34.

16.7K 645 127
                                    

Capítulo 34.

Los brazos de Niall sostienen mi cintura aferrandome más a él, su pecho está adherido a mi espalda como cada parte de su cuerpo al mío.
Adoro despertar así, adoro escucharlo respirar suavemente mientras duerme.
Estos días junto a él han sido un sueño maravilloso del cual no deseo despertar jamás.
Mientras busco mi teléfono bajo la almohada puedo escuchar la lluvia.
Ésta comenzó anoche, después de que decidimos acostarnos. Niall se reía porque la fiesta de Louis había terminado más temprano de lo planeado, fue muy divertido escucharlo reír a carcajadas mientras Louis maldecía por los pasillos.

-Buenos días preciosa. —Me llama él con voz rasposa, arrastrando cada palabra cuando siente mi cuerpo moverse.

-Buenos días precioso. —Digo y él suelta una risita mientras aferra sus brazos en mi cintura.

-¿Es muy temprano aún? —Me pregunta.

-Las ocho con veinte minutos. —Digo dejando nuevamente el teléfono bajo la almohada.

-Uhmm, demasiado temprano. —Susurra.

-¿A que hora deben ir al estudio? —Le pregunto.

-A las once. —Murmura al mismo tiempo que sus manos acarician mi estómago.

-Oh. —Musito. —Entonces, puedes seguir durmiendo. —le sugiero y él ríe.

-Ya no tengo sueño. —Susurra deslizando una de sus manos por debajo de mi pijama hacia la parte de arriba, casi cerca de mis pechos desnudos. Mierda.

-Recuerda que debes descansar para que ese comercial quede excelente. —Digo intentando que mi voz no suene tan nerviosa. Pero él vuelve a soltar una risita.

-Lo sé, sé que debo descansar. —Musita y sin previo aviso, la palma de su mano se posa sobre uno de mis pechos.

Me quedo sin voz. No puedo responder porque mis pensamientos se dispersan al sentir como acaricia mi pezón y éste se endurece bajo su tacto. El cuerpo de Niall se adhiere mucho más al mío, haciéndome sentir cada parte de él.

-¿Te gusta? —Me pregunta con voz melosa.

-Sí. —Digo apenas en un susurro. Él besa mi mejilla y volteo levemente el rostro para mirarlo, Niall me sonríe y yo también a él.

Su boca se acerca a la mía lentamente hasta que une nuestros labios. Su mano continúa sobre mí pecho, él lo aprieta suavemente y luego sus dedos juegan con mi pezón otra vez. Una sensación sumamente agradable desciende por mi estómago hasta la parte más íntima de mi cuerpo.

-¿Debería detenerme? —Me pregunta, pero no hace ningún esfuerzo por alejarse de mi, y yo tampoco deseo que se aleje.

-No. —Respondo y sin poder evitarlo tomo su labio inferior entre mis dientes y tiro de el suavemente, provocando que desde el fondo de su garganta suelte un pequeño gemido.

-Eres una salvaje. —Me acusa juguetón.

Sus palabras me hacen reír. Niall también se ríe para luego volver a besarme.
Nos besamos durante un largo tiempo, su mano no desciende a ninguna otra parte que no sea mi estómago y mis pechos y me hace sentir ansiosa.
Es por eso que, un tanto inexperta como la vez anterior y con ganas de más, me muevo rozando mi trasero sobre su entrepierna.
Mi corazón late tan fuerte, sé que él puede sentirlo.

-Magdalena, si vuelves hacer eso, no respondo por mis actos. —Me advierte y yo sonrío.

Vuelvo hacerlo por supuesto. Vuelvo a rozarme contra él y de sus labios se escapa un sonoro gemido. Su entrepierna está dura, exactamente como la vez anterior.

𝐃𝐄 𝐔𝐍 𝐒𝐔𝐄Ñ𝐎 𝐀 𝐋𝐀 𝐑𝐄𝐀𝐋𝐈𝐃𝐀𝐃 - 𝐍𝐇 𝐁𝐘 𝐍𝐀𝐓𝐇 🥀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora