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Madison Clayton

Me encontraba afuera de la escuela de Cailin esperándola.

Por un segundo mi mirada fue al cielo y mire un avión que pasaba.

¿Habrá llegado? – pensé ya que no sabia nada de Alexander.

No había recibido ni una llamada de él dejándome saber que había llegado bien

-Mami- la escuche gritar y cuando la mire ella venía corriendo con sus dos trenzas que le había realizado hoy en la mañana

La tome en brazos mientras la abrazaba.

- ¿Qué tal tu día princesa? – camine con ella hasta uno de los autos que tome prestado de Blake

- Bien, hoy tuve una estrella- marco el numero uno con su dedo

-Eso es muy bueno- bese su mejilla para sentarla en su silla

Ella continuaba contándome de todo su día mientras conducía hacía la casa de Jonathan en donde estaba mi hijo.

Cuando llegamos me baje del auto junto a Cailin.

Iba de la mano con Cailin para tocar la puerta, pero esta se abrió antes.

Jonathan me miraba preocupado.

El tenía a Leo en sus brazos, pero no me decía nada.

-Me lo llevare- señale a mi hijo al cual tome

El solo me miraba y no me decía nada.

- ¿Todo bien? – ya me estaba preocupando

-Ve a la casa de Blake allá nos vemos- susurro para cerrar su casa

No es que le hiciera caso, pero como quiera tenía que ir allá.

- ¿Qué le pasa? – Cailin miraba a Jonathan que nos miraba desde lejos

-No se- sonreí mientras la sentaba en su silla

Luego volví a tomar a Leo para darle la vuelta al auto y sentarlo en donde le correspondía.

Podía ver a Jonathan desde el cristal de Cailin hablando por teléfono y no se miraba bien.

Quizás termino con Hannah o pelearon – pensé

-Te veo allí- hable duro para subirme al auto

Conduje con cuidado mientras que en el auto se escucha uno de los disco favorito de Cailin.

Mi celular sonaba, pero como no sabía en donde estaba no podía responder.

Cuando llegamos a la casa baje a mis hijos con cuidado.

Cailin fue la primera en entrar con su mochila.

Leo caminaba un poco torpe, pero logro entrar por si solo.

Me asegure de dejar el auto cerrado y entre a la casa.

-Mami estoy haciendo las tareas y luego me baño- me miro Cailin mientras sacaba sus libreta

-Muy bien- bese su frente para mirar donde estaba Leo

El se había sentado en la esquina de la sala con unos juguetes.

Fui a la cocina para cocinar y me acorde de que tenía llamadas perdidas.

Saque mi celular de la cartera, pero al encenderlo se apago.

-Perfecto- me queje para subir a la habitación de Alexander

Rápidamente su aroma me invadió.

Mr. Alexander BlakeWhere stories live. Discover now