Hawaii Five-0

By abby_julyd

120K 5.3K 2K

Five-0 es una pequeña unidad especial de la policía estatal creada por la gobernadora de Hawaii para investig... More

Bienvenido, tengo algo que decirte:
Hawaii Five-0
Capitulo. 1 Aloha (Hola)
Capitulo. 2 El chiste del dia
Capitulo.3 Mea Makamae
Capitulo. 4 Limpio
Capitulo. 5 Ka Iwi Kapu
Capitulo.6
Capitulo.7
Capitulo.8 Del pasado al presente
Capitulo. 9 ki'ilua
Capitulo 10. Desiciones Extremas
Capitulo 11. Pahele
Capitulo 12. La Soluciòn
9/11 Teniente Diane Brighton #NeverForget
Capitulo 13. Mai ka wa kahiko
Capitulo 14. El calculo
Capitulo 15. Cabo Sueltos
Capitulo 15. Cabos sueltos Parte II
Capitulo 16. Uku
Capitulo 17.Kalele
Capitulo 18 Venticuatro Horas (Parte I)
Capitulo 18 Venticuatro Horas (Parte II)
Capitulo 18 Venticuatro Horas (Parte III)
Capitulo 19 Reencuentros (Parte I)
Capitulo. 19 Reencuentros (Parte II)
Capitulo 20 Ua hala
Capitulo 21. Deuda saldada
Capitulo 22. Pāheona Pō (Parte I)
Capitulo 22.Pahēona Pō (Parte II)
Capitulo 23. Ke huli (Parte I)
Capitulo 23. Ke huli (Parte II)
Capitulo 23. Ke huli (Parte III)
Capitulo 24. Punipuni Hou
Capitulo 25. Hana I WaʻIa (FINAL)
ACLARACIÓN O NOTA DE ESCRITORA🤷🏻‍♀️😂
Hawaii Five-0 II
Prologo
Capitulo 1. Ke Ho'ohi'
Capitulo 2. Wahines Akamai
Capitulo 3. Imi Loko Ka 'Uhane
Capitulo 4. Kai e'e
Capitulo 5. Huaka'I Kula
Capitulo 6. Olelo Ho'Opa'I Make
Capitulo 7. O ka ʻimi
Capitulo 8. Aloha, Malama Pono
Capítulo 9. Aloha Ke Kahi I Ke Kahi
Capítulo 10. Nā hoʻohiki
Capitulo 11. Akanahe
Capitulo 12. O Kela Me Keia Manawa
Capitulo 13. Inā wale nō (Parte I)
Capitulo 13. Inā wale nō (Parte II)
Capitulo 13. Inā wale nō (Parte III)
Capítulo 14. He hoʻomanaʻo aneiʻoe?
Capitulo 15. Hoʻomanaʻo a me ka makaʻu
Capitulo 16. Aloha makua a me nā hoʻomanaʻo
Capítulo 17. Nā mākua a me ke kaikamahine
Capítulo 18. ʻO ke ola, a me ka hoʻopaʻi make
Capítulo 19. Aloha hou Hawaii
Capitulo 20. Malama Ka Aina
Capitulo 21. O ka Pili'Ohana ka 'Oi
Capítulo 22. Malalo o ko'u malu
Capitulo 24. Kuka'awale
Capítulo 25. Mele Kalikimaka
Capítulo. 26 ka hoomanao ana
Capítulo 27. Pono Kaulike
Capitulo 28. Indelible
Capítulo 29. Pono wau i haʻi aku iā ʻoe
Capitulo 30. Ka manao
Capítulo 31. Oia'i'o

Capítulo 23. Ina Paha

508 28 5
By abby_julyd

¡¡¡Holaaa!!! Saludito adelantado solo para aclarar. No saben cuánto disfruto hacer capítulos en regresión, no sé porque pero me encanta. Este es uno de ellos, los fans de la serie sabrán de qué trata de inmediato y para los que no, trate de explicarlo lo mejor posible. Así que lo que ven en cursiva es el multiverso de Steve (Momento Chistoso Marvelita) y lo que está en letras normal es el presente. Sin más que decir, disfrútenlo y díganme algo, porque me mato haciendo capítulos y ustedes ni aparecen, hago un capitulo sin ganas solo para avanzar y ustedes felicitan hasta a mi mama por haberme traído al mundo. Los tkm

Tener a uno de los hermanos Hesse frente a él era un triunfo. Durante algún tiempo había estado trabajando tan duro para poder atraparlo que tenerlo frente a él, le causaba satisfacción, pero por alguna extraña razón, no tanta como la que mostraba Hesse frente a él.

Steve sabía que era una táctica, y que por alguna tonta razón este hombre quería hacerle el valiente frente a él.

—Vas a contarnos todo. Cada célula terrorista que tu y Víctor ayudaron a armar, cada proveedor con el que trabajaste, todos tus socios traficantes, todos a los que les has vendido armas —demandó Steve pero Hesse solo le dio una sonrisa irónica.

—Persiguiéndonos a mí y a mi hermano por 5 años como un perrito detrás de su hueso ¿Crees que no sabemos de ti? Ya tenemos nuestra tarea lista.

Y al decir estas palabras el teléfono de Steve comenzó a sonar. Este lo saco miro la pantalla y dejo que siguiera sonando.

—Deberías tomar la llamada —dice Hesse—, no hablas mucho con tu padre.

Aquellas palabras encendieron algo en Steve que no debía dar a demostrar a Hesse pero algo había allí.

Aquella llamada era solo para asentar aquel presentimiento que tuvo Steve al momento en que Hesse dijo "No hablas mucho con tu padre" era un intercambio. Hesse por la vida de su padre.

Aunque Steve intento no dejarse doblegar, el hombre del otro lado del teléfono tenía muy claros sus objetivos y si Steve no cumplía, su padre moría. Incluso su padre tampoco quería doblegarse —de tal palo, tal astilla— pero de un momento a otro las cosas perdieron el control, y fue cuando Steve supo que ya no podía seguir en su actitud inquebrantable.

Era salvar su vida y la Hesse que estaban siendo atacados, para salvar la de su padre. Por un instante, solo uno muy corto creyó que no lo había logrado pues Hesse había salido herido, pero afortunadamente era solo eso. Steve en su desespero tomo el celular y comenzó hablar hasta que una voz le atendió, y le informo que la policía había llegado a tiempo, su padre estaba a salvo.

El Detective Danny Williams le había comunicado que su padre estaba a salvo y que lo llevarían a la comisaria. En su pánico Steve pidió hablar con él, y cuando oyó su voz todo en él se tranquilizo

Extrañamente aquella voz se hizo distante, y luego una luz lo cegó.

Aquella luz lo había despertado, en una habitación de cuatro paredes, todas blancas. Pensó que sería un sueño pues empezó a pedir ayuda, pero al escucharle, algo que activo que hizo que un humo blanco saliera de unas ventanillas. Intento cubrirse pero no pudo, aquel humo había cumplido con su objetivo, volverlo adormecer.

...

Sand Island, Honolulu

— ¿Qué diablos es eso en su cabeza? —dijo Grover al ver bajar a Sang Min del auto de Kono.

—Es su cabello —respondió Danny.

—Parece un sombrero mapache, así como Daniel Boone.

—Has estado mucho en el sol McGarrett —le dice Sang a Grover y este solo le da una mirada de repulsión. Aquello hizo que Danny se riera, pues si algo sabia ser Sang Min era ser bastante hilarante.

—Feo y divertido ¿eh? —dice Grover y Danny de nuevo ríe.

—Sang Min, te presento al Capitán Lou Grover, es parte del equipo ahora. Lo que significa que puede abofetearte y arrancarte los dientes si te pasas de listo.

Sang miro a Grover y acerco lentamente a él para decirle: —No me agradas.

—Ok, eso es lindo —dice Danny y palmea su espalda.

— ¿Has sabido algo de McGarrett y Diane? —pregunta Kono, pues hacia más de una hora que les habían llamado para aquel operativo donde atraparían a un criminal que buscaban hace ya un tiempo.

—No, pero no nos queda mucho tiempo. Tenemos que movernos ahora, ya los pondremos al día —respondió Danny, algo lo hacía estar tranquilo, pues pensaba que Diane y Steve los había picado el cursi aguijón del amor y se habían escapado; pero había otra parte que le decía que algo no andaba bien. Pero podría ser solo su ansiedad, así que decidió concentrarse. — ¿El sabe lo que hace? —señalo a Sang

—Pues pronto lo veremos —responde Chin.

Sang se fue a su misión, mientras Five-0 se cubría y estaba listo para cualquier cosa. Sin embargo, no fue tan difícil Sang Min era de los criminales más conocidos de Hawaii, y tenía amigos y enemigos por doquier, así que cuando Five-0 se ponía tras su pista y lograban capturarlo obtenían muchos beneficios.

— ¡Eres una rata! —le grito a Min el hombre que llevaba esposado Grover y que Sang había ayudado a capturar.

—No soy una rata, soy un Five-0 —respondió Min.

—Ok, eso fue demasiado —dijo Grover y se llevo al hombre a la patrulla.

Mientras el equipo hablaba con Ming y este exigía una recompensa por su trabajo —que casi siempre era ver a su hijo— Danny recibió una llamada. Una donde lo que le decían no le gusto, de hecho lo asusto.

—...Allá estaremos —dijo Danny y colgó.

Su cara lo decía todo, por lo que el equipo podía intuir que pasaba.

— ¿Qué sucede? —pregunta Grover.

—Tenemos que irnos —dice Danny caminando decidido a su auto, mientras el equipo va detrás de él—, encontraron el auto de Steve y dentro de este a Diane, van a llevarla a un hospital

— ¿Pero ella está bien? ¿Y McGarrett? —pregunto Chin.

—No, Steve no estaba en el auto.

...

No tomó demasiado llegar a donde habían encontrado el auto. Por lo que al bajarse del auto Danny pudo ver cuando sacaban a Diane del auto, este corrió hacia los paramédicos y hacia ella.

—Diane... —musitó al acercarse a ella. En su cara había unos pequeños cortes y vidrios en su cabello— ¿Está bien? No está...No...

—No, tranquilo Detective. Está bien, solo esta adormecida, le inyectaron un sedante.

—Ok, yo iré con ella y ustedes. Denme un segundo.

Danny con Grover quien junto a CSI, Kono y Chin ya estaban procesando la escena.

—Lou quédate a revisar todo esto, cada cosa —le pidió Danny ye enseguida Chin y Kono se acercaron a donde estaban— Vi sangre en el auto, yo iré con Diane, quienes le atacaron le colocaron un sedante, así que voy estar con ella en el hospital hasta que despierte y pueda decirnos que paso

—De acuerdo, claro que sí. Mantennos al tanto —dijo Grover y Danny asintió.

Los Five-0 se pusieron en marcha y comenzaron a revisar el lugar, pero lo que encontraban no les daba aliento, sino que los preocupaba un poco más. Pues era claro que Steve había sido secuestrado, y que por extrañas razones, era el único objetivo, pues Diane iba camino a un hospital. Y aunque aquello era igual de preocupante, agradecían que quienes se hayan llevado a Steve no hubiesen asesinado a Diane para borrar testigos.

♦♦♦

Aquella luz de nuevo se hacía paso entre sus ojos, haciéndolo despertar algo confundido y preguntándose ¿Cuánto tiempo había estado dormido? Luego miro a su alrededor y recordaba que había alguien junto a él antes de llegar a ese sitio, pero estaba tan confundido por el efecto del gas que lo había adormecido que no lograba encontrar en quien estaba pensando.

Aquel cuarto estaba muy iluminado, por una luz igual de blanca que las paredes, pero estas luces de pronto se apagaron y en un proyector que estaba frente a él se reproducía un video que el reconocía. Era un pequeño niño que emocionado le mostraba a su padre lo que había encontrado en el mar. Su padre quien tenía en su regazo a una pequeña niña rubia se mostraba igual de emocionado al ver lo que este pequeño le mostraba.

Steve al ver aquella imagen enseguida los reconoció, era él, su hermana y su padre.

De pronto las luces se encendieron de nuevo y aquel gas volvió a salir de las ventanillas, sabía que esto causaría lo mismo que hace rato, y como un celaje recordó que quien estaba a su lado era Diane. Pero ella no estaba ahí, no en esa habitación. Aquello que recordó le hizo querer luchar contra el gas, pero era imposible. De nuevo el gas le había puesto a dormir, pero antes de caer definitivamente, veía como una figura alta con un traje de seguridad se acercaba a él, y cuando no pudo mas, simplemente se dejo ir.

Sin embargo aunque su cuerpo había sucumbido a los efectos del gas, su mente, estaba divagando entre realidades que no sabía si era la actual, o algo parte de algún sueño, pues esta vez se encontraba en la Estaciona de Policial de Honolulu.

Al entrar se encontraba un señor alto, robusto y de color, originario de Chicago —o al menos eso oyó Steve del señor— muy molesto reclamándole a un oficial sobre el robo de sus palos de golf, aquel alboroto lo hizo sin querer interesarse en lo que sucedió, pero de pronto el oficial que le atendía lo llamo:

— ¿Comandante?

—Si

— ¿Puedo ayudarle? —se ofrece el oficial.

—Eh... Sí, mi nombre es Steve McGarrett y busco a mi padre.

De manera casual uno de los detectives que venía saliendo junto a otro y este ultimo escucho su nombre por lo que le aviso a Danny que a el, era a quien estaba esperando.

— ¿Comandante McGarrett? —Steve asintió— soy el Detective Williams y este es mi compañero Sam Bradock. Hablamos por teléfono.

—Es bueno verle Comandante —dice Sam

—Sí, Gracias —responde Steve.

—Oh no, aquí no decimos "Gracias" —le corrige el Detective Williams— aquí decimos "Mahalo"; "Mahalo" es Gracias ¿No es así Sam?—y el mencionado asiente.

—Oh mira, ahí viene —Dice Sam y Steve sin querer voltea, pues piensa que es su padre.

Pero en realidad era una mujer de cabello negro azabache, ojos azules, alta, esbelta y con un vestido ejecutivo que se acercaba a ellos.

—No me dijiste que Diane vendría a verte —le dijo Danny a Sam

—Dijo que tenía una reunión de negocios con unos socios aquí en Hawaii y quiso pasar a visitarme.

—Es su novia —le dice el Detective Williams a Steve pero este solo está un poco impaciente. Y aunque la imagen de aquella mujer no le pasaba desapercibida, su atención estaba en querer ver a su padre— no sabemos como una mujer así le prestó atención a alguien como él, pero lo consideramos el más afortunado.

A Steve le parecía que el Detective Williams tenía una personalidad bastante amigable y hasta algo excéntrica con esa camisa hawaiana negra de flores naranjas. Aquel comentario solo hizo reír a Sam, ya estaba más que acostumbrado a que su pareja de la policía manejara esa clase de humor.

—Hola, Hola Danny —Saludo la mujer de nombre Diane—lamento llegar así ¿estás ocupado? —le pregunto ella a Sam

—Oh no mi amor, solo estaba conociendo al Comandante McGarrett. Es parte de mi caso de hoy... Bueno, él y su padre.

—Mucho gusto Diane —saludo ella extendiendo su mano.

—Un placer —respondió Steve para luego mirar al detective Williams y preguntarle: — ¿puedo ver a mi padre?

—oh, sí si claro. Pasa por aquí. Los dejo solos —dijo Danny despidiéndose de Sam y Diane.

Estos dos se fueron en dirección a la oficina de Sam, y el Detective Williams condujo a Steve hasta la oficina del Capitán Kelly que era donde se encontraba resguardado su padre.

Al entrar a aquella oficina, bastante iluminada por el sol de Hawaii, que entraba por aquella ventana detrás del padre de Steve; y ver a su padre sentado, pudo realmente respirar, estaba ahí, y estaba bien. En ese momento no pudo sino sentirse afortunado, la vida les había regalado un poco más de tiempo juntos.

—Bienvenido a casa hijo —le saludo su padre con un fuerte abrazo.

— ¿Estás bien? —pregunto Steve.

—Si... Eh, Steve quiero que conozcas al Capitán Kelly —le señala su padre al oficial y este le saluda extendiendo su mano.

—Comandante ¿Cómo esta?

—El Capitán Kelly fue mi aprendiz, y me enorgullece decir que será el próximo capitán de la policía —alaba el Sr. McGarrett.

— ¿Qué puedo decir? aprendí del mejor —repone el capitán.

— ¿Dónde esta Víctor Hesse? —pregunta Steve.

—Está en el hospital. Tiene custodia fuera y esta esposado a su cama —responde el Detective Williams

— ¿Ha dicho algo? —pregunto de nuevo Steve.

—Según mis registros deberíamos dejarle el interrogatorio a usted —responde el Capitán.

—Steve ¿Qué está pasando? —Pregunta el Sr. McGarrett

Las únicas personas que sabían que estaba transportando a su hermano eran los hombres de mi destacamento —contesta Steve— no hay manera de que Víctor pudiera haberlo descubierto a menos que tuviera ayuda.

De pronto la luz de la ventana se hizo más intensa, tanto que le cegó un poco. Cerró sus ojos y entonces al abrirlo, su verdadera realidad, estaba frente a él.

Una habitación con una luz más tenue, que salía de una pequeña ventana detrás de su silla. Silla a la que estaba atado de manos y pies. En uno de sus brazos había una vía que conectaba a dos bolsas médicas que contenían un líquido marrón que goteaba lentamente. Frente a él, una puerta que se abrió de pronto y de ella salió una mujer de color, con el cabello a ras y vestida con un chaleco y pantalón de cuero.

De su maletín saco una linterna y con ella chequeo las pupilas de Steve para luego sacar una barra de chocolate y dársela a comer a Steve.

— ¿Quién eres? —Preguntó Steve— ¿Dónde está Diane?

—Come esto —dijo ella ignorando su pregunta—, con los químicos que estamos dándote necesitaras un alto nivel de azúcar en la sangre.

Steve comió de la barra, mastico un poco y luego le escupió en la cara lo que había en su boca.

— ¡¿Me vas a decir qué demonios está pasando aquí?! ¡¿Dónde está la mujer que venía conmigo?!—Pero ella lo ignoro de nuevo y esta vez solo se dio vuelta y se fue hasta donde estaba la vía conectada a su cuerpo y acelero el goteo del líquido— ¿Qué quieres? ¿Qué quieres de mí? ¿Qué te he hecho? ¿Qué estás haciendo? Soy policía, ¿lo sabías? soy policía Van a venir a buscarme.

Y mientras él hablaba aquel liquido hacia su efecto y de nuevo lo envió aquel espiral donde sus dos realidades se cruzaban.

...

—Disculpe me gustaría saber si puedo ver a mi amiga —le preguntaba Danny a la enfermera del hospital donde había llevado a Diane—su nombre es Diane Brighton, acaban de traerla.

—Claro, sígame —le respondió la enfermera—Aun sigue dormida pero esta bien. Solo tiene un par de rasguños. En unas horas cuando despierte podrá irse a casa.

—Gracias —le dijo Danny. Ella asintió y dejo a Danny frente a la puerta de la habitación donde estaba Diane.

Entro y en efecto Diane seguía dormida. En su rostro se veían las cortadas que habían hecho los vidrios. Se acerco a ella y noto que en su mano comenzaba a hacerse un hematoma que tomaba color morado, por lo que supuso que Diane había intentado defenderse.

Por un momento pensaba que había que ser muy estúpido para atacar a Diane y Steve juntos, pero sin duda ambos también eran vulnerables y entonces sin querer el pánico le ataco, quizás Diane este viva pero y si Steve no lo estaba. Necesitaba que ella despertara para que le dijera que había sucedido.

Pero aquella respuesta no tardaría demasiado pues Diane ya comenzaba a despertar.

—Gracias a Dios —dijo Danny—, ¿Cómo estás?

— ¿Qué pasó? —pregunto ella aun algo adormilada.

—Te encontramos en el auto de Steve, al parecer te sedaron —respondió Danny.

—Steve... —dijo ella para sí, y de pronto aquel nombre la hizo despertar por completo— ¡Mierda! ¿Dónde está Steve? ¿Se lo llevaron?

—Así parece.

— ¡Maldita sea! Nos tomaron desprevenidos —dijo ella y comenzó a levantarse de la cama— intente pelear pero enseguida me clavaron una aguja en el cuello.

— ¡ey! ¡ey! Cálmate —le decía Danny al ver que ella comenzaba a quitarse todos los aparatos que le había conectado—Diane por favor... Aun no puedes irte de aquí... escucha...

—Danny, estos hombres se llevaron a Steve, no voy a quedarme aquí. ¡Ouch! —se quejo cuando se quito la vía.

—Diane vuelve a la cama por favor —pidió Danny.

—Danny, esto es serio ¿de acuerdo? —Dijo ella y de pronto se devolvió a la cama pues todo le dio vueltas— ¡Mierda! —dijo en un suspiro, sabía que justo en ese momento no estaba en sus cinco sentidos y no sería tan útil como quisiera.

—Ok, vale... Sé que no puedo hacer que te quedes aquí, porque de alguna manera te escaparas. Ya te conozco, así que iré por tus cosas y te ayudare a salir de aquí. Así parezcas una ebria que va a rehabilitación.

—Gracias por eso.

—Sí, si... Como sea. No sé que estoy pagando contigo de verdad.

...

—Bueno, supongo que si te vas a quedar sin hogar, Hawaii es un buen lugar ¿no? —dice el detective Williams al ver que Steve se quedaba fijamente mirando a un vagabundo que estaba en la calle.

—Supongo que sí —responde Steve.

—Disculpa —dijo el Detective pues su teléfono comenzó a sonar— Hola muñequita... ¿eh? —dijo entre risas. Se notaba muy feliz—Lo sé, lo sé... Muñeca, estoy en medio de algo, te llamo de vuelta ¿sí?... Bueno... Ok, también te amo. Te veo en un rato.

—Supongo que está casado —dice Steve al ver colgar al Detective Williams

—Oh si, muy muy casado. De hecho tengo la mejor mujer del planeta. Enserio, no quiero presumir, pero es increíble.

— ¿Cuál es su nombre?

—Rachel.

— ¿Tienen hijos?

—Sí, dos. Una hermosa niña, Grace y un niño increíble llamado Charlie. ¿Y usted?

—Estoy viendo a alguien —responde— es decir, con suerte llegaremos a ese punto algún día.

—Es lo mejor que puede pasarle en la vida. Creeme —repuso Danny con entusiasmo. Se notaba el amor por su familia al hablar. —Lo mismo le dije a Sam, y creo que está haciéndome caso, ya sabe... Mi compañero, le propondrá matrimonio a su novia en estos días, bueno... creo que será hoy, ya que ella esta aquí en la isla.

—Oh, eso es bueno —dijo SteveMi padre me dijo que te mudaste aquí hace unos meses ¿es cierto?

—Si, así es —respondió Danny.

— ¿Qué te trajo a Oahu?

— ¿Qué me trajo a Oahu? Pues hay hermosas playas, hay un lugar de comida llamado "Ono Come", que es increíble...Es un lugar fantástico, es el paraíso comparado con New Jersey.

Al parecer Steve y el detective Williams había tenido un excelente comienzo, ambos parecían agradarse desde el principio, por lo que aquella charla se extendió hasta llegar al hospital

El ala donde tenían Víctor Hesse estaba algo conmocionada, por lo que a cada lugar que veía había alguien corriendo, caminando rápido, tal vez a punto de llorar, o pidiendo información desesperadamente sobre un pariente.

Al pedir información, un médico de guardia, de ojos rasgados, cara redonda y estatura media les condujo hasta la habitación de Hesse. Al entrar, se podía escuchar el sonido de la tv, donde se proyectaba un comercial de brillo labial promocionado por la Surfista más importante de la isla: Kono Kalakaua. Una belleza de pies a cabeza y que sin duda tenia la concentración y toda la atención de Víctor Hesse, sin embargo su emoción no duro mucho pues al entrar el Detective Williams, apagó la TV.

— ¡Oye! Estaba disfrutando eso —se quejo Hesse.

—Me alegra que así fuera —replico el Detective Williams — porque es lo más cerca que estarás de una mujer bonita por el resto de tu vida.

—Subestima mis recursos detective —refuto Hesse—se sorprendería con lo que puede hacer un hombre con los amigos adecuados, en los lugares adecuado.

Y aquella frase fue directamente a Steve.

—Eso es bueno, porque esa es la razón por la que estamos aquí, para hablar de esos amigos.

—Específicamente del hombre que te mando asesinar a mi padre —dice Steve.

—Tal vez eso si fue idea mía —repone Hesse con una sonrisita irónica. — Tal vez quería enterrar a tu padre solo porque podía.

—Ok, si hay algo que se, es que amas a tu hermano; por lo que eso no pudo ocurrírsete a ti solo. Tenías entrada legal a este país, nuestros enlaces de comunicación y mi ruta de extracción. Ahora, todo eso tiene un precio, y el pago era asesinar a mi padre ¿No?

Hesse sabia que Steve hablaba con la verdad, pero eso no le hacía querer cooperar o si quiera intentarlo.

—Ok caballeros, supongo que no responderé ninguna pregunta hasta que tenga un abogado —dice Hesse.

—Ay no va a responder ninguna pregunta —dice el Detective Williams actuando y haciendo un tono agudo para mofar a Hesse—No quiere responder ninguna pregunta, que pena. Sabes, es raro pero personalmente adoro oír esa frase de tipos extranjeros. En verdad, siento que suena mucho mejor.

Steve había entendido que Hesse no hablaría, por lo que decidió no perder su tiempo y quiso salir del lugar, pero de inmediato, el Detective Williams lo detuvo.

— ¿A dónde vas? —y de la nada le arranco la cateterizacion de vía a Hesse y los monitores comenzaron a soltar sus alarmas

— ¡No puedes hacer eso! —se quejo fuertemente Hesse.

—Oye, el tiene razón... No puedes hacer eso —dice Steve

—No, no... Estás equivocado, claro que puedo hacer eso, porque Bono aquí presente —le señala el Detective Williams riendo—, no es ciudadano estadounidense. Lo que significa que no está sujeto a nuestras protecciones constitucionales.

Steve al ver la agresividad del Detective Williams lo toma del brazo y lo aleja de Hesse.

—Escucha... Estas equivocado ¿ok? el fue arrestado en suelo estadounidense, el tiene esos derechos ¿lo sabes, no?

—Sí, pero él no sabe eso —Dice el Detective Williams—Ahora hazme un favor, y cierra la puerta ¿sí?

— ¿Qué? ¿Que cierre la puerta? —dice Steve algo confundido pero aun así le sigue la orden al Detective Williams.

—Ve, cierra la puerta —le dice el Detective Williams de nuevo.

Mientras Steve cerraba la puerta, este le quito la almohada y la coloco en su pierna, saco su arma y le disparo. Aunque la idea era amortiguar el sonido, no lo logro, y mucho menos amortiguo los gritos de Hesse, por lo que le quito inmediatamente la almohada y se la coloco en la cara gritándole que se callara.

— ¿Qué sucede? —entro de pronto el médico que los había llevado a la habitación.

—Oye, no seas grosero ¿de acuerdo? Es obvio que estamos teniendo aquí una conversación —le decía molesto el Detective Williams— váyase y dígale al forense que aparte una cama para él.

Y al ver el arma, el médico simplemente se dio la vuelta y salió. Steve seguía bastante contrariado y sin poder comprender la actitud tan agresiva de él Detective Williams. Este último le pidió que sostuviera la almohada con la que intentaba callar a Hesse pero este solo seguía gritando.

—Ok, ok... Basta ¿sí? ¿Qué clase de policía eres? —le decía Steve a el Detective Williams.

—El tipo de policía que actual, ahora disculpa —dijo y se devolvió hasta donde estaba Hesse aun gritando del dolor por el disparo y le quito la almohada que Steve sostenía. — ¡Ey mírame! ¡Mírame!

—Ok, ya basta... Fue suficiente ¿sí? —le pidió Steve al el Detective Williams pero este solo parecía más enojado.

No. No. No es suficiente, ¿de acuerdo? Me dijiste que este hombre es un terrorista. El 11 de septiembre, yo estaba allí. Estaba en la ciudad de Nueva York, ¿de acuerdo? Así que este tipo no tendrá ningún tipo de piedad de mí, ¿de acuerdo? —Y de nuevo acciona su arma y esta vez le dispara en la otra pierna. —Lo siento, lo siento de verdad... Yo no te hice la pregunta que no respondiste, así que no es mi culpa.

Sin duda todo estaba fuera de control, pero entre todas las cosas; el detective Williams lo estaba aun más. Para Steve aquella forma de actuar estaba fuera de toda lógica posible, ningún ser humano podía actuar así. Fuera de la habitación ya estaban tocando y pidiendo que abrieran la puerta, pero el Detective Williams seguía bastante empecinado en hacer las cosas a su manera, mientras Steve aun seguía sin saber qué hacer, pues para su lógica; el Detective Williams simplemente estaba loco.

Oye. ¿Qué te pasa? No abras la puerta. —Le pidió el detective— No abras esa puerta. Si no te gusta lo que estoy haciendo, puedes esperar en el baño, ¿de acuerdo? Este hombre trató de ejecutar a tu padre ayer. ¿Bien? Y no creo que vaya a hablar sin un poco de persuasión amistosa. ¡Un minuto por favor! —Grito para que escucharan afuera.

Steve sabía que el Detective Williams no iba a cambiar su modo, y que tenía razón; Hesse no iba hablar si no se veía entre la vida y la muerte. Así que ya cansado le dijo: —Has lo que tengas que hacer.

—Ok, Gracias —le dijo y en su cara se podía ver hasta emoción. Hesse al ver que este venia de nuevo y con más ímpetu supo que era momento de hablar, así comenzó a removerse en su cama, como si quisiera escapar— ¿Qué? ¿No vas hablar?

—Te diré lo que quieres saber —dijo este entre jadeos.

— ¿Quién te hablo de mi operación? —le pregunto Steve.

—Si te lo digo, vas a desear que no lo hubiera hecho —contesto.

—Tomare esa oportunidad—dijo Steve— ¿Quien te dijo de esa operación?

Y de nuevo Steve comenzaba a despertar en su realidad. Los efectos del sedante aun hacían estragos en el, pues su vista se hacía borrosa y noto que estaba todo mojado. Intentaba descifrar que era lo que tenía enfrente pues su visión no era clara, solo podía ver dos sombras moverse frente a él.

—Estás despierto —dijo el hombre que antes era una sombra. Frente a él estaba Wo Fat—que bien, empecemos.

Con un movimiento de cabeza le ordeno a la mujer que antes había estado con Steve que comenzara con lo que sería un largo viaje de torturas para poder sacarle la información que este buscaba.

Con una toalla la mujer tapaba el rostro de Steve, mientras Wo Fat vertía una cubeta con agua en su cara, logrando que este sintiera que estaba ahogándose, procedimiento que repitieron varias veces.

—Nunca...Vas a... romperme —le espeto Steve entre jadeos.

—Es un simple trabajo de ingeniería del comportamiento Steve. Lo sabes, solo necesita tiempo y paciencia; y yo tengo ambos. Ahora dime ¿Dónde está mi padre?

—Primero... Dime ¿Dónde está Diane?

— ¿La chica? ¿La que fue contigo la otra vez a Halawa? No la tengo.

—No te creo.

—Pues deberías, porque no me interesa ella, ahora responde ¿Dónde está mi padre?

—No lo sé, y no te diré nada hasta saber que la dejaste ir, o que ella está bien—respondió Steve.

— ¿Y tu esperas que yo haga eso y además te crea que no sabes donde esta?

—No...Pero es la verdad.

***

Cuartel General Five-0

— ¿Seguro que te sientes bien? —Le pregunto Danny a Diane al ver que esta caminaba un poco tambaleante.

—Si estoy bien, solo veo borroso y tengo nauseas, pero estoy bien.

—Nada te costaba esperar en el hospital —dijo Danny y Diane solo rodó sus ojos—Si fueras alguien normal que se preocupa su salud.

—Me preocupa que mi compañero de trabajo slash pareja sentimental, está en manos de un psicótico... O bueno, ni siquiera se quien nos hizo esto.

— ¿Ves porque no los quería juntos? Ustedes dos son un imán para atraer problemas, ahora añádele que son pareja. Son nucleares. Nucleares Diane —decía este negando con la cabeza— ¿No les viste las caras?

—No, iban con capucha negra. Sé que quien me ataco es mujer por su contextura y porque no pudo sacarme del auto por la ventana, además de ser alta y de color, pero es todo.

—No queda duda, fue Wo Fat, entonces...

— ¿Es el tipo que escapo de la prisión en Colorado y el mismo con el que según ustedes yo tenía relación? —pregunto Diane quien sin querer se tropieza con un contenedor de basura gracias a su vista borrosa

—Es pésimo momento para sacar en cara algo así, pero si. ¿Estás bien? —pregunta Danny al ver a Diane tropezarse, y decide tomarla por un brazo y conducirla hasta el ascensor.

—Sí, sí estoy bien —Respondió con fastidio—Y no estoy sacando nada en cara ¿Ok? Solo quería relacionarlo. Por si lo olvidas, mi otra yo tal vez sabia quien era Wo Fat, pero esta no.

—Ok, lo siento. Ahora quédate quieta y deja que te conduzca antes de que vayas a caerte. Y por cierto, no tienes permitido usar tu arma.

— ¡Ja! Si como no.

Danny y Diane había llegado al cuartel, y en la pantalla ya estaba la cara de Wo Fat, por lo que el equipo ya tenía algo adelantado. Detrás de ellos venían entrando Kono y Sang Min. Diane que iba a pocos pasos de ellos pudo escuchar como Kono le amenazaba por la típica actitud coqueta de Sang.

—Oh, pero si es la otra dulzura —pero Diane ni hablo, ella si solo saco su arma.

—Whoa Whoa...A ver Diane, guarda eso —le dijo Danny poniéndose frente a ella y obligándola a bajar su arma. Al tiempo que volteo y miro a Sang: — ¿Te enloqueciste? Esta bajo los efectos de un sedante aún, y si no estuviera aquí posiblemente ya te habrían disparado, así que aléjate de ella, lo digo enserio.

Y Sang levanto sus manos en señal de rendición y apresuro su paso hasta donde estaba Grover, como intentando protegerse. Sin embargo como a Grover le parecía algo irritante pero gracioso Sang Min, este se aparto y lo dejo a toda la vista de Diane.

—Ok, díganme porque estoy aquí, y ese señor está ahí—Dice Sang—Porque si creen que sé donde está, no lo sé.

—Por supuesto que no sabrías donde esta —dijo Diane y sin querer tropezó con Chin— ¡Carajo! —Exclamó frustrada por su vista que la hacía caminar como idiota—Tu, estas demasiado abajo en la cadena alimenticia como para estar en los objetivos de un tipo así.

—Ay, enserio la extrañaba ¿está bien? —le pregunta Grover a Danny al ver que Diane seguía caminando algo inestable.

—No, aun está sufriendo los efectos del sedante, pero era traerla aquí o que se escapara del hospital. Preferí la primera.

— ¿Qué tienen hasta ahora? —pregunto Diane.

—A él —señala Kono a Sang.

—Ay no, estamos perdidos —dijo Diane—Creo que llamaré a Kavner.

—Tranquila, déjalo pensar —le dijo Chin a Diane— él sabe lo que tiene que hacer.

—Ok, pero que sea para hoy, porque no se cuanto tiempo estuve dormida, pero si se que ha pasado mucho desde que Steve fue capturado.

...

—Steve, esto puede terminar, si me dices lo que quiero saber

—Si...vas a matarme... solo hazlo. Solo déjala ir, ella no tiene nada que ver con esto. —le dijo Steve entre jadeos. La tortura, apenas comenzaba.

—Steve, si quisiera matarte lo habría hecho hace mucho tiempo. Y te lo digo por última vez, porque no me interesa que me creas, no la tengo. A ella no la tomé. —le dijo este en su siempre tono impasible.

—Bien...—Steve sabía que Wo Fat tenía razón, tal vez Diane no era necesaria para él y por eso no se la llevo junto con él, pero no iba a dejar de insistir pues ella podría ser una carta que podría utilizar en su contra para que le dijera dónde estaba su padre— ¿Quieres saber dónde está tu padre? Pregúntale a Doris. Supe de sus viajes a Colorado para ir a visitarte ¿Por qué no le preguntaste? Debiste haberle preguntado cuando tuviste la oportunidad.

—Le pregunte a nuestra madre —Replico Wo Fat— y dijo que no sabía.

— ¿Qué dijiste? ¿Acaso acabas de decir "nuestra madre"? Ella no es tu madre, hice pruebas de ADN ¡Y no es tu madre! —le grito Steve.

Wo Fat se había aburrido de aquellas respuestas y en fondo también estaba frustrado, por lo que sabía que matarlo no era una opción pero al menos lo mantendría con vida, hasta obtener lo que necesitaba.

— ¿Qué me estás dando? ¿Qué es eso? —se removió en su silla, pero de nuevo un liquido le era suministrado.

—Algo que te ayudara a decir la verdad —dijo Wo Fat y Steve se había vuelto a dormir.

De nuevo Steve se despertaba, solo que esta vez en aquel cuarto completamente blanco donde estaba al principio. Frente a él una enorme pantalla que daba gran parte de luz a aquel cuarto, dejaba ver lo que fue una noticia de último momento, una madre que también era maestra de una primaria en Oahu fue asesinada a causa de una explosión dentro de su auto. Identificada como Doris McGarrett, esposa del Sargento de la Policial John McGarrett, aquella trágica noticia había conmocionado a la isla.

Steve miraba la pantalla y podía sentir de nuevo el impacto de saber que su madre había muerto tan trágicamente, el mismo dolor y el mismo sentimiento de estar en medio de la nada, pero sintiéndolo todo.

Y justo cuando recobraba su consciencia total, las ventanillas se abrieron liberando aquel gas que lo enviaría de nuevo a dormir.

Steve intentaba comunicarse con sus superiores para que le ayudaran a buscar el hombre que le había dado a Hesse toda la información sobre su operación.

—Ok, Gracias —dijo y colgó su teléfono—. Mis fuentes no han oído de nadie llamado Wo Fat.

—Es comprensible. Es decir ¿Quién se inventaría un nombre como Wo Fat?

—Bueno, tomando en cuenta que le abriste dos agujeros a Hesse, estoy seguro que habría dicho cualquier cosa por que te detuvieras—Reprocho Steve.

—Ok, vale. Ahora escucha, estoy bastante seguro que tu gente de la armada sabe de todo, pero si algo sucede en esta isla, solo hay un hombre que puede saberlo.

Y aquella frase fue un boleto directo a Halawa, a donde el Detective Williams conducía. Ahí se encontraba uno de los más grandes gánster y criminales de la isla: Kamekona Tupuola, a quien su última jugada no le salió como esperaba y termino tras las rejas.

Steve y Danny esperaban en una de las salas de la correccional para hablar con Tupuola, y aunque no esperaban una gran bienvenida, tampoco se esperaban que aquel enorme sujeto llegara con mala disposición y hasta mala cara.

—Espero esto sea bueno, porque están interrumpiendo mi hora del almuerzo —recriminó el hombre quien venía aun esposado de manos y pies.

—Créame que los demás reclusos estarán contentos con que este aquí y no allá.

— ¿Qué se supone que significa eso? ¿Qué si no como habrá más comida para los otros? ¿O que si como ellos morirán de hambre? ¿Ah? —espeto.

—Eh... Sí, eso. Relájate ¿Quieres?

— ¿Por qué mejor no te callas?¿Y este quién es? —hizo un ademan señalando a Steve con su boca. — ¿Strippergrama?

—Teniente Comandante Steve McGarrett —Responde Steve.

— ¿Y qué quiere Comandante?

—El detective Williams me dijo que tú podrías saber sobre un hombre llamado Wo Fat.

Luego de un trato donde aquella información valía comidas con camarones, Steve y Danny comenzaban a ver un poco la luz en aquel caso que parecía bastante oscuro.

Pero luego de aquel trato, aquella realidad se hacía muy lejana a la que vivía Steve, de nuevo estaba siendo torturado por Wo Fat, quien no descansaría hasta que Steve le diera la ubicación de su padre.

—Ok, intentaremos esto de nuevo —y acciono aquel aparato que daba doloras descargas eléctricas— ¿Dónde está mi padre? —y luego paró.

—Ya... Ya te lo dije —respondió Steve ya bastante cansado—No puedo decirte, lo que no se.

Y otra vez Wo Fat mando a la mujer a inyectarle el líquido, y esta vez no tardo mucho en hacer su efecto.

Steve y Danny habían logrado dar con el paradero de Wo Fat, su captura estaba siendo algo imperiosa, pues el hombre en medio de un muelle intentaba huir al tiempo que disparaba muy certeramente hacia Danny y Steve.

Hasta que aquella persecución fue suficiente y Steve logro dispararle de frente. Para cuando Steve quería las respuestas de Wo Fat, ya él se había ido, no había respuestas.

Con aquel cerrado, y el hombre que intento asesinar al padre de Steve muerto, este podía volver a su vida normal. Por lo que fue hasta la estación a buscar a su padre.

— ¡Lo siento! —Dijo al sentir el impacto de su cuerpo con el de otra persona que venía distraída.

—No, no... Me disculpo yo, no le vi venia concentrada en el teléfono. Debo volver a New York pronto y no lo esperaba.

—Lo imagino —Sin duda aquella mujer causaba un pequeña curiosidad en el. — ¡Felicidades por su compromiso! —le dijo notando el anillo en su mano, que no traía cuando le conoció. Por lo visto, el compañero de Danny le había hecho más que caso.

—Oh Gracias —contesto ella algo sonrojada—.Supongo que el detective Williams le dijo.

—No. Tu anillo, no lo traías hasta mañana.

—Si es cierto... ¿La marina? —le pregunto ella señalando su uniforme.

—Sí, la marina.

—Siempre admire la valentía de quienes sirven a nuestro país. De hecho de niña soñaba con eso... pero lo mío son los negocios sin duda —dijo ella y Steve sonrió.

—Gracias. Pues, digamos que usted ayuda con la economía del país —y ambos soltaron una carcajada.

—Eso fue lindo, pero digamos que si... No quiero desmeritar su halago. Si es que lo es.

—Oh si, sin duda lo es. Fue un placer —dijo Steve extendiendo su mano— Srta...

—Brighton. Pero puedes llamarme Diane —dijo ella estrechándola.

Había algo en aquel encuentro que podía llamarse conexión, sin embargo, era de esas que tenían un inicio y un fin. Steve volvería a su vida, y ella a la de él, pero si algo era seguro era que Steve jamás olvidaría lo dulce que se veía aquel rostro cuando sonreía.

— ¡Comandante! —Le llamo el Detective Williams para despedirse de él— le voy a dar un consejo, esto es Hawaii. No vestimos de traje todo el tiempo, solo en ceremonias.

—Gracias por el consejo —dice Steve divertido—, estoy por irme y quería agradecerle.

— ¿Irse? Que mal, porque justo estaba por decirle, que si no está interesado en una carrera en esto de aplicar la ley.

— ¿Una carrera en aplicar la ley?

—Así es

—No lo sé... Tal vez, algún día lo piense —responde Steve riendo, sin duda la personalidad del Detective Williams era bastante peculiar.

—Bien, déjemelo saber. Si alguna vez echa de menos su hogar, vuelva y yo hablare con el Capitán Kelly, y lo pondrá a trabajar. ¿Qué dices?

—Bueno, podría acostumbrarme a ser chofer y manejar su auto —y por alguna razón Danny parecía complacido—Muchas Gracias Danny.

—Oh no es nada. Y llámeme "Danno" todos mis amigos lo hacen ¿de acuerdo? Nos vemos. Cuídate.

—Igual, cuídate. Bye Danno.

Y en aquella realidad Steve volvería a su vida, pero en la presente, seguía siendo víctima de Wo Fat, y a pesar de que este nunca ceso, Steve seguía indoblegable.

—Vaya Steve —Dijo Wo Fat—la marina te ha enseñado bien.

—Te voy... te voy a matar... y luego, voy a encontrar a tu padre solo por tenerte —dijo Steve de nuevo bastante agotado luego de recibir varias descargas eléctricas.

—Entonces tendrías que matar a tu madre también —menciona Wo Fat.

—¡¿De que estas hablando?!

—De que tu madre es responsable en gran parte de lo que soy —respondió Wo Fat.

— ¡Deja de hablar en círculos! —grito Steve y como respuesta Wo Fat volvió a darle otra descarga eléctrica.

Wo Fat quien también estaba algo frustrado por no tener nada de Steve, tomo una cubeta, la uso de asiento y se sentó frente a Steve.

—Tú no conoces a la verdadera Doris McGarrett —insinúo Wo Fat. — ¿Y tu si?

— Sé... que ella fue asignada para matar a tu padre. Pero en lugar de eso, tu madre murió en esa operación. —Respondió Steve con poca fuerza.

— Sí. —repuso Wo Fat, quien sabía exactamente de lo que Steve estaba hablando— Y nunca se perdonó a sí misma por matar una mujer inocente que acababa de convertirse en madre primeriza. Ese dolor y esa angustia la llevaron a hacer algo bastante... notable. Ella acogió a ese niño y lo crió como si fuera suyo durante varios años. Hasta que sus superiores descubrieron esto... y la obligaron —un suspiro cargado tal vez de nostalgia salió de Wo Fat. Tal vez nostalgia, tal vez rabia...—... La obligaron a abandonar a ese niño.

—Y ese eras tú —dijo Steve

—Doris McGarrett también era mi madre. Así que si Doris supiera dónde estaba mi padre, me lo habría dicho. Pero con su persistencia, no puedo evitar creer que sabe dónde lo tiene retenido su gobierno.

—Yo no sé donde esta

— Eso puede ser cierto. Pero necesito que me convenzan —dijo Wo Fat y se levanto de su asiento. Este le dio una última mirada a la mujer como ordenándole algo que Steve aun sabía y salió.

Steve sabía lo que vendría, pero aun había mucha fuerza interna, por lo que esa era su oportunidad, y cuando pudo, la tomo. Al punto que su captora, había sido derribada, y ahora parte de su plan personal.

...

Cuartel General Five-0

—Si Kavner, ya se... Blah blah "estoy harto de ti" blah blah "odio a tu equipo de desastre". Ya se me el discurso, ahórratelo y ayúdame por favor —decía Diane a su teléfono. Esta consciente de lo que iba a encontrarse, pero el tiempo pasaba y mas que el nombre "Anthony Shu" no tenían y ya comenzaba a desesperarse.

Además de la ansiedad de no saber de Steve los efectos del sedante aun no se iban, a veces se mareaba demasiado o simplemente todo lo veía borrosos, lo que lo hacía mucho más frustrante pues se sentía estar trabajando a medias.

— ¿Kavner va ayudarnos? —pregunto Danny al ver salir a Diane de su oficina.

—Está en eso —respondió ella. — ¿A dónde fue Sang Min?

—Lo enviamos a la HPD mientras encontramos a McGarrett ¿Por qué? —dice Grover.

—Acabo de leer que ese hombre es básicamente parte de su historia como equipo de trabajo ¿seguro que les dijo todo lo que sabe? O guarda información para intercambiarla con ustedes.

—Sang ha sido un criminal por mucho tiempo, y lo conocemos bastante bien. Desde que fue arrestado por nosotros la primera vez su popularidad ha bajado, por lo que lo que nos dice es lo poco que le queda. Nadie confía en un criminal que fue atrapado por nosotros —responde Chin.

—Yo no subestimaría a un tipo como Sang, es imbécil pero no demasiado —repuso Diane y de pronto por las puertas del cuartel estaba entrando Adam.

—Oigan creo que es donde esta Wo Fat —Dijo y tanto Diane como el resto voltearon a verle, era lo mejor que habían escuchado en el día.

— ¿Dónde? —pregunto Diane.

La conexión de la familia de Adam con los Yakuza había sido el perfecto match para obtener lo que necesitaban para encontrar a Steve.

Por lo que en esta realidad, por un lado estaba Steve luchando por su vida con Wo Fat, y del otro estaba Diane y el resto de su equipo, luchando por encontrarle con vida.

Makaloa era un lugar algo alejado de la ciudad, y donde se encontraba escondido Wo Fat una gran fábrica que tenía muchas cosas haciéndose. Diane, Grover y Danny iban al frente, mientras que Chin, Kono, y un equipo especial de la HPD iban cubriendo todo el lugar.

A través de unos pasillos y algunos pasadizos dentro de la fábrica, Diane, Danny y Grover se adentraban a buscar a Steve, de la nada uno de los hombres de Wo Fat pudo reconocer que eran policía y quiso atacarlos, pero sin darle chance alguno, ya Diane lo había noqueado con la culata de su rifle de asalto, no sabía si era la adrenalina pero estaba de vuelta en todos sus sentidos.

Diane cargo su arma y lo siguiente era que dispararía a quienes estuviesen frente a ella. Ciertamente fue necesario porque los hombres de Wo Fat al desplegarse comenzaron a disparar.

Después de tanto buscar, el lugar que buscaba estaba frente a ella, sin temor alguno abrió la puerta y lo que vio le aterro. En un piso completamente mojado había tres cuerpos, y uno de ellos era el de Steve.

Le grito a Danny a Grover que lo había encontrado y corrió hacia él.

— ¡Steve! ¡Steve soy yo, despierta! —a los pocos segundos también estaban llegando Danny, Grover y el resto del equipo.

— ¡Steve! —le llamo de nuevo y esta vez Steve reacciono.

—Esta bien mi amor, estarás bien, ya te encontré —le dijo Diane inconsciente de sus palabras.

— ¿Dónde está mi padre? ¿Mi papa donde esta? —pregunto desorientado y Diane miro a Danny confundida.

—Tu... Tu papa murió hace año amigo —y aquella frase fue casi imposible para Danny decirla, y mucho mas al ver que la reacción de Steve fue llorar al oírla.

—Salgamos de aquí —ordenó Diane quien también tenía un nudo en la garganta al ver a Steve así

The Queens Medical Center.

Durante el trayecto hacia el hospital Steve permaneció callado, hasta que simplemente se dejo ir y cayo inconsciente. El equipo se había instalado en el hospital, hasta que unas horas después informaron que Steve estaba bien, Grover, Chin y Kono decidieron irse a casa. Diane había básicamente obligado al personal a que la dejaran estar con Steve solo por unas horas con la falsa promesa de que se iría pronto. Pero eso no paso.

Steve seguía dormido, y de la cabeza de Diane no salía aquella imagen donde podía ver como Steve sufría por la pérdida de sus padres. De inmediato recordó, que incluso ella también podría causarla tal dolor, pero si algo era seguro, es que no era el momento para algo así.

Danny que también estaba aun en el hospital, estaba de regreso y en la habitación de Steve.

—Ten, se que va a ser imposible que te vayas a casa, así que te traje algo de café y comida—dijo Danny.

—Me conoces muy bien —dijo ella tomando la bolsa con la comida y el café.

— ¿Ha despertado?

—No aun nada. Pero el médico dijo que estaba bien —dijo Diane y puso su mano sobre la Steve acariciándola.

—Bien, estaré afuera entonces.

—Oye, ve a casa de acuerdo... Debes descansar también, yo me quedare con él. Créeme esta vez estaré alerta.

—Sí, siempre dicen eso y luego ambos están en problemas. Razón primera por la que no los quería juntos, pero supongo que no puedo hacer nada contra eso ¿no? —Dijo Danny señalando que Diane aun tenía tomada la mano de Steve. Ella rodo sus ojos intentando cubrir el hecho de que se había sonrojado.

—Solo vete a casa Danny —Dijo Diane.

—Ok, de acuerdo. Te llamare cada hora ¿de acuerdo? Cuida a mi muchacho.

—Lo cuidaré.

Danny se había ido y unas horas después Diane sin querer se había quedado dormida recostada a la orilla de la cama, fue el movimiento de Steve lo que la hizo despertar.

—Ey —saludo ella con una sonrisa. — Me alegra verte de nuevo Marine

Y Steve sonrió, hacia mucho que no escuchaba ese apodo.

—Estas bien —dijo el apretando su mano—creí que Wo Fat también te tenia.

—No, no... Yo estoy bien, solo me durmieron y me dejaron en el auto. Por eso estabas en desventaja, porque no me tenías a mí —Dijo ella divertida y Steve sonrío.

—Puede que tengas razón.

—La tengo.

Steve se removió en su cama y sintió algo de dolor por lo que se quejo. Diane se levanto y se ofreció ayudarle, entre todo eso Diane pudo observar que mas allá del dolor físico que sentía Steve, también había uno interno, ese del que no habla casi.

— ¿Así está bien? —Pregunto ella acomodando su almohada y este asintió— ¿Sabes que es lo mejor de ti y de mi?

— ¿Qué? —pregunto Steve algo curioso, pensaba que solo era Diane tratando de animarle.

—Que ahora podemos contarnos todo, además de Danny, en ti siento mucha confianza y seguridad al decirte las cosas. Y quiero creer que tú también, así como seguro tuviste que contarme de nuevo sobre tu madre, sobre tu padre, sobre Freddy... Sobre todo lo que olvidé de nosotros. Así que cuando quieras, puedes decirme que paso ahí ¿Si?

Steve solo sonrío y le hizo espacio a Diane en su cama, por lo momentos, solo quería tenerla ahí con él; después le diría todo lo que sucedió. Quería decirle que ella también era un lugar seguro, y que justo ahora esta más que agradecido que ella estuviese ahí, pues siempre sintió que Diane era una pieza que encajaba perfectamente con él. No por lo que todo el mundo piensa, sino porque Diane a pesar de muchas cosas no sentía miedo de decir lo que sentía. Tal vez era comedida pero siempre podía decirlo, y era una cualidad que Steve admiraba en ella, y que debía hacérsela saber cuándo fuese el momento.

Diane se acostó a su lado, Steve, la abrazo y en el momento en que su cabeza estuvo sobre su pecho y sin decir nada más le dio un beso en la frente y la apretó un poco contra él. Algo era bastante seguro, y es que justo en ese instante, ambos eran un lugar seguro para el otro.

Alohaaa!!! Muchos besos, los tkm chicos.

Como siempre

Mahalo por leer :*

Con Amor D.A BLaez

Continue Reading

You'll Also Like

584K 47.8K 167
~SINOPSIS DE LA 1ª PARTE~ Anya Forger, la adorable y telepática niña, se ve envuelta en un enredo de rumores junto con Damian Desmond, el hijo del pr...
111K 2.9K 28
la tipica historia de universos viendo otros universos atraves de pantallas flotantes que aparecerán en sus mundos aunque también agregare otras cosa...
892K 93.7K 139
1era y 2da temporada ♥️ Sinopsis: En donde Jimin es un Omega mimado y Jungkook un Alfa amargado, los dos se casan por sus propias conveniencias. ⚠️...
295K 20K 93
Todas las personas se cansan. Junior lo sabía y aun así continuó lastimando a quien estaba seguro que era el amor de su vida.