me enamore de ti

capitulo 7 ebrio (sesshomaru)

Después de que había contratado aquella joven, había tenido otro ambiente esa casa, ya no era solitaria como antes: a pesar de que los sirvientes estaban ahí. Ya no era silenciosa era un poco más ruidosa que antes. Ya no había ese ambiente frió que sabia rodear a su alrededor: era un poco más cálido que antes y algo acogedor. Ya no había esa inseguridad y miedo en los empleados: ahora había un poco de alegría. Ya no veía a sus mascotas correr para no estar escuchando sus gritos: llegaban a él moviendo la cola con la lengua afuera. Ya no tenia que estar aguantando las quejas de su esposa: pues ella estaba todo el día de fiesta.

- *desde que ella llego todo a sido diferente* - pensó mientras estacionaba su ferrari, entregándole las llaves al conductor - *paso dos semanas desde que vive aquí y todo a cambiado* - pensó mientras se zafaba la corbata y entraba a su habitación encontrando a aome sobria - que sorpresa verte querida - dijo haciéndose notar el sarcasmo de su voz.

- buenas noches querido, me alegra verte a ti también - contesto. Sesshomaru no dijo nada y atendió una llamada, cortando al mismo tiempo la llamada mientras soltaba un suspiro de cansancio.

- me voy a tomar unas vacaciones - le escucho llamando la atención de sesshomaru.

- bien - contesto mientras se acostaba con la mirada arriba - mañana por la mañana te vas de viaje - sin decir nada más se quedo dormido.

A la mañana siguiente sesshomaru se quedo parado en frente de la ventana mirando la figura de la joven que estaba sentada en las hiervas con el perro en el regazo de ella.

- ¿me mando a llamar señor? - escucho la pregunta de suzu.

- si... dile a chica que venga a mi habitación - contesto sin moverse de su lugar.

- como usted diga - asiendo una leve reverencia salio de la habitación entrando al mismo tiempo su esposa.

- bueno a empezar - le escucho pero no se volteo, solo se quedo mirando la ventana del segundo piso, mirando como su criada le llamaba a la joven y esta se paraba empezando a caminar.

Sin ser consciente tenia una sonrisa de lado, escuchando como llegaba ella y su mujer se iba al mismo tiempo, sin apartar su mirada vio como aome se iba dejando la casa y todo, sin moverse dejo en claro que ella iba a dormir a lado de él, desde ese día y todos los días hasta que el bebé nazca, pero cuando escucho la protesta de ella se dio la vuelta y la encaro dejandole en claro que él era el que mandaba en ese lugar, y que todo se hacia al pie de la letra. Cuando bajo su mirada sintió el temblor de ella, algo dentro de él quería probarla, saber a que sabe sus labios, escucharla gemir su nombre, sentirla dentro... pero mejor se hizo aun lado y se fue de ahí antes de hacer una idiotez.

Desde que su mujer se fue y su incubadora se quedo a dormir a lado de él, todo se fue iluminando con cada segundo, paso un mes desde que todo estaba tranquilo, un mes desde que ella dormía a lado de él, se dio cuenta de que ella tenia el sueño pesado, pues había descubierto su vientre un par de veces y acariciado esa zona con cariño,sintiendo como aun seguía plano, pero no tanto como antes y cuando ella empezaba a despertarse el se levantaba y se iba a trabajar sin comer un bocado. Un día se había quedado dormido de más, sintiendo el dulce aroma de la comida se fue levantando medio dormido y se vistió con su típico traje y fue bajando hasta ver la silueta de ella.

- *mujer terca* - pensó mientras se acercaba a ella, la había regañado un par de veces por hacer eso, pero ella seguía con lo mismo, sin hacerle caso, eso le desesperaba de alguna forma, llegando atrás de ella con intenciones de regañarla, su cuerpo y sus manos se movieron por impulso abrazándola poniendo sus manos en el vientre de ella sintiendo lo poco abultado que estaba, eso le extraño, pues cuando tocaba su vientre siempre estaba algo plano, pero después se aclaro cuando se acordó que estaba acostada baca arriba, eso podia explicarlo - a crecido - susurro sintiendo como ella no se movía de su lugar. 

Sin permiso de él, sus manos empezaron a entrarse dentro del abrigo de ella sintiendo la textura de su piel, eso hizo que quisiera tocarla más, a pesar de que ya lo había echo antes, de esa forma se sentía diferente, distinto, pero se regaño por dentro y se alejo de ella rápidamente mientras decía que iba a llegar muy noche.

Conduciendo se iba a la empresa para poder acabar con todo de una vez, llegando solo encontró problemas, discusiones, protestas, ruido, desacuerdo, un caos total, tuvo que respirar muy fuerte para no tener que matar a esos hombres que solo decían puras tonterías, arreglando así con la otra empresa, se cerro el trato. Soltando un suspiro miro la hora en su reloj y noto que se había echo muy noche, saliendo se fue a tomar un par de copas y conduciendo su auto estaciono y salio para luego ir a su habitación a descansar.

- *ya debe de estar dormida* - pensó mientras entraba a su habitación sigilosamente. Y aserto cuando vio el bulto en su cama. Con intenciones de dormir se saco la ropa y se acostó a lado de ella, mientras en volvía sus manos en la cintura de ella, pero frunció el ceño al ver como ella se movía para tratar de alejarse de él - quédate quieta... - susurro mientras quería tenerla cerca.