿Has visto a Dantalian? —preguntó Jess.
—Está jugando con unos niños más abajo —Kenai noto que Jess estaba algo nerviosa—, ven, te llevaré con él.
Se alejaron de los tres hombres y se adentraron entre las personas que estaban empezando a organizarse para pasar la noche en ese lugar.
—¿Se pusieron a gruñir entre ellos cuando estabas presente? —bromeó Kenai—, los tres tienen naturaleza alfa, aunque Bruce sea beta, es normal que entre los tres choquen.
—No es eso —Jess le dio una sonrisa falsa para calmarlo—. ¿Sabías que Dan tiene un olor mágico?
Kenai frunció el ceño.
—¿No es el olor de Gunnar? —preguntó Kenai confundido.
—Eso es lo que yo pensaba —Jess miró de reojo hacia atrás—, pero ellos creen que es otro olor.
Kenai sabía que los alfas tenían sus sentidos mucho más fuertes que los hombres lobos normales, pero no quería alterar más a Jess. Aunque probablemente ellos no se estuvieran equivocando.
—Ellos no están acostumbrados a la magia que irradia Gunnar —dijo Kenai—, esta es cambiante y caótica, el olor y la sensación cambia, como cuando hizo aparecer a las bestias. Seguramente puso un hechizo de protección sobre Dantalian y ellos no saben eso.
Jess asintió más alegre.
—Es cierto, Gunnar siempre me decía que protegía a Dantalian con su magia —Jess recordó cuando les hizo el hechizo para que el padre de su hijo no los rastreará—, debe ser lo que los alfas perciben.
—¡Ahí está Dan! —señaló Kenai.
Jess vio a Dantalian enseñando al señor Toto a los niños de la manada de Cameron. Siendo el centro de atención de los niños.
A veces sentía que las locuras de su amiga Wasilla no eran locuras, Dantalian se veía como un pequeño hijo de un alfa.
—¡Dantalian! —lo llamo.
—¡Mami! —Dantalian le sonrió con grandeza.
Se despidió rápidamente de sus nuevos amigos y corrió hacia Jess.
—¿Te has divertido mucho? —preguntó Jess.
—Si —Dantalian de pronto dejó de sonreír—. ¿Vamos a ver si mi tío Gunnar dejo de cargar energía?
Jess evitó que la punzada de dolor se mostrará en su rostro.
Camino cargando a su hijo con Kenai cuidando su retaguardia. Le rezaría fervientemente esa noche a la diosa luna para que Gunnar despertara, no sabía que sería de ella si no lo hacía. No solo porque de él dependía su seguridad, también porque era su mejor amigo y lo único real que tenía después de Dantalian.
Llegaron a la carroza donde Gunnar era transportado por sus bestias. Dantalian saludo a "Frufru", su bestia favorita, esta soltó una especie de sonido parecido a los elefantes al ver a Dantalian. Parecía que el cariño era recíproco.
A Jess le daban un miedo terrible, aunque no sabía por qué.
Entraron a la carroza con cuidado, pero saltaron asustados cuando alguien les gritó.
—¡Sorpresa! —Gunnar alzó los brazos emocionado—. ¡Estoy vivo!
Dantalian fue el primero en reaccionar, soltó un grito y se lanzó a Gunnar en un abrazo abrumador.
Gunnar lo sujetó con fuerza mientras Dantalian lloraba descontroladamente en el pecho de su tío favorito.
—Soy tu único tío —se quejó Gunnar llorando de igual manera—, eso es trampa.
Gunnar la miró y Jess se dio cuenta que ella misma también se rompía en llanto.
Se acercó a ellos y los tres formaron un gran abrazo lleno de muchas lágrimas.
—Eres un... —Jess se limpiaba las lágrimas—, eres un tonto.
—Ya se —Gunnar le daba a Jess un beso en la mejilla para después darle un beso en la frente a Dantalian—, lo siento, les prometo que esta es la última vez que duermo tanto.
—Tío no te descargues tanto otra vez —dijo Dantalian ya más calmado—, creí que cargaría para siempre.
Gunnar apapacho un poco más a Dantalian.
—Voy a intentar no sobrepasarme nunca más —dijo mirándolos sonriente—, debo estar siempre activo para cuidarlos.
Gunnar le explico de una manera inocente a Dantalian cómo funcionaba su magia y que, si alguna vez se vuelve a dormir tanto, solo deben dejarlo debajo de un tronco para que se recupere.
Los tres se rieron después de un rato y ellos le empezaron a contar todo lo que habían vivido desde que partieron de la manada de Cameron, todo lo que Jess había escuchado de los alfas y los nuevos amigos que había hecho Dantalian.
—Hola —Kenai se asomó después de bastante tiempo dentro de la carroza—, ¿Cómo van?
—Poniéndonos al día —sonrió Gunnar.
—¿Por qué no me contaste que despertó? —Jess le preguntó a Kenai.
—Me prometió guardar el secreto para darles ¡Una gran sorpresa! —Gunnar empezó a hacerle cosquillas a Dantalian.
El niño soltó una gran carcajada.
—Deberíamos ir a avisarles a los alfas que despertaste —dijo Kenai contento—, ellos no han estado tranquilos.
—Si —Gunnar se puso más serio—, tengo que hablar con ellos también.
Cuando intentaron salir Dantalian los detuvo.
—Voy a acostar al señor Toto —dijo Dantalian—, ¿Podrían esperar afuera mientras le doy las buenas noches?
—Estaremos esperando afuera —sonrió Jess—, no te demores mucho Osito.
Los tres adultos salieron dejando a Dantalian solo con su oso de madera.
Dantalian acostó a su oso, lo tapó con mantas y le dio un beso en la cabeza.
—Duerme bien señor Toto —dijo Dantalian susurrando.
Después se arrodilló, cerró los ojos con fuerza y juntó las palmas. Se concentró tanto que probablemente le dolería la cabeza después, pero su mamá le había dicho que al hablar con la diosa luna debía concentrarse con todo su ser para ser escuchado.
—Gracias, gracias, gracias por cargar a mi tío —dijo Dantalian susurrando muy bajito—, gracias por despertarlo para que mi mamá dejara de llorar, gracias por cuidar a mi familia, te quiero mucho diosa luna.
Dantalian terminó de rezar y se levantó corriendo para ir con su mamá y su tío.
***
Se movía de un lado a otro siguiendo el sonido de la música que le llegaba gracias a los enormes audífonos que colgaban de sus orejas.
Liana fruncía el ceño intentando resolver un ejercicio de álgebra, Angel también hacía su tarea y Junior arrugaba un papel ofuscado porque las cosas no estaban saliendo como quería.
Belial dio una vuelta y se acercó bailando hacia ellos. Sabía que se veía ridículo bailando sin música para ellos. Sin embargo, no le importaba, había pasado una etapa fea de depresión porque su novia lo dejó, pero ahora estaba feliz porque consiguió otra.
La canción "Lest Grovee" de su grupo favorito "Earth, Wind & Fire" resonaba y Belial se puso a bailarle a Liana.
—¿Y a ti qué te pasa? —Liana lo miro con cara de aburrimiento—, déjate de payasadas, tenemos tarea que hacer.
Belial puso la canción en el altavoz y arrojó sus audífonos.
Angel y Junior empezaron a moverse con la movediza canción.
Belial arrastró a Liana para que bailara con ella. Junior y Angel soltaron carcajadas cuando Belial intento hacerle una especia de baile erótico causando la cara de asco de Liana. Angel y Junior se unieron a Belial y empezaron a bailarle a Liana.
El joven demonio se había dado cuenta que Liana estuvo más callada y apagada de lo normal desde el cumpleaños de Gabriela, así que necesitaba sacar algunas sonrisas.
—¡Ustedes son imposibles! —exclamó Liana entre los tres bailarines.
Timothee apareció en la sala de su casa mirando el raro acto, se encogió de hombros y se unió al baile.
Liana soltó un suspiro mosqueada al ver a su hermano unirse a la payasada de los tres idiotas.
—¡Vamos mujer! —Junior se sacudía ridículamente—. ¡Suelta los huesos!
Angel le dio una vuelta a Liana y está al fin soltó una pequeña sonrisa, derrotada por sus bailes extravagantes.
—Animo hermana —Timothee sacudió la cabeza como poseído—. ¡Los Dickens también sabemos movernos!
Belial empezó a saltar feliz mientras vio que Jaime entraba a la sala para ver que era todo ese alboroto. Junior salía disparado para tomar a su tío Jaime y arrastrarlo a bailar.
Jaime tenía la misma cara de asco que había tenido Liana al comienzo.
El demonio tuvo una idea y puso una de las canciones que a Liana le fascinaba. La canción era la que sus padres habían bailado en su boda como primer baile de esposos y cuando era niña ponía el video de la boda una y otra vez imitándolos.
Puso "Ain't No Mountain High Enough" a todo volumen y vio como el rostro de Liana se iluminó por completo. Tomó de sorpresa a su papá para que bailara con ella. Si había algo que podía aplacar el frío carácter de su tío Jaime, era una sonrisa de Liana.
Los dos empezaron a bailar dando vueltas, los demás gritaban y bailaban a su alrededor. Junior tomó a Angel y empezó a bailar con él y Belial hizo lo mismo con Timothee.
Belial le daba vueltas con rapidez a Timothee mientras este se partía de la risa, a diferencia de su hermana y padre. Timothee tenía un carácter más dulce y amable, Belial sintió un hormigueo en el estómago al ver los ojos azules mirándolo con tanta alegría. Una cosa rara, pero cálida se abrió en su pecho mientras sostenía a Timothee en sus brazos.
No obstante, ese sentir agradable fue opacado por un dolor rápido y punzante, como si una bala le atravesara la cabeza, Belial cayó al suelo súbitamente después de unos segundos. Cerró los ojos y se tapó la cara para detener el dolor mientras escuchaba a Timothee hablarle totalmente aterrado.
Algo cambió y de pronto sintió mucho frío, los gritos cesaron y parecía que estaba todo oscurecido.
Abrió los ojos y noto que ya no estaba en la sala de la casa de Liana, ahora parecía estar en un lugar pequeño y apretujado. Un viento helado lo sacudió, mientras miraba las paredes feas de madera.
"Gracias, gracias, gracias por cargar a mi tío"
Belial se paró inmediatamente al escuchar aquella voz infantil hablar de la nada
"Gracias por despertarlo para que mi mamá dejara de llorar, gracias por cuidar a mi familia, te quiero mucho diosa luna"
Todo el cuerpo de Belial se puso rígido y empezó a buscar de dónde salía aquella voz de niño. Entonces retrocedió soltando un grito cuando noto que un muñeco raro apareció en la habitación. Intentó calmar su respiración al ver que era un objeto inanimado, se acercó lentamente para observarlo mejor a aquel muñeco de madera.
Era un oso algo grande y tétrico, Belial estiró su mano justo cuando los ojos del muñeco se abrieron mostrándole unos ojos rojos y amenazantes.
—¡Ah!
—Belial cálmate —Jaime lo tenía sujeto de los hombros—, parece que has tenido alguna pesadilla o visión.
—Oso...oso —Belial parecía que se desmayaría otra vez—. Oso...
—Sigues repitiendo eso —Junior apareció detrás de su tío Jaime, totalmente preocupado—, no has dejado de gritar llamando a un oso.
—Ya llamé a mi tío Alan —dijo Liana—, está en camino.
—Hermano —Angel le limpió la frente con un paño húmedo—, ya estás bien Belial, solo ha sido otra de tus tontas visiones.
—¿Tiene otras? —escucho la voz entrecortada de Timothee—. ¿Se pone mal así siempre?
—¿Recuerdas algo? —Jaime lo miraba inquisidoramente—. ¿Has tenido una visión de tu vida pasada?
Belial no respondió, solo se quedó petrificado recordando aquel juguete de madera.