“No quiero Li, me siento mejor así sin saber nada del mundo exterior” le interrumpió el menor con el ceño fruncido. “Además no lo necesito, porque mi mundo está justo aquí entre mis manos” concluyó con una sonrisa radiante, acariciando su vientre.



Liam sólo le sonrió y no dijo nada más, se fue después de unos minutos hacía su trabajo, no sin antes darle un beso en la frente y otro en la pequeña prominencia redonda de su vientre.



Ésta era la primera vez que se quedaba solo en mucho tiempo, y al estar solo con sus pensamientos, Harry no pudo evitar pensar en aquello que había estado tratando de alejar de su mente desde que despertó en el hospital después de su accidente.



No podía creer lo mucho que Liam le había ayudado y cuidado todo este tiempo, se había mostrado tan cariñoso con él y con su bebé. A Harry le sorprendía el enorme cariño que demostraba Liam con la pequeña criatura a pesar de que no era su verdadero padre. Con tristeza empezó a recordar las palabras que Zayn le había dicho la última vez que se habían visto.



"No te creo, lo siento si suena mal, pero ya no te creo Harreh. Si es que estás diciendo la verdad, entonces emm... quiero una prueba de ADN cuando nazca. Y sobre nosotros, ya no sé si quiero esto... Por mucho que te ame, no sé si es lo mejor que sigamos juntos..."



¡Le había pedido una prueba de ADN! Eso demostraba que de verdad no le creía nada de nada. Y eso dolía demasiado. Eso demostraba que en realidad no le amaba tanto como le había hecho creer alguna vez. Su reacción había sido tan distinta a la de Liam, que se cuestionaba si había llegado a conocer la persona que era en realidad.



"¡TÚ NO ERES EL PAPÁ, LIAM!"


"¡Ya lo sé! Pero no me importa. Harry yo te amo tanto que no me importa que ese bebé no tenga mi sangre. Es tuyo y eso me basta para quererle. Piénsalo Haz..."



En cambio Liam, no había dudado ni un segundo en aceptarle y ofrecerle amor a él y a su bebé, Harry creía que eso decía mucho sobre quien era el que le amaba de verdad y por eso, aunque él estuviera enamorado de otra persona, estaba decidido, después de pensar mucho, que debía elegir a Liam, y tal vez debería darle otra oportunidad a su matrimonio.



Si algo le había demostrado el mayor, en los últimos meses era que le amaba de verdad, y que había cambiado mucho como esposo y como persona. Ya no inventaba excusas para salir, ya no estaba distante, parecía que genuinamente toda su atención estaba solo en Harry y su bienestar. No había salido huyendo en cuanto las cosas se pusieron difíciles, y nunca le había empujado para que el rizado se alejara de él, así como Zayn lo había hecho.




Después de pararse como todo un experto, saltando con un pie llegó hacia sus muletas, aunque al principio se le hizo muy difícil y doloroso ahora era todo un profesional en el arte de usarlas. En su última visita al médico hace un par de días, el doctor le había dicho que la recuperación de su pierna estaba yendo mejor de lo que había anticipado, y que lo más probable es que le quitarían el yeso en menos de dos semanas.


Harry no podía estar más emocionado y realmente no podía esperar a que las dos semanas pasen lo más rápido posible, sin el yeso en toda su pierna su vida volvería a ser tan fácil como antes y eso era lo que más quería en esos momentos. Pero lo que más le emocionaba era que, después de que le quitarían el yeso, podría hacerse, por fin y por recomendaciones del médico de quitárselo primero y esperar a su vigésima semana de embarazo, el ultrasonido que revelaría el sexo de su bebé, la idea le emocionaba tanto que no podía parar de sonreír.




El sonido del timbre de la puerta principal sonó interrumpiendo sus pensamientos, con cuidado se dirigió a recibir a su mejor amigo, con quien por fin podría pasar algunas horas a solas, ya que, a pesar de que se habían visto varias veces desde su accidente, siempre habían sido visitas breves y la presencia de Liam había evitado que tuvieran una verdadera conversación.

Mío o de nadie. >> ZARRY LIRRY << M-PregWhere stories live. Discover now