31. Descubre tu singularidad

735 98 2
                                    


Después de vencer al héroe que se había convertido en villano la policía lo apresó y llegaron varias ambulancias para asistir a los heridos. Yo por suerte no he sufrido muchos daños así que han tardado poco en curarme. Mientras nos recuperamos y nos preparábamos para volver han llegado los de la prensa y han empezado a hacer toda clase de preguntas. Que uno de los héroes más respetados de la ciudad haya cometido un crimen así es algo que sin duda se convertirá en tendencia durante bastante tiempo. Encima ha sido un duro golpe para la comunidad de héroes, la confianza de la gente en nosotros disminuirá después de que todos se enteren que incluso los más respetables pueden convertirse en villanos.

Los tres héroes afirman que su victoria ha sido debida tanto a la chica que produce seda como a mí. La verdad ha sido bastante satisfactorio escuchar a unos auténticos profesionales decir que gracias a mi esfuerzo se han podido evitar muchos problemas y no ha habido que lamentar nada que no haya sido puramente material.

Al volver a la agencia Toxic Bubble me enseña mi habitación. Me instalo un poco antes de bajar. Allí se encuentran reunidos en la sala principal. Me pregunto qué harán aquí.

— Por fin llegas chico. Venga que hay que comenzar con el entrenamiento. —dice el más bajo de los tres.

— ¡¿Ya?! —digo algo incrédulo. No me esperara que después de lo que ha pasado empezara el entrenamiento tan de repente.

— ¿Quieres convertirte en un héroe o no? —dice Ancient Blade todavía mirando fijamente a la nada.

— S-sí señor.

— Bien, pues vamos a empezar. ¿Qué te parece si yo soy la primera en entrenarte? Las singularidades físicas son lo mio. —exclama Okarasu acercándose a mí.

— Vale, estoy preparado para aumentar mi fuerza. —digo emocionado.

Los dos vamos salimos a un patio interno del edificio el cual parece estar preparado para que se puedan realizar combates dentro de él. Ella se sitúa en el otro lado del patio frente a mí.

— Empecemos el entrenamiento. Lo mejor será simular un combate real. Así aprenderás a pelear mucho mejor que solo con realizar ejercicios que aumentan la fuerza.

— Bien. Estoy preparado para lo que sea.

— ¿En serio? Perfecto entonces.

Una sonrisa maliciosa se forma en su cara por unos segundos antes de que incline la cabeza. Su gran sombrero me impide ver su cabeza. Su lengua monstruosa vuelve a asomarse por detrás de este. Su sola visión me pone nervioso. Pero esta vez es distinto a la primera. Con su lengua agarra su sombrero y de golpe lo lanza hacia mí. De un salto consigo esquivarlo pero esta pasa muy cerca de mí. Maldición, no he tenido tiempo para activar mis alas.

Antes de aterrizar ella aparece de un salto a mi lado. Me agarra con su lengua. La sensación es horrible. Ella solo me lanza contra un muro. Como no tengo mis alas no puedo hacer nada y acabo chocando y cayendo al suelo.

— No siempre vas a tener tiempo para activar tus alas. Debes de convertir esa activación en un acto reflejo. Sé que puedes activarlas, pero para ello debes pensarlo. Si automatizamos eso podrás usar tu singularidad siempre que quieras y no tendrás que meditarlo para conseguirlo.

— ¿Y cómo hago eso?

— En eso consigue tu entrenamiento. Más te vale descubrirlo pronto por que una vez comienzo no tengo piedad.

Sus manos se convierten en enormes garras oscuras y vuelve a saltar hacia mí. Consigo esquivarlo rodando por el suelo y ella se queda clavada en el muro. Es el momento, ahora tengo tiempo para activar mi singularidad. Solo debo concentrarme.

— ¡No lo pienses! —sin darme cuenta he bajado la guardia. Ni siquiera he visto cómo se liberaba. Pero por culpa de entretenerme ella ha podido acercarse y darme una patada en el estómago. Caigo al suelo paralizado. La falta de aire me impide moverme.

Me agarra del cuello del traje y me lanza al otro extremo del campo. Caigo arrastrándome un poco por el suelo de tierra. Mierda, es muy rápida. Así no puedo concentrarme en activar mi singularidad.

— ¿No hay alguna forma de conseguirlo sin pensar? —mientras me levanto consigo recuperar algo de aire.

— Pues claro que sí, pero para ello necesitas dejar de hacerlo de la forma en la que activas tu singularidad. Tus brazos y piernas pertenecen a tu cuerpo igual que tus alas, pero para moverlos no debes estar un tiempo concentrándose ni meditar para poder usarlos. No debes ver tus alas como algo externo a tí, también son una parte de tu cuerpo y pueden activarse sin necesidad de pensarlo antes.

Vuelve a saltar contra mí, pero esta vez no puedo esquivarlo y el golpe me da de lleno en el costado. Casi vuelvo a caer pero esta vez consigo mantenerme en pie aunque me siento como si me fuera a caer en cualquier momento. Vuelve a arremeter contra mí. Me agacho y consigo evitar en golpe en la cara pero una nueva patada impacta contra mi cuerpo.

Antes de que vuelva a atacarme salgo corriendo hacia un lado del campo alejándome de ella. Necesito pensar algo para esquivar sus golpes. Ella no se compadece y salta directa hacia mí dispuesta a darme una patada en el aire. No me va a dar tiempo a esquivarla y no creo que aguante un golpe así.

Me cubro con mis brazos en un acto reflejo y noto su pié impactar fuertemente con mis antebrazos. Caigo de espaldas al suelo y antes de poder levantarme su lengua me agarra la pierna y me arrastra por el suelo hasta lanzarme a unos tres metros de ella.

Se acerca a mí lentamente. Está dispuesta a acabar ya el entrenamiento. No puedo permitirlo. Lo que ha dicho antes, mis alas actúan como mis piernas y brazos así que activarlas debería ser igual que mover mis piernas y brazos. Es como... Una mosca, puede mover sus tres pares de patas y sus alas. Son una parte del cuerpo, y al igual que las piernas y los brazos tienen nervios que hacen que estos se muevan, mis alas deben tener unos nervios que hagan que se activen. ¡Eso es! ¡Por fin lo he descubierto!

— Por tu cara, supongo que ya te has hecho una idea de cómo se activa una singularidad ¿Cierto?

No pienso en nada. Solo comienzo a flexionar los músculos de mi espalda y entonces ocurre lo que llevaba tanto tiempo intentando. Mis alas aparecen sin tener que haber meditado durante varios segundos. Sin embargo la emoción del momento no me permite ver a Okarasu acercándose. Esta coloca su pie sobre mi cabeza y empuja hasta que choco contra el suelo.

— Muy bien, me alegra ver que ya empiezas a controlarlo. El entrenamiento ha acabado por hoy. Aun así felicidades. Ahora que ya puedes activar sin problemas tu singularidad ya es hora de que empieces con tu entrenamiento en combate. Pero eso será mañana.Ahora es mejor que descanses.

Después del entrenamiento estaba tan emocionado que por muy cansado que estuviera no era capaz de descansar un poco. Estuve toda la tarde activando y desactivando mis alas. Al principio costaba un poco pero después de tres horas repitiendo sin parar acabé pillando el truco y ahora se me da bastante bien. No puedo esperar a mi entrenamiento de combate.

Dark Wings |BNHA|Where stories live. Discover now