I'm not gay, bitch! [Jensen & Jared]

29. El hilo rojo del destino

N/A: Hola gente! Estoy muy agradecida de los votos y comentarios, gracias por ayudarme a revivir este fic que dejé tanto tiempo botado. (No fue mi intensión, es solo que tengo la mala costumbre de empezar varios fanfics a la vez y luego me da bloqueo xd) A los lectores fantasmas, gracias por las visitas xd 

Capítulo largo, así que espero lo disfruten, voten y comenten entre párrafos (esos comentarios son los mejores jaja) Byeee!

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—Oh Dios... Jensen, verdad? —dice la mamá de Jared, con una enorme sonrisa en la cara mientras se apoya en la puerta abierta y me observa de pies a cabeza. Yo intento imitarla con una sonrisa tímida, pero estoy seguro de que me veo como un completo idiota aterrado de conocer a los padres de su novio. 

Yo no hago "la cosa de los padres". Nunca antes me habían presentado. A ninguna de las chicas con las que salí pareció importarle meterme en su vida así. No sé como comportarme, no sé que decir. Y sé que debería ser fácil, después de todo, solo estoy fingiendo ser el amigo de Jared.

—H-hola —respondo titubeando y de inmediato debo aclarar mi garganta. —Si, yo... soy Jensen, Jensen Ackles, señora —saludo con mi mano libre. 

Con la otra, me aferro firmemente a la bolsa de papel donde traigo varios muffins de chocolate que a Jared le gustan tanto. 

—Oh no, —me frena la mamá de mi novio alzando las cejas. —No me digas señora. Soy Sharon, cielo. De otra forma, me haces sentir vieja... y no lo soy —bromea y río porque ella parece ser igual de enérgica y divertida que Jay. 

—Oh, ok. Lo siento —digo sonrojado, rascando mi nuca para intentar ocultar mis nervios. Dios, estoy siendo realmente patético.

—Mamá...

Mi rostro se ilumina por completo al escuchar esa voz y ver a Jared viniendo a mi rescate. Él me sonríe ampliamente cuando se para detrás de su mamá y debo evitar soltar una carcajada por el delantal de cocina, rosado y con... pequeños pollitos animados, que él está ocupando.

Es lo más adorable que veré hoy.

—Oye, no acoses a mis amigos —le ruega él, haciendo una mueca avergonzada, pero Sharon bufa divertida en respuesta y rueda los ojos. Yo vuelvo a reír por la situación. —Hola, Jen... Jensen —Jared se corrige a si mismo antes de levantar sospechas.

Intento disimular la sonrisa complice que quiere aparecer en mis labios.

—Hola, Jay —respondo feliz, sin ganas de querer ocultar el pequeño diminutivo de su nombre con el que ya estoy acostumbrado a llamarlo. Él es quien se sonroja ahora.

—Vamos, ¡Pasa, cariño! —dice la señora Padalecki, rompiendo el pequeño momento entre nosotros. —Jared estaba ayudándome en la cocina, estamos terminando de cocinar los bistecs —ella se mueve a un lado y hace un movimiento con la cabeza para invitarme a entrar. 

Respiro profundo llenando mis pulmones de oxígeno y luego doy un paso dentro de la casa de Jared. Todo luce cálido y hogareño. De inmediato me siento bienvenido.

—Dime, Jensen. ¿No crees que mi Jarpad se ve adorable con mi delantal? —ríe la señora de cabello castaño y rasgos idénticos a los de su hijo mientras lo abraza. Jared pone una nueva mueca de "trágame tierra" y sus mejillas se tornan rojas como si estuviera afiebrado.

Jarpad. Eso es nuevo.

—Los pollitos hacen juego con tu ojos, Jay —me atrevo a bromear y mi novio se voltea cabreado hacia mí mientras rueda los ojos. Luego él y su mamá siguen el camino adentrándose más en la sala, hacia la cocina.