Dès vu

9.5K 471 943
                                    

"Y cuando me mires, te darás cuenta de que aun cuando mi corazón era pequeño en él había amor

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"Y cuando me mires, te darás cuenta de que aun cuando mi corazón era pequeño en él había amor..."

Suavidad y vacío...

Jin dormía enredado en medio de las suaves sábanas que le cubrían parcialmente su piel desnuda, entre sueños estiró su brazo, una búsqueda instintiva, pues sentía que "algo" le hacía falta.

Su ceño se frunció poco a poco hasta que sus ojos se abrieron con ligera lentitud, ¿dónde estaba? Desorientado observó el lado libre del colchón y sus ojos perdieron el cansancio cuando se dio cuenta de que sí estaba acompañado, al menos parcialmente, pues el alfa estaba a punto de caer al suelo, su cuerpo apenas era sostenido por unas cuantas sábanas y Jin sólo era capaz de ver el inicio de su espalda baja.

– Dioses Kook...– Susurró con ligera queja y preocupación.

¿Cómo había terminado así?

¿Cómo es que aún no caía?

Con dificultad se movió y como pudo jaló a su alfa quien ni siquiera se inmutó ante su agarre, cuidadoso para con su hombre y para con su propio cuerpo le terminó por arrastrar y recostar en el colchón, finalmente le observó... y sonrió mientras negaba. – Tan inquieto para dormir, ¿qué si te caías y lastimabas tu hermoso rostro? ¿Hubieras querido despertar producto de un golpe?– Le riñó con ligereza y amor mientras pasaba una de sus manos por el cabello ajeno, peinando aquellas hebras cafés que tanto le gustaba acariciar, hasta que formaba "mejor" las pequeñas ondas que se hacían en los cabellos de su alfa.

Miró aquellas fuertes facciones ligeramente relajadas y su expresión se embebió aún más, sí, era por eso que cuidaba tanto del sueño ajeno, por la paz que ocasionalmente reflejaba, por la satisfacción de verle descansar sin deambular entre pesadillas o sueños complicados... el saber que era bueno para ese hombre llenaba algo en él.

Con suavidad pasó su dedo índice por las cejas que tan bien enmarcaban el rostro de su alfa, usó el dorso de su mano para acariciar sus pómulos y marcada mandíbula, se enterneció profundamente al ver aquellos labios fruncirse en un expresión que el mayor solía hacer al dormir, muequitas esporádicas que le indicaban la veracidad de sus imaginaciones nocturnas y de su habladuría que seguro en sueños defendía, no se cansaba de contemplarle, su dulce alfa.

– Te amo. – Terminó susurrando. Y es que aquello se sentía tan fuerte en su pecho, que... reconocía en la simpleza el encanto, encontraba en su naturaleza descanso y en lo normal hallaba deleite.

¿Qué si era malo embeberse de esa manera por alguien? Probablemente sí, pero todas las buenas razones se convertían en ceniza si las enfrentaba con su corazón, llegando a la conclusión de que simplemente no tenía suficiente de ello. Ese hombre bueno o malo fue hecho para él. Los dioses le habían creado asombrosamente para él... y agradeció aquella dádiva.

Just One Belief [Kookjin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora