INEFABLE

Capítulo 1🍷

Kira me había convencido de venir a trabajar con ella. Su trabajo no era del todo "decente" por así decirlo, pero a pesar se eso ella era una muy buena persona. Su situación económica la llevo a esto, pero según ella, todo mejoró para bien.

Todas las chicas estaban en su bañador de dos piezas, luciendo sus cuerpo envidiables. Mientras que los mafiosos de esta ciudad, se aprovechaban de sus cuerpos. 

Y aquí estaba yo, Maisie Wilde, vestida con unos jeans un poco holgados y una blusa de The Beatles. Yo era el lunar de todo este lugar, total, a mí me habían pagado solo por traer y llevar tragos. Todo este fin de semana seria así, gracias a Kira, la verdad tendría que agradecérselo, ya que ella y las otras chicas me darían un poco de lo que ganarían hoy para poder pagarme. La paga no estaba nada mal, en dos días hacia el dinero suficiente para pagarme la Universidad.  

—¿No quieres darte un chapuzón con nosotras?—me pregunta Kira.

—No, gracias, prefiero llevar y servir tragos—le respondo.

Me dedico a hacer mi trabajo. Voy y vengo lo más rápido que puedo. 

—¿Podrías traerme otro trago por favor?—escucho la voz de un hombre.

No me fijo quien es por lo rápido que voy por el trago.

—Aquí tiene, señor—le entrego el trago de whisky.

¡Joder! Este hombre está hecho por los mismos dioses del sexo. Bueno, creo que todos los presentes aquí lo están, quién diría que los integrantes de la mafia fueran todos unos dioses.

—¿Quién es ella?—pregunta el hombre a Kira.

—Se llama, Maisie, cariño.

—¿Y qué hace ella aquí?—su tono de voz se vuelve un poco severo.

No me agrada el tono con el que habla y más cuando se refiere a mí.

—Entre todas las chicas le pagamos para que nos sirviera las bebidas.

—Espero que no diga nada porque sino su bonito trasero estará tres metros bajo tierra—amenaza.

Eso me hace quedar totalmente helada. Debí haberme negado, pero necesitaba el dinero para poder pagar la renta, luz y agua, y no digamos la Universidad.

Yo suelo ser muy tímida con desconocidos, pero a pesar se eso junto el valor par responderle:

—No...señor, no...no diré...nada—las palabras apenas salen de mi boca.

Pensé que había reunido el valor suficiente pero veo que fracase.

El hombre solo asiente y yo procedo a retirarme del lugar.

Me coloco en el minibar en donde están las bebidas. Los vinos, whisky y vodkas más finos y costoso, tienen un lugar en este minibar.

Veo como un hombre toca demás a una de las chicas, cosa que me parece asqueroso.

El tiempo pasa muy rápido y algunos comienzan a entrar la mansión.

Conmigo traigo una mochila, en donde está mi ropa y mis libros de la universidad. Veo que tengo un poco de tiempo libre, así que es un buen momento para adelantar las tareas.

Había elegido estudiar Leyes, era una de las carreras más accesibles para mí  tanto como por el tiempo y el dinero.

Saco mi móvil de mis pantalones para poder investigar en google unas cosas, cuando siento algo frio en mi sien.

¡Mierda es una arma!

—Yo...yo no...hice nada—arrastro las palabras como puedo.

Trato de buscar con la mirada a Kira para que ella me pueda ayudar. Ruego a mis adentros para que ella aún este por aquí.

Por suerte, lo está.

—Déjenla, ella no está haciendo nada—se acerca ella con el hombre que me amenazó anteriormente.

—¿Entonces por qué tiene el móvil en la mano?—pregunta el hombre que está apuntando a sien.

Tener a alguien apuntando a mi sien no ayuda en nada a poder calmar mis nervios.

—Yo...yo...iba a...hacer la tarea.

El hombre parece relajarse.

—Ya déjala, Víctor, solo iba a hacer la tarea. No la mates por eso—dice el hombre que me amenazó.

—Eres muy exagerado, Asher.—le dice Kira, mientras le da una mirada llena de lascivia.

Así que Asher es el nombre del infeliz que casi da orden de matarme.

El tal Víctor y yo, en este momento hacemos un mal tercio, pero la piscina no es un buen lugar para follar.

Y lo dice una virgen.     

Me recuerdo a mí misma, ¿pero que más da? Yo no le veo importancia a algo como eso, ahorita mi prioridad es estudiar y cuidar de mi hermana. 

—Puedes seguir haciendo tu tarea, Maisie—me dice Víctor.

—Gracias, eso iba a hacer de todas formas—le respondo de mala manera.

Entiendo que ellos sean unos mafiosos, pero hay que tener algo se lógica para saber que una chica no arriesgaría su vida en la boca de todos los lobos.

—Tu amiguita ya se enojó, creo que si sería parte de la mafia, tendría el control de todo—halaga Asher, pero supongo que es para quedar muy bien con la mujer a la que se follará, Kira.

Definitivamente Asher no es de mi agrado.

¿Será qué habrá otra persona más odiosa que Asher? Lo dudo, pero mientras tanto, rezaré para no encontrarme con esa persona.

—Bueno, creo que es hora de irnos, Asher—dice Kira—. Estaremos en la segunda habitación del tercer nivel, por si necesitas algo, Maisie—me dice muy amablemente.

—Gracias, Kira, pero por el momento estoy....

No puedo terminar, porque una prepotente voz se escucha por el lugar.

—¡Asher! ¡¿Pero qué carajos estás haciendo?! ¡¿Qué hace esa extraña aquí?!—esto último lo dice de una manera mucho más molesta.

Genial, acabo de encontrarme con alguien mucho peor que Asher. Alguien déspota, odioso y arrogante.