[3326] palabras. Esto me costó unas 6 horas. Iba a ser más largo pero al final recorté partes para dejar lo más importante. Espero que tengan el tiempo para leerlo tranquilamente.
Gracias por leer. ♡
• Omnisciente
La manada seguía en pánico. ____ no daba minguna señal de vida hace más de 20 min, ¡Ni siquiera respiraba! Cualquier persona normal diría que ya se había ido... pero ellos no. Tenían miedo, sí, en el fondo sabían que iba a despertar como si nada, típico de ella.
Su novio Scott era consolado por Stiles camino al hospital. Malia no supo de qué manera decir la noticia, estaba asustada.
—¡Está muerta! —Gritó la mujer coyote y al instante Lydia se puso en frente. Scott sentía que él iba a morir también.
—No, no está muerta. —Dijo apretando la mandíbula. —Aún...
—¿Es en serio? Tengo que verla. Ya sabemos que no puede morir. —Trató de convencerse a si mismo. —¿Verdad?
—Esa cosa estuvo a nada de arrancarle la cabeza.
—Dios, debí estár ahí. —El Alpha podía sentir remordimiento. Estaba apenado.
—Como siempre, llegas tarde.
—¿Qué quieres decir?
—Nada...
• Narrado en primera persona como _____
Reía con Lydia por como nuestra chica coyote intentaba golpear a un tipo que apenas habiamos conocido, y no teníamos la intención de conocerlo más. Estaba borracho y venía detrás diciendo algunas cosas. Al principio nos dió miedo pero apenas podía caminar. Su última palabra fue "Lindo trasero" Malia se dió la vuelta y ahí comprobamos que no era un tipo mayor. De hecho, era de nuestra edad.
Lydia y yo nos miramos con una cara de "Ay, no. Otra vez no" La tomamos de los brazos riendo por su cara, el pobre iba a terminar muy mal.
—¡No! ¡Dejenme! ¡Voy a partirle la cara!
—No sabe lo que dice. Créeme. —Recordé que era el chico del año pasado. Este no era él, obvio.
Abrimos los ojos cuando comenzaba a transformarse, Lydia me miró buscando alguna señal pero solo negué.
—Ya debemos irnos. —Arrastré las palabras nerviosa. —Tú ve a darte un baño. Apestas. —Dije por último al chico, él rió y se fue.
—Mírate, estás casi transformada. —Malia puso una cara tierna expresando que se sentía apenada. Puse mis ojos en blanco y luego volvimos a lo nuestro, riendo por lo ocurrido hace 5 min.
Las risas fueron opacadas por gritos provenientes de una cafetería. Todos allí corrian desesperados, no sabían a donde huir. Nos miramos asustadas pero a la vez con el morbo de saber en vez de salir corriendo. Lydia tomó mi brazo pero fue arrastrada conmigo a pesar de que debía ser al revés. Malia estaba neutral, parecía acostumbrada. La dí media sonrisa con el ceño fruncido.
—Qué. Demonios. Es. Eso. —Lydia se puso detrás de mi, yo aún no lograba ver nada.
Aquella cafetería estaba destrozada, la luz apenas podía alumbrar al encargado, su cara era un enigma completo. Estaba quieto, intentando contener la respiración y ahí en la oscuridad, unos ojos acechan.
Malia me miró con terror, no era para menos. Apunté con la cabeza al chico y ella asintió.
Lydia seguía detrás, no tuve otra opción que alumbrar el lugar con un poco de mi "Don"
Mis manos eran consumidas por un fuego resplandeciente color violeta junto a mis ojos. Ya podía ver con claridad.
Observé el lugar casi dado vuelta junto a un cuerpo. No me animé a acercarme, todo pasó tan rápido.
