Capítulo 30🍷

17.1K 1K 1.6K
                                    

BLACK

Despierto y la imagen que logran ver mis ojos es las más hermosa, la de una diosa de cabellos negros y piel como el oro. Sí, ella me encanta a tal punto que siento que me voy a volver loco. Sus párpados cerrados están adornados que unas largas y espesas pestañas, sus labios gruesos son el pecado puro de cualquier hombre.

Ella está completamente desnuda, la sabana solo cubre las partes que yo pude probar con mi boca

Comienzo acariciar su espalda, es una caricia suave, pero con el deseo que tengo por ella, en algún momento u otro esa caricia puede cargar toda la lujuria en cada toque.

Si pudiera decirle quién soy, quizás todo fuera diferente, si pudiera decirle la verdad, pero todo sucedió tan rápido. Maisie estaba en peligro y la única opción era esta, la conozco, y sé que si le hubiese acercado como una persona normal a decirle que la vida de ella y su hermana están en peligro, Maisie hubiera reaccionado muy mal y lo pero de todo es que no me hubiese creído.

No sé si quiero que ella descubra todos los secretos que rodean a su familia por ella misma, o se los digo yo, aunque respeto que es su familia, lo más sensato es que ellos se lo dijeran o que ella por iniciativa propia los fuera descubriendo uno a uno.

《Sensato: Una palabra que ni siquiera pueda estar en mi vocabulario después de tener cautiva a Maisie.》

Admito que lo que hice está mal, de hecho no tiene descripción alguna, es inefable, pero su vida estaba en peligro gracias al apellido que porta, aunque ni siquiera se tenga del todo seguro si realmente los Wilde son Wilde.

Es como un dilema o esa encrucijada que es muy difícil de resolver.

《Dulce Maisie, te condenaron desde que estabas en el vientre de tu madre, incluso antes de que planearan tu nacimiento.》

Ni siquiera yo sabía todo lo que se ocultaba detrás de los Wilde, ni cuando tuve la oportunidad de poder hablar con ellos, ni cuando mi padre lo hizo igual que sus socios o compañeros.

Maisie era ese tentador enigma que tenía que resolver.

Me encantó desde que la vi la primera vez, desde que una vez en jardín de niños me defendió de unos idiotas.

Y sí, quién iba a pensar que el grandioso Black iba a estar en problemas en la escuela.

Desde que la vi, yo sabía que ella iba a estar condenada por mí. Ella debía ser mía.

Pensar en esto me hace darme cuenta que lo que estoy haciendo está mal, muy mal. Necesito dejarla ir porque no se lo merece, no se merece ni mi condena ni la de su familia.

Yo puedo llevarla al cielo y luego bajarla al infierno para cometer todo tipo de pecados.

Ella es el tipo de misterio que todo hombre quiere resolver.

Antes de que ella despierte, me doy una ducha.

Supongo que ella tardará en buen rato en despertar, ya que ayer la dejé muy exhausta. De solo recordar sus gemidos siento como mi deseo sexual vuelve a aparecer, necesito calmarme antes de que haga algo de lo que pueda arrepentirme.

Salgo de la ducha y me visto para ir a traerla el desayuno mi dulce Maisie.

Camino por los pasillos hasta llegar a la cocina.

—Black—escucho la voz de Mary, la persona que me ha cuidado desde que era muy pequeño—, no crees que deberías de decirle a la joven Maisie toda la verdad.

Por su tono de voz, creo que me está regañando, y tiene razón al hacerlo.

—No es tan fácil, Mary, no desde aquel momento, si le digo todo jamás querrá volver a verme—le explico, algo decepcionado por la situación.

INEFABLE Onde as histórias ganham vida. Descobre agora