Capitulo 17- Sumergida

669 103 93
                                    

Siento como si mi espíritu se fuera, es como si no pudiera sostenerme en mi cuerpo por más tiempo. Recuerdo la sonrisa de Lussy y eso me ayuda a regresar un poco, es eso o lo que sucede a mi al rededor, no puedo concentrarme en lo que hace que la criatura me suelte, pero puedo respirar de nuevo y mi cabeza casi golpea el suelo, pero unas manos fuertes me sostienen.

Tomo bocanadas grandes de aire y siento como mis pulmones se llenan, y como mi cerebro vuelve a hilar la situación.
Para mi todo pasó lentamente, pero en realidad todo sucedió en segundos y mi recuperación fue igual, la adrenalina ayuda después de todo.

Observó y la situación es la siguiente: La abuela de Noah recita una retahíla de frases en un idioma que no reconozco, que tienen dominada a la bestia, Noah se acerca a Lussy para que no la ataque y el que me sostiene es Nick.

—Gracias. —Me levanto y me pongo en guardia.

La bestia se retuerce e intenta luchar, pero la magia de la señora Miuriel la detiene.

—Hay que hacer algo, esto no resistirá por mucho tiempo, es un demonio muy fuerte —grita ella.

—Hay que llevarla al lago, esa es la manera de llevarla a la otra dimensión.

Le quito el libro a Lussy mientras la señora Miuriel arrastra con sus fuerzas a la sombra, todos somos arrastrados por la fuerza del hechizo y caemos al agua también, pero mantengo el libro a salvo para poder leer lo que dice mi abuela que abre el portal.

—Aperuerit ianuam introibo ad alternis universo —repito tres veces e imagino una puerta como leí más temprano que tenía que ser.

Pero nada sucede, todos me quedan viendo a la expectativa, solo hay dos opciones, o no trabajo bien bajo presión o simplemente no tengo el don de la abuela.

—¡Creo qué no tengo el don! —grito asustada.

¿Ahora que hacemos?

Lussy nada hacia mi en silencio y me arrebata el libro.
Lee en voz alta y entonces algo empieza a suceder, el mundo tiembla y el lago empieza a succionarnos , es como si unas manos invisible me tomaran por los pies y me arrastrarán hacia abajo.

En mi desesperada lucha por salir a la superficie, noto que no soy la única, que todos, incluyendo la bestia están pasando por lo mismo.
Al llegar al fondo del lago estoy sin aire y siento como las burbujas escapan de mi boca, cuando estoy por desmayarme por la falta de oxígeno, aparezco en la superficie de un riachuelo.

Escucho toses y pájaros cantando, observó mejor a mi al rededor, un río enorme, un bosque de árboles altos, un cielo nocturno y las estrellas iluminando la masa negra.

—¡Zoey! —La voz de mi hermanita me saca de mi ensoñación y la ayudó a salir del agua.

Cuando estamos en la orilla, Lussy me hace la pregunta que yo no me atrevía a hacer ni en mi mente:

—¿Donde estamos?

—Creo que lo lograste, pequeña.

—¿Estamos en otra dimensión? —susurra.

Noah se acerca a nosotras, su ropa está mojada.

—¿Han visto a Nick? —Se ve preocupado.

—No...

Mi voz es queda, me siento cansada.

—Tampoco sé donde se fue Amiel.

Sin muchas esperanzas de descansar aún, me levanto y siento una brisa fría.

—Hay que buscarlos —digo abrazandome para intentar darme calor.

Ignoro mi necesidad de volverme loca por no saber dónde estamos, ni donde está mi verdugo.
Noah pone sus manos que son bastante calientes, una en cada hombro, su calor me reconforta y me hace sentir más segura.
Las horas pasan y nosotros seguimos caminando por el bosque sin rumbo alguno y en silencio, Nick no aparece y mucho menos el demonio de Amiel. Es como si se los hubiese tragado la tierra.

Secretos (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora