—¡Nos están persiguiendo! —Taylor intentaba disparar su ballesta con una mano—. ¡Déjame luchar para enseñarles a quien carajos se atreven a disparar!
—¡Están disparando a todos lados para llegar a la meta impulsiva de mierda! —Steve luchaba con Taylor para que esta no dejara de correr—. ¡Estaremos a salvo al final!
Taylor sabía que Steve tenía razón, ella no estaba ahí para matar a otros cazadores, se supone que estaba ahí para pasar las pruebas.
Llegaron a la meta donde había algunos cazadores mayores esperándolos con bebidas y ayuda médica. Taylor y Steve fueron los primeros en llegar.
—¡Felicidades! —dijo una cazadora con voz chillona—. ¡Son los ganadores de la primera prueba!
Steve se dejó derrumbar muy agitado, Taylor hizo lo mismo.
Llegaron a ellos con bebidas y revisando su estado de salud, poco después llegaron más concursantes mucho más masacrados que ellos.
—Te lo dije —Steve señaló a uno que llegó cojeando—, quedarnos al fuego cruzado hubiera sido una posible descalificación o incluso perder la vida.
Taylor suspiro.
—¡¿Por qué lo hiciste?! —el enorme pupilo de la amiga de Gerard, el tal Raimi traía cargando a dos cazadores a cada hombro—. ¡¿Por qué empezaste la pelea?!
—¿Disculpa? —Taylor se levantó inmediatamente a la defensiva.
—Es demasiado despreciable empezar algo así para que nos matemos entre nosotros y después huir como una sabandija —dijo Raimi poniendo a los cazadores desmayados en el suelo—. ¿Acaso no te han enseñado el código de honor? ¡Estamos aquí para demostrar de lo que somos capaces, no para matarnos entre nosotros!
—¡Oye enorme troll de las montañas! —Taylor se alzó como el fuego señalándole con el dedo a Raimi—, la perra a la que ataqué mató al que estaba a la delantera por la espalda y antes de eso me atacó sin motivos ¡Yo no empecé esta mierda!
—¡Debiste esperar a llegar a la meta para denunciarla! —exclamó Raimi mirándola con odio—. ¡No tomar venganza poniendo a los demás en peligro!, ahora que todos atacaron no se podrán descalificar a nadie por los que murieron estúpida.
¿Se podía denunciar? , pensó Taylor enojada, mataría a Gerard por no explicarle aquello.
—¡Yo no tengo la culpa de que estos idiotas empezaran a atacarse unos a otros! —Taylor estaba demasiado enojada para tomar mea culpa—. ¡Esa perra recibió su merecido por jugar chueco!
—¡Esto no es una manada de los hombres lobos donde matan a su antojo! —Taylor abrió mucho la boca ofendida por lo que estaba diciendo Raimi—. ¡No era tu decisión decidir si vivía o no!
Taylor sacó su látigo mágico que brillaba al rojo vivo como su cabello y su rostro. Raimi sacó la espada que cargaba en la espalda.
—¡Ya basta! —Steve se metió en medio de los dos—. ¡Estamos en zona neutral!
—Sepárense ahora mismo —dijo uno de los cazadores mayores—. O serán descalificados inmediatamente.
Taylor y Raimi fueron separados, pero aún se lanzaban dagas asesinas por los ojos.
—Me había olvidado lo impulsiva y busca pleitos que eres —se quejó Steve—, uno creería que madurarías con el tiempo.
—Si dices otra palabra te mataré —gruñó Taylor—, maldita sea, se supone que no me metería en problemas.
—Esto fue demasiado estúpido Taylor, sabes que están buscando tener motivos para boicotearte —sigue Steve.
—Lo sé, lo sé —respondo Taylor—, solo es que hace tiempo no estoy en una competición, normalmente luchó con enemigos reales y no tengo que estar pensando si es ético o no atravesarlos con mis flechas.
Steve solo negó con la cabeza, pero no dijo nada.
—Casi puedo escuchar a Gerard insultándome —siguió Taylor—, más que nada por dejar que otros vieran lo que hice.
—Ya olvídalo, descansemos un rato hasta que nos pongan sobre aviso de la siguiente faceta —dijo Steve.
Los dos se sentaron lejos de los demás, hidratándose y masticando algunas barras de comida energética que había a la mano.
Muchos de los concursantes estaban heridos y estaban siendo atendidos. Les llevó algunas horas decidir quienes estaban listos para seguir y quienes no.
Taylor dedujo que sería al anochecer cuando empezaría la segunda prueba y no se equivocó. Los organizadores los llamaron al final cuando el sol empezaba a ocultarse.
—Acérquense por favor —dijo uno de los organizadores—, como ya saben, la carrera fue una introducción de La Cacería de la Plata Eterna, un desafío de limpieza como le decimos nosotros. Creemos que, para empezar las tres facetas de la prueba, deben primero demostrar la agilidad y el físico que tienen. De los 38 participantes, solo 15 lo han logrado en su totalidad. De los otros 23, han sido 6 muertos y 17 heridos.
Taylor alzó una ceja, no pensó que hubiera tantos muertos cuando ni siquiera empezaban las verdaderas pruebas. Y le dolió un poco la cabeza al pensar que contribuyó con una.
Aunque se mantenía firme de que esa perra se lo merecía.
—Es una suerte que el número de concursantes que queden sea 15, porque vamos a necesitar que se dividan en 5 equipos de tres antes de explicarles de qué va la primera prueba —hablo el organizador—, tienen 10 minutos para organizarse.
Taylor miro a Steve.
—No creo que nadie quiera hacer equipo contigo —la empujo sin fuerza y sonriendo—, así que me quedaré contigo por los viejos tiempos.
—Te hubiera disparado si no lo hacías.
Steve le saco la lengua.
—Me parece estúpido intentar hablar con alguien porque ya me odian —Taylor se encogió de hombros—, esperemos que el más débil venga a nosotros.
Estuvieron equivocados porque inmediatamente una chica se acercó a ellos. Una mujer joven de rasgos asiáticos se acercó apartándose de los demás con rapidez. Taylor sonrió al ver las dos katanas colgando de su espalda, le hizo recordar a Natsuki.
Se paró enfrente de ellos e hizo una reverencia.
—Mi nombre es Aiko Sato, pertenezco a la villa "Kamiken Sato" de Japón y quisiera que me concedieran el honor de pertenecer a su equipo —habló Aiko con mucha ceremonia.
Taylor se cruzó de brazos al ver a alguien que no parecía repudiarla.
—¿Por qué deseas unirte a nosotros? —preguntó Steve.
Aiko miró a Taylor y se dirigió a ella.
—Lo que hiciste al subirte a las rocas gigantes en vez de intentar escapar de ellas fue brillante, aunque se me hubiera ocurrido, no creo que fuera capaz de hacerlo —dijo solemnemente—, yo también vi cuando esa cazadora le dio por la espalda al que tomaba la delantera, ella misma cavó su tumba al cometer tal acto de deshonor.
Taylor sonrió satisfecha y miró con aires de autosuficiencia a Steve.
Este resoplo.
—Bien, estás dentro —dijo Steve—, tampoco creo que otro quiera unirse a nosotros.
Aiko asintió sonriendo tímidamente.
—¡¿A qué hora empezaremos?! —gruño Taylor.
Cuando se dio cuenta que gruño se sonrojo, estuvo tanto tiempo alrededor de hombres lobos que había adoptado algunas costumbres.
—No sé qué es lo que me preocupa más —se quejó Steve—, que te comportes como perro o el hecho de que has perdido totalmente el sentido de autoconservación, vas por ahí como si fueras invencible y de hierro.
Taylor tenía que darle la razón, Gerard también se lo había dicho. Pero ella no tenía la culpa de que por 6 años había andado con seres tan poderosos que cosas como estas le parecían un juego. Aiko y Steve estuvieron sorprendidos por lo de las rocas y posiblemente había tenido muchos puntos por hacerlo. Sin embargo, una vez el señor Alan le lanzó lava hirviente, Estefan le lanzó una montaña literalmente, todo en medio de una horrible tormenta eléctrica que parecía viva y concentrada en asesinarla, Gabriela la lanzó al infierno o lo que sea que tengan sus cráteres y Bael hizo que bolas de fuego que parecían meteoritos cayeran sobre ella mientras esquivaba a sus jinetes de la muerte. Agreguen a eso que el mejor amigo y la hermana de tu novio podían curarte cualquier cosa en segundos.
Uno se podía creer invencible después de eso. También estuvo mucho tiempo sin estar entre humanos, solo salía del Reino para visitar a su mamá o por misiones. Estaba algo oxidada en comportarse como una persona normal.
No pudo evitar pensar en Theo y lo mucho que ya lo extrañaba.
También extrañaba a sus amigos, casi podía imaginar a Estefan asfixiando a Raimi, mientras Gabriela abría un cráter para lanzarlo ahí para que después Bael le atravesara su lanza antes de desaparecer el cuerpo. Todo al mismo tiempo que Liam y Theo intentan detenerlos mientras Leia, Odette y Noel se quedan con la boca abierta por tal manejo de violencia.
Todos estos cazadores la pensarían dos veces antes de mirarla mal otra vez.
—¡O por la diosa luna! —Taylor puso cara de pánico—. ¡Estos hijos de puta se metieron debajo de mi piel!
—¿Acabas de jurar en nombre de la diosa de los lobos? —preguntó Steve crispado.
—¡Acérquense por favor! —habló el organizador—, ya veo que los grupos están formados, así que voy a dar las instrucciones de la primera prueba.
Se acercaron a los organizadores que estaban parados observándolos, Taylor aún estaba intentando recuperarse del hecho de que gruñía y maldecía como un hombre lobo.
—La Cacería de la Plata Eterna de este año se llama: "La Búsqueda del Artefacto Perdido: Los Secretos del Desierto"
Los organizadores aplaudieron y los concursantes los imitaron por obligación, muchos seguían molidos por la carrera.
—La primera fase de la cacería es: Descifrando los Antiguos Acertijos —siguió el organizador principal—. Su primera tarea es resolver una serie de acertijos antiguos algunos escritos en idiomas muertos o runas, inscritos en las paredes de una antigua ruina. Estos acertijos actúan como una prueba de su inteligencia y conocimientos sobre criaturas mágicas. Para superar esta etapa, ustedes deben utilizar su experiencia y conocimientos sobre las criaturas mágicas para descifrar los acertijos, que contienen pistas sobre la ubicación del artefacto. Los acertijos pueden requerir conocimientos sobre la historia de las criaturas mágicas, sus debilidades o habilidades únicas.
Otra ola de aplausos, Taylor pensó en todas las clases de runas que sabía.
—Estamos al pie de esta imponente y enorme montaña, por la cual deberán acceder a una de las cinco diferentes entradas, uno para cada equipo —explicó el organizador—, estas entradas acceden a las ruinas de lo que antes fue una civilización que vivía al interior de esta montaña. Al comienzo en las paredes podrán encontrar los acertijos que les ayudarán a pasar a la fase dos. Una vez que el cazador resuelve todos los acertijos, se revela la ubicación general del artefacto que buscarán y se le otorga acceso a la siguiente fase de la prueba. Recuerden, solo un acertijo es el correcto, depende de ustedes descubrir cual es, en caso escojan uno equivocado, probablemente se pierdan en el camino.
Steve se removió nervioso a su lado.
—La fase dos es fácil de deducir, se llama: "Superar las trampas mortales" —sonrió el organizador al silencio absoluto de los cazadores concursantes—. Se adentrarán en un laberinto subterráneo oculto dentro de esta montaña. Este laberinto está lleno de trampas mortales diseñadas para poner a prueba la habilidad del cazador en la evasión y la resolución de problemas en situaciones peligrosas. Para superar esta etapa, los cazadores deben usar su astucia y agilidad para evitar las trampas y avanzar hacia el centro del laberinto, donde se encuentra el artefacto. Además de las trampas físicas, el equipo también debe estar atento a las criaturas mágicas guardianas que acechan en el laberinto. Estas criaturas son leales al artefacto y harán todo lo posible por protegerlo. Los cazadores deben enfrentarse a ellos, utilizando su experiencia en combate y sus habilidades mágicas o armamentísticas.
—O por favor díganme que la fase final es un ser terrible y casi imposible de derrotar —Taylor no pudo contener su emoción—, no saben cómo me encantan esos.
Steve le dio un pisotón para que se callara. Raimi bufo en su dirección y Taylor le saco el dedo medio.
El organizador principal asintió con el mismo entusiasmo que Taylor.
—La tercera fase se llama: "El Enfrentamiento con el Guardián Mágico" —el organizador alzó los puños triunfante—. En el corazón del laberinto, los cazadores se encuentran cara a cara con el guardián mágico del artefacto perdido. Este poderoso ser mágico tomará la forma del acertijo correcto, representa el último desafío del cazador.
>>El guardián mágico solo permitirá que el cazador se lleve el artefacto si demuestra ser digno. Para ello, el cazador debe mostrar no solo su habilidad en el combate, sino también su comprensión de las criaturas mágicas y su capacidad para utilizar el artefacto de manera responsable.
Los organizadores y Taylor fueron los únicos en aplaudir esta vez.
El organizador miró a Taylor y a su grupo.
—Ya que fuiste la primera al llegar junto a tu compañero de equipo, ustedes tendrán una ventaja de 30 minutos sobre los demás —dijo el hombre ignorando los bufidos de los demás cazadores.