Mr. Alexander Blake

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Alexander Blake

Cuando llego a mi lado caminamos juntos.

No sabía si tomar su mano o no.

Al llegar a mi auto le abrí la puerta como todo un caballero

Me subí y arranqué el auto.

Mientras conducía sin rumbo tome su mano.

- ¿Pasa algo? – la escuche preguntar mientras sentía su mirada sobre mi

Simplemente negué mientras continuaba conduciendo.

Quería ir a un lugar tranquilo en donde estuviéramos solo nosotros.

- ¿A dónde vamos? – pregunto mientras subíamos por un camino hacia una montaña

-A un lugar tranquilo- sonreí mientras mantenía mi mirada en el camino

Todo el camino era hermoso.

Cuando llegamos al lugar en donde quería me estacione y me baje.

-Dios- ella miraba toda la ciudad que estaba a nuestros pies por así decirlo.

-De noche es más hermoso, pero no podía hoy venir a esa hora- me recosté de mi auto mientras la tomaba de su cintura para hacerla recostarse contra mi cuerpo.

- ¿Por qué estamos aquí? – se giro para mirarme

-Tengo un viaje- coloque mis manos en sus caderas mientras la miraba

- ¿A dónde? – ella paso sus manos por mi cuello

-No se- sonreí sincero

-Te gusta como me veo- señale la corbata

-Estas precioso- sonreí

- ¿Puedes cuidar de Cailin mientras estoy de viaje? – pregunte con cierto miedo

-Claro- sonrió mientras se giraba para ver el paisaje

- ¿Cómo sabias de este lugar? – la abrace para tenerla cerca de mi

-Cuando me entere que seria padre vine aquí confundido y se convirtió en mi lugar para reflexionar – subí mis hombros como si fuera normar

Nos quedamos unos minutos admirando la ciudad.

-Te dejare una tarjeta que puedes utilizar para todo lo que necesiten- le mostré la tarjeta negra que no tenia limite de gasto.

-Tranquilo tengo dinero- ella no tomo la tarje mientras me miraba

-Preciosa tu eres dueña de todo lo que tengo- ella se giro sorprendida

-Solo soy la madre de tu hijo- sonreí al ver que ella no entiendo lo que decía

- ¿Quieres ser mi novia y más que eso? – la pegue más a mi cuando me miro sorprendida

-Así y ya- sus ojos se llenaron de lagrimas

-El accidente me hizo recapacitar y no puedo estar todo el tiempo enojado contigo por el tema de Leo. Se que no hubo una comunicación correcta entre nosotros, pero no quiero perderte hermosa- seque una de sus lagrimas que se habían escapado de sus ojos

-Si quiero- susurro mientras sollozaba

La abrace mientras la sentía llorar.

-No sabes como sufrí de pensar que no te tendría a mi lado- intentaba calmarla, pero ella lloraba con mucho sentimiento

La tome de sus mejillas y la bese como tanto deseaba.

-Pensé que ya no te gustaba- reí ante su comentario