Llegaste sin avisar | Caché

6. Amigas

Saqué un poco mi cabeza e hize señal a Daniela para que se acercara, dudosa, se puso de pie y empezó a caminar hacía nosotras...

-Buenas tardes -dijo mirándonos a ambas -Hola señorita Galindo -dijo ahora refiriéndose a la rubia, prepárate para lo que te espera al haberle dicho "señorita". Me reí levemente.

-Danielita, por Dios, no me llames por "señorita" y menos se te ocurra llamarme por "usted" que la siguiente que te azotará contra una barra seré yo -dijo de forma "amenazante" hacia la castaña -Dime Paula, si eres la guardaespaldas de esta zorra pitufina -dijo refiriéndose a mí, me crucé de brazos e hice un puchero ante su referencia como "pitufina" ya que a la de "zorra" estaba acostumbrada - Eres mi amiga, ya que poder cuidar y mantener a raya a esta loca es todo un reto -dijo riéndose al verme en mi posición, Daniela me miró y se rió, lo hizo de una forma ¿tierna?, bueno no lo sé  -Y por favor, no te quedes ahí parada, toma asiento.

-Bueno, no es para tanto cuidarla... -dijo de forma suave que por un momento pensé que me cuidaba por que le daba la gana y no por que mi padre la haya contratado -Y Paula... -dijo bajando un poco la cabeza - Lo siento por lo que pasó en el club, no fué mi intención tratarte de aquella manera, la costumbre de estar alerta cuando una persona se acerca efusivamente a la persona que debo cuidar con mi vida -dijo mirándome y luego posó su mirada en Paula quien la miraba juguetonamente.

-Por Dios Dani, está bien, ya pasó, me desconcertó un poco aquel acto pero entiendo el por qué, tu tranquila... ¿Amigas? -preguntó la rubia hacia la castaña.

-Claro, amigas -dijo sonriente de forma sincera.

***

Pasó un rato y Paula ya se había ido, debía ir a preparar todo sobre la noche de hoy en su club, le dije que iría más tarde y simplemente asintió.

Ahora mismo me encuentro con Daniela, en el auto dirigiéndonos a casa, debía firmar unos papeleos del trabajo para luego irme al club.

Llegamos a casa y subo las escaleras para ir a mi habitación mientras Daniela dijo que iba a la cocina por algo de tomar y más tarde subía.

Entré a mi habitación y me senté en el escritorio que había allí, abrí una gabeta para empezar a sacar algunos papeles y firmarlos, cosa que no me tomaría más de 1 hora en hacer.

...

Terminé, guardo los papeles en donde se encontraban anteriormente y me pongo de pie, al darme la vuelta me doy cuenta que Daniela está allí recostada del marco de la puerta viéndome, tragué con fuerza, no sé desde hace cuanto está ella allí parada.

-Me asustaste -le dije -¿Cuánto tiempo llevas allí parada?

-Lo necesario para darme cuenta que cuando trabajas te olvidas del mundo -dijo riéndose levemente.

-Lo siento.. -dije bajándo la cabeza sintiendo como mis mejillas me empezaban a arder... ¿Pero que coño?, ¿Me estaba sonrojando?, hace bastante tiempo no me pasaba, lo más raro es que ni siquiera me sonrojaba por un alago, y Daniela decía eso ¿y de repente me sonrojo? Que carajos me pasa...

-Oye, no importa... Te quería preguntar si pensabas salir para prepararme -la miré, ya que sé que se refería al club.

-Emm... si si, iremos al club, ya mismo empezaré a prepararme, puedes hacerlo tu también, nos veremos abajo -ella sólo afirmó y salió de la habitación cerrando la puerta a su paso.

Dejé salir un suspiro y empezé a prepararme para ir al club, necesitaba un acostón urgente.

Minutos después ya estaba lista, llevaba un pantalón jean alto con los muslos raspados, un crop top blanco y una chaqueta del mismo color que el pantalón, me puse unos tenis Nike blancos para combinar, me mquille no tan excesivo, sólo lo normal y dejé mi cabello un poco ondulado gracias a la plancha que había usado, me miré al espejo y me veía bien, y al mirar mi trasero sonreí orgullosa, este pantalón me lo hacía ver más elevado... Decidí no llevar bolso esta vez, sólo un poco de efectivo, mi ID y mi celular.