Epílogo

10.7K 449 49
                                    

-J'ai besoin d'un café, s'il vous plaît  -pedí a mi ayudante un café. Estaba agotada del día ajetreado en el trabajo. Necesitaba cafeína en mi organismo sino no podría continuar, me sentía un poco cansada pero eso era algo normal de estos últimos días. Aparte de que tenía un humor de perros.

Mi esposa y yo habíamos tomado la decisión de tener una pequeña criatura, un bebé. A lo primero pensamos en adoptar pero, hablé con ella y le dije que podríamos hacer la prueba, que yo portaría al bebé. Ella celebró ansiosa de que eso sucediera pronto pero los análisis finales de cada prueba, siempre daban negativo, no funcionaban.

Eso llegó a destrozarnos a ambas, teníamos las ilusiones de poder tener un pequeño niño o niña  y aunque los últimos tres intentos no funcionaron, espero que este, el cuarto, pueda darnos la felicidad que quisiera en ese ámbito de ser madre.

La ayudante llega con un vaso de café a lo que agradezco.

Hace cuatro años que vinimos a vivir a Francia y el día de hoy, Daniela y yo cumplimos nuestro primer año de casadas. Mi humor se debe a ello, a que Daniela, al parecer, no recuerda que hoy es nuestro aniversario.

Al despertar, le había dejado el desayuno con un ramo de flores y un portaretrato de nosotras de los días que estuvimos en Colombia. No dejé ninguna nota, le coloqué un "Te amo un universo entero, ¡Feliz aniversario!" dentro del ramo de flores. No pude despertar con ella ya que mi trabajo me lo impedía pero había pedido salir un poco más temprano de lo usual. ¿Mi humor? Es que no haya recibido ni un mensaje de Daniela en lo que llevo de día. Salí de la casa a las ocho de la mañana y ella saldría a las nueve, actualemente son las dos de la tarde y no he recibido ni las buenas tardes de su parte.

Me restaba una hora de trabajo a lo que sería una hora más de tratar mal a las modelos. Era una fotógrafa algo reconocida actualmente y me habían contratado para una sesión de fotos para unas modelos de la marca "Louis Vuitton".

Le había gritado a tantas modelos que dos terminaron llorando. ¿Muy cruel de mi parte? Sí .

¿Podría ser despedida?
Probablemente.

¿Me importaba?
¡Un carajo me importaba!

Decidí tranquilizarme un poco, ellas no tienen la culpa de que mi esposa no recordara nuestro aniversario y bueno, creo que me pasé de la raya con ellas. Las llamé para agruparlas y pedirles perdón a todas, principalmente a las dos que estaban derramando lágrimas. Les conté la situación y aunque no fuera una excusa, me entendieron. Regresamos a las sesiones hasta que fueron las tres de la tarde.

Salí del edificio de la marca y me dirigí a un Mustang, mi auto. Cuando pensaba salir del parqueadero, escucho mi teléfono con una notificación, lo busqué ansiosa esperando que el mensaje sea de ella.

Y no.

No era de ella.

Tomé una respiración y comencé a teclear para contestar aquel mensaje pero ni bien pude terminar, en mi celular apareció una llamada entrante de la misma persona a lo que contesté de inmediato.

-Petite pétasse!, Qu'est ce que tu fais? C'est pas aujourd'hui ton anniversaire du mariage? -Traducción: ¡Pequeña perra!, ¿qué haces? ¿No es tu aniversario de bodas hoy?

Froté mi sien ante la emoción y confusión de mi amiga. Desde que conocí a Sofía Flores en una de mis primeras sesiones, esa modelo loca no ha dejado de ser mi amiga.

-Sofi, te dije que conmigo hablas español -a Sofía no le gustaba mucho hablar su idioma natal, dice que con el francés se escucha más "sexy" y el español sólo es para cuando salimos a fiestas, pero la estoy obligando a que lo hable más seguido porque prefiero hablar el español.

Llegaste sin avisar | CachéWhere stories live. Discover now